Capítulo Séptimo

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- Ni se le ocurra ponerle un dedo encima. - La voz de Heriberto sonó letal.

Alonso miró enfurecido al hombre que le sostenía la mano, se deshizo de su agarré y al mirar de nuevo a la mujer, reaccionó al instante.

- Victoria... - ella le miró con desprecio

- Alonso... - El rostro de Alonso pasó rápidamente de la furia, a la confusion, luego de nuevo al enojo.

- Debí suponer que serias tu.. - Victoria lo miró con fastidio, Heriberto no le quitaba la mirada al hombre, ese era el ex-marido de Cristina, al que había visto sostenerla con fuerza, el mismo que le había herido el labio y que ahora casi golpeaba a Victoria al confundirla con su hermana gemela, sintió que se enfurecía por momentos, odiaba la violencia, pero muy bien podría partirle la cara a ese idiota. - a ti te encantan estos espectáculos de mujerzuela.

Heriberto se dejó dominar por la ira por primera vez en su vida y tomó al hombre por las solapas del traje.

- No pienso permitir que le hable así, a Victoria, y créame que estaré encantado de partirle la cara - Victoria lo sostuvo alarmada, le tomaba del brazo y le pedía que se detuviera - , a ver si es tan machito conmigo. Deje de acosar a Cristina, porque como le vuelva a poner una mano encima se las va a ver conmigo.

- Te atreviste a ponerle una mano encima a Cristina? - Preguntó Victoria con voz estridente y Alonso la miró altivo.

- Los asuntos entre Cristina y yo son de nosotros, y solo nosotros - Dijo mirando con intención a Heriberto - sabemos como resolverlos. Heriberto lo soltó antes de cometer una locura y Alonso casi se cae al suelo, Victoria respiró agitadamente -Ahora resulta que a mi mujer le salió defensor - Victoria frunció el ceño. Alonso recordó al medico que había visto con Cristina, y ahora que la defendía no pudo evitar sentir celos al pensar que el hombre defendiera a su mujer - Y ahora que te veo besuqueandote con el, entiendo todo. Vas a repetir historia Victoria? Es que acaso están Cristina y tu enfrentadas otra vez por un hombre.

- Eres un maldito desgraciado. - Victoria se había puesto pálida y sus ojos se llenaron de lágrimas.

- Solo porque digo la verdad. - Heriberto estaba conteniéndose para no matar al hombre, pero Victoria no lo soltaba.

- Tu no sabes que significa esa palabra, eres una basura mentirosa.

- Tu también. - Alonso se fue, y Heriberto se soltó de las manos de Victoria con fuerza.

- Debiste dejar que lo golpeara.

- No vale la pena - Victoria carraspeo, sentía como su pecho se oprimía al contener el llanto. Heriberto la miró con expresión confusa. - Gracias por defenderme... Pero... Me tengo que ir.

- Victoria... Estas temblando... Deja que te lleve a donde vas.

- No... No es necesario... Estoy... Estoy bien... Yo - Las lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos y ella empezó a respirar agitadamente. El la sostuvo en sus brazos y ella lloró desconsoladamente, ella se ocultó en su pecho y el acarició su cabello susurrándole palabras tranquilizadoras.





Galería de arte



- Podemos ir a ver aquellas, mamá? - Cristina observaba una fotografía colgada en la exposición de fotografía. Asintió sin dejar de verla

- No se alejen... - Fernanda y Acacia caminaron juntas, dejando a Cristina quien observaba con detalle la imagen.

Un hombre la observó y la reconoció, se acercó a ella.

- Que coincidencia verte acá, iba a buscarte a tu oficina. - Cristina miró al hombre y enarcó una ceja.

- Creo que me estas confundiendo. - El hombre entonces comprendió y la señaló con el dedo.

- Cristina...? - Ella sonrió y frunció el ceño confundida.

- Así es... Tu eres?

- Hector Robledo... Creí que eras Victoria.

- Hector Robledo...? El abogado?

- Así es! - El sonrió abiertamente. Ella sonrió en cambio y extendió su mano para saludarlo.

- Papá habla mucho de ti. - El le estrechó la mano con suavidad.

- Supe que tuvo un infarto. No he podido verlo, estaba fuera de México, tu hermana me hizo regresar. - Hector señaló con su cabeza la imagen que hacia momentos Cristina observaba con tanta intensidad. - Eres fotógrafa no? - Ella asintió - Que tal te parece esa imagen.?

Cristina consideró sus palabras, antes de decirlas.

- Es muy hermosa, creo que yo la hubiese tomado de otra manera, así no logro descifrar la emoción, claro que el fotógrafo es amateur. - Cristina lo miró entonces - Como sabias que soy fotógrafa?

- De la misma manera que tu sabes que soy ahogado.. Tu padre habla de sus hijas con bastante frecuencia. - Cristina sonrió.

- Así que es una foto carente de emoción, eh?

- No... Digo que a mí, no me transmite ninguna emoción.

- Quizás debas enseñarme como lograr darle emoción. Debo confesar que me desmoralizaste, creí que había tomado una gran fotografía ,- Cristina abrió los ojos sorprendida y avergonzada, se sonrojó y titubeó una disculpa, el sonrió. - No tienes que disculparte, es refrescante que te digan la verdad.

- Lo lamento...

- Te aceptaré la disculpa, si logras enseñarme a darle emoción a mis imágenes. - El le sonreía y ella rió en respuesta

- Bueno..




Estacionamiento del Hospital

"Tu Eres Mi Elección"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora