Juan Carlos se levantó y se paró frente a su hija, la miró fijamente y vio como la luz en sus ojos se apagaba, su rostro palidecía rápidamente y sus labios perdían el color.
- Victoria... - ella miró a su padre entonces y una lágrima se deslizó en su mejilla.
- No está bien. - Juan Carlos tembló y le tomó la mano. Heriberto entonces se dirigió sin dudar a la sala de partos.
- ¿Tia... ? - Victoria pareció salir del trance y miró a su angustiada sobrina.
- No te preocupes... Todo va a salir bien - La voz temblorosa de Victoria impidió que Acacia se sintiera tranquila. Las muerte de su padre había sido un duro golpe, perder a su madre la llevaría a la locura. Después de unos minutos interminables, Heriberto salió. Victoria se acercó a él y se aferró a su camisa. - ¿Qué pasó? ¿Qué te dijeron?
- No me dejan entrar, sin embargo pude enterarme que ha habido complicaciones. - Victoria gimió y Heriberto la abrazó. - Confío en que todo estará bien. - Juan Carlos abrazó a su nieta.
Sala de Partos
- Tendremos que ayudarla, Señor Ferrer necesito que usted se prepare para traer al mundo a su hijo. - Dionisio temblaba y observaba el rostro pálido y casi inerte de Cristina.
- Despiértela, ahora. - su voz sonaba dura.
- No hay tiempo, este bebé debe nacer ya. - le explicó que tendrían que hacer las veces de Cristina, que tendría que presionar el abdomen con cuidado y precisión, era una practica contraindicada, sin embargo era eso o dejar que el bebé muriese. La enfermera monitoreaba los signos vitales de Cristina que a cada momento y se acercaban peligrosamente a la muerte. Dionisio se pasó las manos por el cabello.
- No puedo hacerlo.
- Claro que puede, usted ama a Cristina y a su hijo. - Dionisio miró a la doctora y un pitido en el monitor sonó. - Vamos señor Ferrer. - Dionisio hizo con su cuerpo temblando todo lo que le pedía la doctora. Unos minutos después, un niño de 3 kilos de peso, y coloración azulada salía del vientre de Cristina, la pediatra lo tomó y se avocó a controlar sus signos vitales, fue entonces cuando después de dar las gracias a Dionisio, la obstetra comenzó a realizar reanimación cardiulmonar a Cristina, el monitor estaba indicando una línea que correspondía a una asistolia, muerte... Cristina estaba muriendo y Dionisio estaba paralizado, el recuerdo de la muerte de Camila le atravesó como un rayo, pero esta vez lo dejaba sin aire, sin esperanza.
Uno, dos, tres.... La doctora contaba las veces que presionaba el pecho de Cristina, la enfermera insuflaba aire en los pulmones con una mascarilla conectada a una especie de globo, administraban medicamentos. Dionisio no podía dejar de mirar el cuerpo sin vida de la única mujer que había amado. Si ella moría... El llanto estruendoso de un bebé lo sacó de ese pensamiento doloroso, y escuchó decir a la pediatra con dulzura.
- Buen chico - cuando parecía que todo iba bien, la pediatra se volvió a él y le sonrió. - ¿Quiere conocer a su hijo? - Le tendió al bebé envuelto en una manta y Dionisio lo tomó, el bebé lloraba y Dionisio soltó el aire con fuerza, una lágrima se derramó en su mejilla y le sonrió con temblor a su hijo.
- Hola hijo - Su voz entrecortada conmovió a la pediatra, pero enseguida se unió a la obstetra para ayudar con la reanimación. Dionisio se volvió y se acercó angustiado a Cristina, muy cerca de su oído. - Escucha Cristina, el llanto de nuestro hijo. Vamos... Te necesitamos mi amor, no puedo solo y lo sabes.
- Señor Ferrer, será mejor que acompañe a la enfermera afuera - La obstetra temiendo lo peor, miró con intensidad a la enfermera.
- No. Vamos querida, eres mucho mas fuerte, escucha como te llama tu hijo. - El bebé lloraba con fuerza y la pediatra miró a su colega con tristeza. El sonido del monitor, indicando que había vida. Lo que pasó después, fue como si fuese una película, Dionisio se vio arrastrado a un rincón del lugar, mientras todos procuraban dar atención a Cristina. Unos minutos después, la pediatra extendió los brazos para que Dionisio le entregara al bebé.
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"Tu Eres Mi Elección"
FanfictionCristina Maldonado Rivas es una mujer vivaz y noble, fotógrafa retirada, divorciada de Alonso Rivas un hombre seductor, mujeriego, que no supera su divorcio, la persigue y con sus celos enfermizos hace que Cristina se convierta en una mujer precavid...