Tras nuestro pequeño incidente aquella proposición no era la mejor pero me sentía responsable de que el pobre Connor se encontrase así. Evalúe brevemente mis padres no tendrían problema total no iban a estar ni en casa, así que acepte la oferta asumiendo los posibles riesgos.
Lejos de cualquier pensamiento impuro que pasara por mi cabeza Connor se estaba comportando, pedimos comida china y pusimos una película en netflix. Se sentó a una distancia prudencial y no se acercó en toda la película, lo cual agradecí en cierto modo porque estar con un tío sola viendo una película solo podía significar algo: follar. Aunque en nuestro caso las cosas no acabaron ahí sino que acabamos en un debate donde casi le arranco la cabeza.
—Esta guay el rollo del amor eterno y esas cosas pero el tío estaba sufriendo es injusto que alguien le pida que sufra para estar juntos, joder que no puede ni follar—sí, acaba de decir la palabra prohibida.
— ¡¿Pero tú solo piensas en eso?!
—La mayor parte del tiempo sí, pero no estamos hablando de eso, si quieres a una persona y llega a ese estado tienes que respetar su opinión porque no solo estaba sufriendo él, ella también. ¡¿Y si un día ella se cansa de él qué?! No jodas, que el amor eterno no existe, Connor, tú crees en unos ideales que son imposibles hoy en día y encima eres un mujeriego, te contradices.
—Primeramente no soy un mujeriego, segundo no me contradigo y tercero es que eres muy pesimista Siobhan...
—Deja de llamarme así que pareces mi padre.
—Es tu nombre y no cambies de tema, sabes que tengo razón, ¡al final acabas como la vieja loca de los Simpson con cuarenta gatos!
—Sufrir y hacer sufrir, es una idea estúpida Connor, si amas a alguien realmente no la mantienes a tu lado sufriendo, las cosas son así de simples.
— ¿Entonces tu eres de las partidarias de lo de "si amas algo déjalo ir"? Si realmente amas algo no lo dejas ir, luchas por ello.
—Eso es egoísta, luchas si es reciproco si no técnicamente estas obligando a alguien a estar contigo, eso es inimaginable.
—Y si te digo que me gustas y me gustaste desde el primer día en que te vi, es de sabios retirarse a tiempo pero no cuando existe una oportunidad, y eso es lo que estoy haciendo, no dejarte ir a pesar de que suene egoísta, a pesar de que...—me lancé no pude evitarlo, era algo que deseaba hacer desde que pasó en el salón de mi casa.
Sabía que estaba mal seguirle el juego ante todo Connor era un tío que sí que era mi amigo y que me estaba ayudando, pero no podíamos mentir, había algo, sabía que nuestra discusión no era más que una excusa y sabía que iba después de las discusiones aunque mi corazón estaba destrozado me por momentos lo único que llevo a cabo aquella acción fue un ataque de lujuria.
Connor me gustaba, estaba bueno y era inevitable no caer ante sus encantos y más si le tenías tan cerca así que cuando correspondió mi beso no frene, acelere. Me adentre en arenas movedizas, la razón tampoco estaba por la labor y me abandonó cuando más la necesitaba.
No había razones para rechazar aquello era una mujer libre, pero me detuve al pensar en que quizás estaba utilizándolo para olvidar a Tyler, para llenar el vacío que había tanto en el tema sexual como en la falta de ese amigo incondicional. Entonces me detuve y me separe de él.
—No puedo Connor, ¡¿no ves que te estoy utilizando?! Soy una...
—No me estás utilizando Siobhan, qué te crees que soy tan inocente, me gustas Siobhan lo cual resulta más que evidente—sí, sus pantalones revelaban un bulto que momentos antes era inexistente y me sonroje, él se empezó a reír—. No quiero que te sientas comprometida ¿vale? No quiero tampoco que te sientas mal ni que pienses que te ayudo porque pretendo que te acuestes conmigo, ante todo somos amigos y espero que eso siga siendo así a pesar de todo pero no pienso rendirme Tyler perdió su oportunidad contigo cuando se fue sin mirar atrás y se que puedo sonar como un cabrón hijo de puta porque es como mi hermano pero...
Yo no daba crédito, ¡¿pero qué cojones me estaba diciendo Connor?!
—No hace falta que digas nada ¿vale?
—Pero déjame hablar por lo menos, a ver los dos sabemos que aquí hay algo, no sé qué es pero algo hay pero no estoy preparada para meterme de nuevo en una relación.
—Siobhan, sé por lo que estás esperaré por ti y pase lo que pase no dejare que esto influya en nuestra amistad, dicho esto es buena hora para dormir—se levantó—. Y ahora para que veas que no te doy ningún trato especial dormirás aquí.
En el frío, duro e incómodo sofá... vaya mierda de excusa para mandarme al sofá.
—Encima que te acompaño y todo me vas a dejar dormir aquí... ¿en serio tío?
—Yo no tengo ningún problema en dormir contigo pero no me hago cargo de mis acciones dormido, ya sabes que soy peligroso—dijo sonriendo y levantando las cejas de forma insinuante—. Yo no te dejo pasar frío.
Después del beso dormido y del pedazo de beso que me puso a cien en un par de minutos, no, no era una buena idea.
—Creo que lo mejor será que me quede aquí por el bien de nuestra amistad y de mi integridad.
—Mira que eres exagerada, ni que te fuera a violar—o yo a ti tal y como están las cosas me espero cualquier cosa.
—Deja de quejarte tanto y dame una manta digo yo que no me dejes pasando frío por declinar tu oferta.
—Aunque no te lo creas soy un caballero.
—Un caballero que me manda al sofá.
—Sofá-cama—me corrigió marchándose a su habitación, volvió con una almohada, una manta y una sábana—. Espero que no me babees la almohada y que no ronques mucho, que tengo el sueño ligero.
—Uy sí vamos ligerísimo, hoy voy a roncar como nunca y encima te voy a babear toda la almo...—no me dejo continuar, me beso y no pude separarme, ¡¿qué cojones me estaba pasando con Connor?! ¡¿por qué le dejaba hacer eso?! ¡¿por qué le seguía el juego?!
—Me gusta que me retes, y que me insultes, normalmente mandaría a cualquiera que me hablase como a veces lo haces tú pero en el fondo me gusta que me sigas el rollo—porque sin darme cuenta entro a tu terreno—. Lo siento, no debí besarte, creo que debería irme a mi lado para evitar cosas.
—Sí, creo que sería lo mejor...—alcance a decir pero lo que realmente quería decir no era aquello, quería seguir besándolo porque por primera vez en mucho tiempo me sentí viva.
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Ni cambios ni devoluciones
Romansa¿Y que si es idiota? ¿Y que si es un badboy? ¿Y que si me está volviendo loca? ¿Y que si ha invadido mi casa? Le amo.