Capitulo 5

150 13 3
                                    


Yo me iba a morir si eso había pasado ¡¿Cómo me había acostado con Elías?! Eso si que jamás Santiago me lo perdonaría, ni yo misma.

- Solo estoy jugando contigo – dijo.

- Oh por Dios – sentí como el alivio se disperso por mi cuerpo.

Le di un golpe en el hombro, con mi puño y un poco de fuego. El pego un pequeño grito por la quemadura.

- ¡Joder, solo era un chiste! – comento sobándose el sitio.

- Casi me produces un infarto – dije.

- Infarto me iba a dar a mi cuando vi a esos hombres achicharrados, no puedes matarlos a diestra y siniestra.

- ¡Pretendían lanzarme por el barranco!

- Tienes que tener más cuidado Guess y no salir sola, recuerda que eres el blanco.

- No puedo no salir si mi instinto lo percibe, nose pero desde que tome el puesto siento que debo salir a batallar todo, no como antes que era una simple responsabilidad.

- Ese es el espíritu del dragón, pero él no estará para salvarte, así que tu espíritu salvaje guárdalo para cuando sea necesario.

.............

Al día siguiente amanecimos con la noticia que el clan de la mafia china izquierdista había sido atacado, bombardeado y ejecutado por tierras subterráneas, Ignacio estaba más que complacido y en plena reunión de líderes y jefes, ya instalados en la nueva sala, nos mostró las imagines y se hizo responsable del hecho; explico que lo tenían harto y con ayuda de algunos amigos "malos" logro atacarlos sin ser detectados, los rumores y noticias especulaban que había un saldo 223 personas muertas y 75 heridas, hasta en número de muertos rebasaban nuestro activos. Yo estaba conmocionaba por la noticia, no me alegraba que la gente muriera pero creo que esto acabaría la guerra de inmediato.

- No deben preocuparse, nunca sabrán que somos nosotros, use agentes externos de países cercanos a ellos, es imposible que sepan quien lo hizo, sus investigaciones terminaran apuntando hacia el medio occidente – decía – Así que por ahora tenemos una hormiga menos en el camino, es hora de centrarnos en Patasky, la semana que viene estará en la ciudad para ajustar algunos de detalles de entrega y aprovecharemos la oportunidad para atraparlo – me miro - ¿Entendido?

Asentí, igual que el resto y finalizo la reunión. Me reuní con mi equipo para entrenar, y esta vez seria en conjunto con el grupete de Sebastián y su nuevo integrante, ocupando el puesto de Moi. Su nombre era Thomas, tenía apenas 20 años y ya era una gran potencia, también se parecía a Tony en esa edad. Entre Sebastián y yo desarrollamos el entrenamiento, que fue un mix de combate, asalto y defensa. Le estábamos exprimiendo el jugo a todos pero no podíamos bajar el ritmo, la semana entrante daríamos nuestro primer ataque y no teníamos una idea exacta de que nos esperaba. Y así se fue mi semana, preparándome física y mentalmente para atrapar Bernardo, había entrenado como nunca, los lideres me hicieron comer unas cuantas veces el piso, sude hasta más no poder, mis tobillos estaban hinchados, mis uñas destrozadas pero nada me desmotivaba.

..................

Sebastián logro tirarme una vez más al suelo, quedando sobre mí y haciéndome comer del el. Estaba agotada y dolorida en el ring, mis manos sudaban por los guantes de boxeo, al igual que me frente y cuello estaban empapados de sudor.

- ¡Derribada! – exclamo sin dejar de aplastarme.

- 36 para Sebastián y 32 para Naomi – acato Alan.

SantiagoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora