"Estaba hecho."
Beacon Hills. Estado de California. Estados Unidos.
Diciembre 23, 2019
Después de aquel viaje a su memoria en la escuela, todavía era muy temprano, por lo que decidió regresar a casa de Scott —quien le había dado hogar debido a que si el padre de Stiles lo llegase a ver, no iba a dudar en dispararle —. Iba algo entusiasmado al descubrir el modo de poder recordar varias cosas que habían sucedido con Stiles.
Se quedó tan sumido en sus pensamientos que terminó en la entrada del bosque, al llegar caminó un rato aprovechando que ya se estaba allí para poder encontrar algo que le ayudara a recordar cualquier cosa. No se equivocaba.
Al pasar por uno de los árboles, una punta de madera le había raspado la mejilla haciendo una pequeña cortadura. Centró su atención en aquel objeto, mirando con detenimiento hasta hallar una pequeña parte metálica significando una flecha.
Corría desesperado en modo de huida, Scott y Peter ya había tomado ventaja estando sólo en ese entonces, siendo perseguido por los cazadores. Mira hacia ambos lados por una ruta de escapatoria pero las flechas volaban en el aire a velocidad de la luz, imposibilitando su plan.
Su nerviosismo aumentó en el momento que una linterna iluminó su cuerpo, luego varias de ellas se acercaban dándole a entender que no tenía a donde ir. Se estuvieron en aquella posición, todos los cazadores estaban divertidos con el miedo de Derek, que ya de paso, era muy extraño.
Uno de ellos detuvo la euforia, acortando la distancia entre su persona mientras tomaba un cuchillo de su cinturón. Ya era su hora.
—¡Ouch! —escuchó a uno de los hombres gritar y caer al suelo, inconsciente, había sido golpeado con un bate. Derek abrió los ojos en sorpresa. Los demás se concentraron en buscar al responsable del objeto, hasta que otro bate fue directo a la cabeza del hombre que lo iba a apuñalar momentos atrás.
—¡Muevete! —Stiles le susurró muy alto, tomando el brazo del mayor y llevándolo consigo. El clan ya había caído en cuenta de que habían escapado.
Derek seguía en shock viendo al castaño allí, salvándole el peludo trasero antes de tropezar y caer, para empezar a gritarle: —¡¿Qué diablos haces aquí, Stiles?!
—Pues como puedes ver, ¡te salvo la vida! —respondió sin dejar el sarcasmo incluso en esa situación, el pelinegro rodó los ojos colocándose en pie para agarrar a Stiles y hacerle correr más rápido.
Los cazadores habían conseguido tanta velocidad, que las flechas literalmente hacían pequeños cortes en los brazos de ambos jóvenes, pero una de ellas alcanzó a atravesarle el hombro a Stiles, clavándolo en un árbol.
—¡Mierda! —gritó adolorido, Derek palideció un momento al ver como su amigo humano estaba sufriendo a causa suya. Sin dudarlo, se acercó al menor para tratar de quebrar la madera del cortopunzante.
—Stiles, tengo que sacarla en dos partes. Si la quito desde el árbol, será más difícil. Confía en mí. —una sonrisilla tranquilizante atravesaba los labios del pelinegro siendo correspondido por Stiles.
—Dame tu mano. —el mayor obedeció sin miramientos, con la ayuda de su boca y su otra mano hizo fuerza en la madera hasta escuchar el típico 'crack' indicándole que había terminado. No había caído en cuenta que la mano de Stiles estaba apretándolo con todas sus fuerzas.
—Bien, vamos bien. Ahora, sólo empuja el hombro hacia adelante lentamente. —los sollozos de su amigo cada vez eran más fuertes y a Derek literalmente le dolía el pecho, si alguien más se atreviera a tocarlo de nuevo, lo mataría sin pensarlo. Se sorprendió que los cazadores no los hayan alcanzado en todo lo que se demoraron en el proceso. Derek tomó el cuerpo del menor, cargándolo en sus brazos para echarse a correr. Siendo libres.