El Juego del Destino {Isco Alarcón}.

Parte 68.

Sophia Pov.

—Bueno, ¿que vamos a hacer con las niñas? -dije alejando mi mano de la suya.
—Pues ahora que ya se conocieron no podemos mantenerlas separadas.
—Yo puedo tenerlas la mitad del año y tú la otra mitad.
—Escuchen, no pueden ir a dos escuelas diferentes cada año, no es lógico. -Marcelo intervino en nuestra conversación.
—Tienes razón. -Francisco lo miró.
—Entonces estarán conmigo todo un año y luego tú.. -Marcelo negaba atento a nuestra conversación.
—Yo creo que deberíamos... -se detuvo para mirar a Marcelo que seguía de chismoso.
—Lo siento, ignorenme. Disfruten su sopa. -dejó los platos en la mesa y se marchó.
—Si, por eso fue que llegamos al acuerdo que ya teníamos.
—¿En serio? -lo miré atenta. —yo creí que era porque habíamos decidido no volver a estar juntos.
—No fuimos los dos. -se notaba que el tema le incomodaba.
—Pues esa parte se ha hecho confusa para mi a través de los años.
—¿No recuerdas el día en que empacaste? -la tensión se hacia parte de nuestra conversación.
—Ese si lo recuerdo perfectamente. -hice una pausa mientras recordaba ese día. —te lastime cuando te arrojé ese... Eso fue una.. -no lograba recordar.
—Fue un florero. -me miró fijamente.
—Ah, ya, entiendo. -no pude evitar soltar una pequeña risa.
—Quizás no volvamos a estar solos. -miró a su alrededor. —así que quiero que me hables de ese día. ¿Por qué te fuiste?
—Ay Francisco, éramos unos niños y teníamos nuestros temperamentos. Dijimos cosas estúpidas así que empaque. Tomé el primer avión que me llevara con mi hermana a Múnich y... -hice una pausa y lo miré fijamente. —tú no fuiste por mi.
—No creí que quisieras volver a verme.
—Eso ya no importa en absoluto. Así que disfrutemos de nuestras hijas y solucionemos esto.
—Si claro, hallaremos una solución.

La cena transcurrió normal, a pesar de que ambos no estábamos muy cómodos después de esa conversación. Todos volvimos a casa, al final habíamos quedado en que las niñas pasarían las vacaciones navideñas conmigo y las vacaciones escolares con él.

Marc Pov.
Finalmente estábamos a un partido para que nos dieran el trofeo de la Liga, todo el equipo estaba muy emocionado. El partido sería el sábado así que todos nos estábamos preparando.

—Hey Serg, ¿que harás más tarde? -le pregunté mientras salíamos del entrenamiento.
—Salir con Carolina. -sonrió.
—Lo imaginé. -ambos reímos.
—Hola mi amor. -Carolina apareció y abrazó a Sergi. —Hola chicle Bartra.
—Algún día voy a quitarte el amor de mi Sergi. -todos reímos.
—Ni lo intentes, pero tú. -señaló a Sergi. —Debemos ir al centro comercial.
—¿Para qué cariño?
—Necesito comprarle un regalo a mi mejor amiga. -sonrió. —Sophia cumple años pasado mañana.
—Carolina, ¿por qué no me habías dicho nada? -la miré.
—Porque tu eres un stalker, se supone que deberías saberlo.
—Pues obviamente no lo sabía, pero como soy tan genial ya tengo el regalo perfecto.
—Deberías compartir la información conmigo Marqui.
—Como cambian las personas, de un momento a otro pasé de chicle a Marqui. -Sergi solo se reía.
—Esta bien, no me digas nada. Total, soy su mejor amiga y cualquier cosa que le regale le va a encantar. -tomó a Sergi del brazo. —vamos amor, Marc es mala influencia para ti.

Carolina se llevó a Sergi y yo seguía pensando en mi regalo para Sophia, iba a planear todo para que saliera perfecto.

Llegó el día, era el cumpleaños de Sophia y tenía todo planeado para su regalo, nadie ni siquiera Sergi sabía lo que haría.

Francisco Pov.
Hace unos días fue la cena que planearon las niñas, lo admito, seguía sintiéndome culpable por las palabras de Sophia, ese tú no fuiste por mi retumbaba a cada instante en mi mente. Todos tienen razón no sé porqué deje ir a Sophia, ahora no podía hacer nada, yo estaba a punto de formalizar mi compromiso con Victoria, no podía dejarla y menos ahora que se enteró del asunto de las gemelas y aun así me perdonó.

Estaba en mi habitación y una Nathalie eufórica entró a mi habitación.

—Buenos días papá. -se subió a mi cama y empezó a saltar en ella.
—¿Qué sucede Nathalie? -la miré y se sentó a mi lado.
—Hoy es el cumpleaños de mamá. -ni me acordaba de su cumpleaños. —estoy emocionada, por primera vez pasaré su cumpleaños con ella papá.
—Entiendo Nat. -sonrei.
—Debes llevarme a casa de la tía Alex, ahí le haremos una sorpresa.
—No se si pueda Nathalie, quedé con Victoria para salir. -su alegría se esfumó en un segundo.
—Papá, debes llevarme, es el cumpleaños de mi mamá. -hizo pucheros.
—Esta bien Nat, iremos. -sonrei.
—Gracias papá, eres el mejor, te amo. -besó mi mejilla y salió de la habitación.

Luego de una hora, Nathalie estaba lista para ir a casa de Toni, cuando íbamos a salir llegó Victoria.

—Hola cariño. -rayos, se me olvidó decirle que se cancelaban los planes.
—Hola cielo. -me besó y pasó hacia la sala.
—Papá, ahora si, vamos. -se quedó mirando a Victoria.
—Hola pequeña. -Vito la saludó.
—Papá, ¿qué hace ella aquí?
—Nathalie, por favor.
—Tu padre y yo íbamos a salir hoy. -me miró confundida. —¿van a salir?
—Si, justo nos íbamos a casa de mis tíos para celebrar el cumpleaños de mi madre. -Nathalie miró mal a Vito.
—Francisco, debiste avisarme, así yo no los molesta... -la interrumpí.
—No hay problema amor, ven con nosotros. -no quise voltear a ver a Nat porque seguro estaba más que enojada.
—No quiero incomodar, en serio no hay problema si no salimos hoy. -dijo tomando su cartera.
—Nos vemos luego Victoria. -Nathalie soltó tajante.
—No Vito. -la tomé del brazo. —no hay problema si nos acompañas. -sonrei.
—Esta bien amor. -la besé.
—Pues ya que, vámonos. -Nathalie tomó sus cosas y salió de la casa.

El camino a casa de los Kroos estuvo silencioso, pude notar la molestia de Nathalie, a veces Vito y yo hablábamos, pero de resto ni una sola palabra.

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Hello, it's me🎶🎤🎤.

Hola mis querubines😂😂.
Sólo les dejo este mensaje para que se den un paseo por el instagram de la fic. Vaye y vea las publicaciones de todos estos locos, vaye, vaye😂😂.

Love u all💋💋.