VII

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"Papá Christopher."

París, Francia.

Septiembre 14, 2019

—¿Listo para conocer el lugar de trabajo? —Argent miró a Stiles, mientras conducía.

—Creí que solo nos daban las misiones por teléfono. Yo ya he estado allí, ¿te olvidas cuando llegué?

—No, no siempre es de esa forma. Eso es para quienes están iniciando y para quienes ya son veteranos en este tipo de cosas. —respondió el mayor, recibiendo un asentamiento de cabeza—. Llegamos.

Stiles procedió a bajarse del auto y miró confuso a Chris cuando éste no lo siguió: —¿No vienes? —pregunta y el rubio niega con la cabeza.

—Tengo que hacer otros asuntos, sólo di a cualquiera que te pregunte, que vienes de mi parte. Paso por ti luego.

—Vale, cuidate papá. —Apenas el menor terminó la oración entró a paso rápido al lugar mientras el mayor se quedó estático. Le había llamado papá.

No es que lo rechazara, de hecho le gustó el hecho de que le tuviera tal grado de confianza pero también le causaba algo raro por dentro ya que, habían pasado tres años desde que Stiles no ha tenido comunicación con nadie de Beacon Hills, y parece no importarle aunque sabe que por dentro se está muriendo de ganas por hablar con su padre.

Aquellos asuntos pendientes eran prácticamente eso, ponerse en contacto con John porque también sabía cómo lo debería estar pasando, Scott se lo había comentado cuando lo llamó preguntando por la identidad de ese cruel cazador a sangre fría que es su mejor amigo. Irónico.

Volviendo al tema, ya estaba enterado que el padre de Stiles había perdido su trabajo, había caído otra vez en el alcoholismo pero no duró mucho gracias a Melissa —con quien estaba empezando una relación—. Chris estaba feliz de que su amigo avanzara con su vida en aquel momento donde Stiles tuviese que partir, de todas formas él tiene la obligación de responder por el menor.

Llegó a su apartamento y aparcó su auto, una vez dentro sacó su celular para llamar a Melissa ya que John habría cambiado de número. Marcó y espero el pitido hasta que escucho la voz femenina de su amiga.

—Hola, Melisa. Soy Chris. —al terminar de hablar escucho un gritito de emoción.

—¡Chris! ¡Que gusto volver a hablar contigo! ¿Como has estado?

—Yo he estado bien, las cosas acá están estables y pues voy en el camino. ¿Y tu como has estado? ¿Scott? ¿John?

—Muy bien, como siempre nuestros hijos resolviendo casos sobrenaturales. Nada fuera de lo común.

Claramente sabía que debía actuar con demencia en el caso de Stiles.

—¿Y Stiles? ¿Como está él? —oyó un suspiro al otro lado de la línea.

Stiles... Él... Desafortunadamente desapareció hace tres años, no sabemos si está vivo, a salvo o está muerto. Los chicos y su padre han estado buscándolo pero nunca lograron dar con algo, John está destrozado pero siempre quiere hacerse el fuerte. —la voz de la madre de Scott empezaba a quebrarse y de pronto tomó una actitud de regaño contra Stiles por todo lo que ha estado causando.

—Vale, está bien, él debe andar revoloteando por allí, no es la primera vez que se pierde. No creo que esté muerto, sino Lydia ya lo habría gritado. ¿No crees?

—Tienes razón... Ojalá esté bien.

—El tiene instintos de supervivencia, ¿recuerdas? —escuchó una risita por parte de la mujer, había logrado calmarla—. Esta bien, ahora hazme el favor y me pasas a John.

Al parecer el había estado cerca, creyendo que era sobre su hijo, pues no se equivocaba. Apenas tomó el teléfono, Chris había cambiado su tono de voz a uno más demandante.

—Stilinski, quiero que escuches con atención lo que te voy a decir. No te alteres porque si llegas a hacerlo voy a colgar la llamada. ¿Me entiendes? Vas a actuar con total normalidad, sólo tú tienes derecho a saberlo.

—¿Y a ti quien te dio el derecho de hablarme? ¿Te has creído mucho o qué? Porque mira que pu... —Argent, rodó los ojos. De tal hijo tal padre, decidió interrumpir.

—Stiles está vivo y está conmigo.

Minutos sin hablar pasaron mientras escuchaba que la respiración de el ex sheriff se hacía más pesada.

—Es broma, ¿no? —respondió pondio con la voz temblorosa, al parecer le iba a dar algo.

—No, claro que no. Jamás bromearía con ese tipo de cosas, ahora no está en el apartamento conmigo pero en la noche a las diez, quiero que tomes tu laptop y te vayas a algún lugar apartado de todos donde haya internet, ¿me has entendido?

—Sí, pero ¿por qué quieres que haga eso?

—Ah, sólo hazlo y ya. No faltes, es una sorpresa. Tengo que irme, hablamos más tarde, adiós.

Y colgó, esperando con todas sus fuerzas de que a John no le haya dado ese algo donde estuviera y actuara con tranquilidad.

Después de la llamada, fue a comprar una nueva laptop para Stiles, lo trataría como el hijo hombre que no tuvo para que entrara en más confianza para que hablara de algunas cosas.

[...]

Horas después, pasaba por La Central, esperando al menor quien salía con aspecto más energético y sudoroso de lo normal, el entrenamiento ha debido estar intenso. Stiles entró al auto con una sonrisa en su rostro.

—¿Como te fue Sti? —preguntó con una sonrisa que fue correspondida por el castaño.

—¡Excelente! No creí que iba a resistir tanto entrenamiento pero con las misiones he mejorado la condición.

—Me alegra, ¿vamos por algo de comer? —el mayor encendió el auto y arrancó.

—Claro, gracias papá.

Alguien que le diga a ese muchacho que deje de llamarlo así que iba llorar.

[...]

En la noche, Chris estaba sentado en la sala con la nueva laptop en sus piernas, acomodando lo necesario para la sorpresa. John ya debería de estar en línea.

Llamó a vídeo a su contacto, pasó poco tiempo para que la imagen del mayor de los Stilinski se mostrara en la pantalla, había cubierto la cámara y desactivado el micrófono cuando John había empezado a hablar.

Corriendo fue a la habitacion de Stiles, dejo el portátil encima de la mesa de noche, estaba algo ansioso.

—¿Que estas haciendo Chris? —pregunto el menor cuando le tapó la vista con una venda—. Oye pero ¿qué? —fue rápidamente por el portátil y lo dejó en piernas de Stiles, con la misma velocidad quito los obstáculos de visión y audio.

—Sorpresa.

Los dos Stilinski quedaron con la boca abierta mientras Argent los veía con una sonrisa grande plasmada en su rostro.

—¿Papá? —Stiles habló mientras se le llenaban los ojos de lágrimas.

—Argent no me digas que esto es un vídeo porque juro que te mato. —la voz del mayor también empezaba a temblar. El mencionado habló desde la distancia.

—No, tonto, ese es tu hijo. —ambos rieron y minutos despues, aquellos familiares empezaron a conversar como nunca lo habían hecho, se quedó ese tiempo. Decidido a salir del cuarto cuando escucho la voz de Stiles, hablándole.

—Oye —dijo y Chris se giró hacia el—, gracias papá.

El rubio asintió con una sonrisa y salió de la habitación.

De repente, se sintió débil al recordar a Allison.

***

United |Sterek|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora