Creyente [ Justin Bieber Fanfic ]

Capitulo Cuatro:

-Sabes...sabes que eres muy especial para mí. Más que un ídolo. Te he apoyado y defendido en las buenas y en las malas. Como lo que pasa con TMZ...

-Es toda una mentira de ellos...

-Eso ya lo sé.

- ¿En serio?

- Sí...todos lo sabemos. Confiamos en ti más que nadie. Han pasado muchas cosas este año y no tan buenas. Pero tú debes saber que estaremos contigo hasta el final. Y no te dejes llevar por la negatividad...eso no lleva a nada.

-Sí...lo sé.

-Solo quiero que sepas...que miles de fans puede que te dejen en el camino. Pero tus beliebers no. Al menos, estoy segura de que yo no lo haré.

Y sin darme cuenta, Justin me estaba abrazando. Mi mundo estaba entre mis brazos. Pero no iba a gritar, creo que me estaba acostumbrando de que él esté aquí, a mi lado. Le sonreí en cuanto nos separamos, como él a mí.

-Nunca nadie había sido tan honesto u honesto conmigo...gracias.

-Lamento si un comentario te molestó...

-Oh no, no. Todo lo contrario. Me alegra haberte traído

- ¿De verdad?

-Sí... -sonreí- ¿cómo no lo noté antes?, lo que importa son los comentarios positivos. Debí denunciar TMZ hace años...

-Estaremos aquí para levantarte.

-Les debo mucho -solté una carcajada.

-Solo sonríe.

- ¿Y si no puedo hacerlo? Puedo sentirme triste, soy humano.

-Ya lo sé...pero si estás así habla con alguien. No ocultes tus sentimientos, no es bueno.

Me sonrió. Lo hice sonreír...

Revisé la hora y noté que ya era tarde. No me quiero ir, maldición. Pero él debe estar agotado.

-Um...Justin...debo irme, ya es tarde...

-Te llevaré a casa.

-Debes estar agotado...

-Oh no, para nada. Estoy bien, yo te llevo.

-Bueno...si quieres.

Nos levantamos del sofá, y él apagó el enorme televisor que estaba frente a nosotros. Aunque...no creo que "televisor" sea su nombre. Salimos de la sala de cine para encontrarnos con su enorme sala de estar.

-Es una casa exageradamente grande... -volteé a verlo- para que solo...vivas tú, ¿no crees?

-Sí, pero recibo visitas todo el tiempo, Mad. Mi familia...el team, mis amigos, mis...um...

- ¿Novias?

Quise darme un golpe en la cabeza por preguntar eso. Había sonado casi celosa. Y eso que nunca me ha molestado que él tenga novia. Decidí no hacerle caso a mi pregunta, y me puse a caminar por la casa. Justin me seguía.

-Celosa, ¿eh? -dijo, divertido. Yo negué con la cabeza.

-Solo...lo supuse.

-Ah...pues, no. No hablaba de novias, hablaba de amigas, pero ya qué.

- ¿Qué hay aquí? -pregunté. Apuntando con el dedo a la puerta frente a mí.

-Abre la puerta, supongo que te gustará.

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Sus manos temblaban a medida que la puerta se habría. ¿Los nervios tal vez? Ni que tuviera una colección de armas allí dentro. Le tenía que tomar a su cara al ver mi santuario.