Capítulo XXVIII: Espíritu adolescente

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SUSAN

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SUSAN

Me unto el lápiz labial color durazno, mientras Derek me observa desde la cama. Su rostro parece una captura de foto: inmóvil, solo un gesto plasmado en él; está afligido. Yo también lo estoy, pero intento no hacerlo notar. Quiero que me acompañe al reencuentro, pero francamente mi orgullo puede más.

Termino de maquillarme y suelto mi cabello, de modo que cae en ondas sobre mi espalda. Derek sigue observándome, esta vez veo sus ojos vidriosos, y cuando se da cuenta que lo miro por el espejo, agacha su cabeza. Trago duro para que el nudo en mi garganta desaparezca, pero solo aumenta.

Me levanto del tocador y camino en busca de mis sandalias. Pensé en ponerme tacones-mi altura es poca-, pero quiero estar cómoda. Creo que le he cogido como que odio a los tacones; debe ser porque en el Joy's Shop Loyda nos obligaba a usarlos...

Aún no puedo creer que esté muerta. La noticia me causó conmoción, pero la verdad no lloré. Ninguna de las chicas lo hizo, aunque no sé de Whitney. Ninguna la ha visto desde aquella vez que los policías se la llevaron para interrogarla, desde aquella vez que recibió la llamada de Loyda... Aún me pregunto qué le dijo ella en esa llamada. Le he enviado varios mensajes a Whitney, pero al parecer está desconectada del mundo, hasta su Facebook cerró. No sé, tampoco le voy a insistir.

-Llévate a Vanellys-escucho que Derek dice y lo miro de soslayo. Está mirándome directamente.

-¿Para qué?-Inquiero.

-Ha estado encerrada en casa de su madre desde que salió de rehabilitación... Le hará bien que salga y se divierta un rato-contesta y ahora lo miro directamente. Su barba está creciendo, no es mucha la que se ve, pero puedo notarlo.

-¿Crees que se divierta conmigo en el reencuentro?-Replico, dudando que Vanellys lo haga.

-Le divertirá cualquier cosa que no sea estar encerrada con su madre-me dice, escudriñándome con la mirada.

-Bien. Entonces me la llevaré-digo y me dispongo a caminar en busca de mi bolso. Me doy una última ojeada en el espejo y noto lo sencilla que me veo: vestido florar ajustado en la cintura, maquillaje natural, cabello natural ondeado y sandalias. Esta noche no llamaré la atención en lo más mínimo, pero ese es el propósito.

Inquebrantable-Mi vecino misterioso 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora