Escondida

39

Estábamos jugando a marco-polo en el mar. Me abracé al tío Harry evitando reír y retrocedimos juntos.
-Me rindo.-se quejó el tío Liam y nosotros comenzamos a reír.-Sólo ustedes saben jugar.
-Le enseñé cómo ser ciega. Nunca va a perder.-dijo el tío y los tres nos dejamos caer en la arena.-¿Qué queres hacer hoy?
- Vamos a enseñarle a leer y él va a enseñarnos a cocinar.-dije abrazada a ambos.- Espero que no tengamos que pedir comida después.
-Confío en ustedes.-dijo el tío y reí.
-No deberías hacer eso.-dije y me senté torpemente. Suspiré.
-¿No las sentís?-preguntó.
-No.-murmuré.-Creo que lo que más me asusta son todas las cosas que voy a perderme.
- Vamos a hacer que tengas ganas de probar muchas cosas nuevas.-dijo el tío Harry y se puso de pie mientras el tío Liam me alzaba.-No vas a renunciar. Sos sobrina nuestra. No podemos permitirlo.
-Algún día voy a levantarme y ya no voy a poder caminar.-murmuré a la vez que entrábamos en la casa.-No voy a poder bajar las escaleras. No voy a poder jugar a marco-polo, ni van a alzarme. No voy a poder sentir los pies fríos ni cambiarme de cama a media noche.
-Darcy...-empezó el tío pero yo negué.-Estás lastimándote. Tenemos la medicación y...
-Lo sé.-dije y me abracé a él.-Lo sé.
-Vas a poder operarte.-negué.-Si. Si todo empeora vas a operarte.
-Voy a despertarme en un hospital sin saber si voy a poder o no caminar. No quiero eso. Quiero... Sólo quiero que nunca llegue la hora.
-Bueno, no te me vas a deprimir ahora.-dijo y besó mi cabeza.- Vamos a comer algo bien rico y después vamos a ir a comprar. Vamos a buscar algo que nos ayude a divertirnos acá en la tarde. Vamos a alquilar una película para hoy a la noche y a ordenar todo para nuestra pijamada.
-A mi no me gustan las películas.-dijo el tío Harry y tomé su mano.

-Podemos comprar un cd nuevo.-sugerí.-Podemos empezar una colección de cd's.-me entusiasmé entonces a la vez que el tío me llevaba al baño.-Eso sería genial. Tío, eso sería un gran recurso para nosotros, podríamos componer en nuevos géneros musicales. Y el tío Harry sería un gran compañero, y... Y...

-Ya.-rió y me ayudó a sacarme la remera a la vez que abría el agua.-Me parece una idea genial. Podemos hacerlo. Pero primero tenes que bañarte. Yo voy a ir ya a comprar las pastillas. ¿Si? Portate bien. Voy a mandar a Harry a hacerte compañía.

-Tío, si ya no puedo caminar, papá va a irse ¿cierto?

-Tu papá pudo haber sido un tonto pero, Darcy, eso pasó hace ya muchos años. Sabes cuánto te ama. Y, ¿sabes qué? Sería bueno que lo llamaras. Él debe estar muy preocupado justo ahora.

-Freddie está muy enojado conmigo.-dije.- Todos deben estar muy enojados.

-Llamá a tu papá.-dijo acariciando mi rostro y me alcanzó el teléfono para luego besar mi frente y marcharse.

Marqué y aguardé. Los tonos se detuvieron y contuve el aliento.

-Hola.-dijo papá. Tenía la voz más grave por teléfono. Se oía molesto.-¿Hay alguien ahí?

-Si.-musité.

-¿Darcy?-preguntó.-Darcy, por el amor de Dios, ¿dónde estás? Hija, decime dónde estás.

-No puedo.-murmuré.

-¿Cómo que no podes?-preguntó. Cada vez hablaba más alto y más rápido. Sonaba asustado.- Darcy, decime dónde estás ahora mismo.

-¿Es Darcy?-escuché que preguntaba mamá.

-No sé dónde estoy. Me dormí en el camino.-murmuré.

-Como una bebé.-rió el tío Harry entrando.

-¿Harry está con vos?-preguntó ya molesto.

-Papá, estoy con los tíos.-dije.- Pero...-suspiré molesta y aparté el aparato de mi oído.

-¿Qué pasa, dulce?-preguntó el tío, con la mano en el agua, haciendo pequeñas olas.

-El tío dijo que lo llame, pero él no quiere escucharme. Él quiere venir. No entiende.

-¿Qué cosa no entendió?-preguntó y se sentó junto a la bañera.

-Que ustedes si me entienden.-dije.-Ellos sólo querían pelear para ver cuál era mejor.

-Y nosotros jugamos marco-polo.-rió.-Leemos, escuchamos música, cocinamos.-besó mi mejilla y reí.- Hoy fue divertido, ¿no es así?

-Si.-dije.- Me gustaría que con ellos fuera así. Ellos no quieren que estemos juntos. No saben que yo soy tus ojos.

-Y yo tus piernas.-murmuró.- Creo que les cuesta entender nuestro juego. Tu papá está asustado. Tu mamá quiere la tenencia completa, Darcy. ¿Sabes lo que eso significa?

-Significa que a nadie le importa que yo quiera ver a papá y a mamá todos los días. Al final, van a hacer lo que ellos quieran. Siempre es así. Antes Freddie no los dejaba. Y ahora pareciera que él tampoco quiere verme. No me gusta ser Darcy Tomlinson.

-¿Y quién queres ser?-preguntó él.

-No lo sé. Solo ya no quiero ser yo.

-Ellos te aman más que a nadie. Lo sabes, dulce. Puede que no hayan tomado las mejores decisiones, pero todos tenemos que aprender. Ahora, creo que ya te escuchó todo lo que querías decir.

Miré el teléfono. No había cortado la llamada. Lo llevé a mi oído, suspiré y aguardé. Nadie dijo nada. Cortaron y comencé a llorar como niña pequeña antes de meterme bajo del agua a la vez que luchaba contra los brazos del tío Harry.

-¡Darcy!-gritó mientras yo tosía toda el agua y él me pegaba a su pecho.-Nunca vuelvas a hacer algo así. Darcy Hillary Tomlinson, nunca en tu vida vuelvas a intentar siquiera hacer algo así.

-Podría matarme.-musité.

-No. Yo no voy a permitirlo.-declaró y me tomó mejor.-No voy a permitirlo.