Creyente [ Justin Bieber Fanfic ]

Capitulo Cinco:

- ¡Justin!

-¡Mad!.

Él me tenía en sus brazos de nuevo, y yo seguía sin creerlo. Estaba tan feliz que hasta se me olvidó lo mal que me sentía por haberle mentido a Leigh. Ya qué. Otro día tendré que decirle.

- ¿Qué tal estás? -me preguntó- ¿qué tal la escuela?

-Aburrida -rió- y estoy bien, gracias.

-Alfredo me dijo que no querías que nadie supiera que nos conocemos... ¿es cierto?

-Si, pero no lo malinterpretes. Es solo que...en mi escuela hay personas interesadas, oportunistas y todo eso...no quiero llamar su atención -él sonrió.

¿Cómo puedo describir la manera en la que me siento cuando él sonríe gracias a mí? ¿Qué chica sería tan estúpida como para no enamorarse de él? Oh Dios mío...no puedo creer esto. Pensar que antes de ayer...estaba en mi cuarto viendo sus videos, y ahora está frente a mí...sonriendo.

-Que bien que pienses así.

-Oh...lo aprendí del mejor.

Él volvió a reír.

-Bueno, bueno. ¿Tienes hambre? Podríamos comer afuera.

-Um...claro. Me gustaría.

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¿Quién lo iba a decir?, le gustaba la privacidad tanto como a mí. Hice bien en no dejarla ir pronto. Me coloqué mi chaqueta y ella tomó su pequeño bolso para irnos. Salimos de casa y pedí en mi mente que los paparazzi no nos encontraran. Nos subimos a mi auto de ventanas empañadas.

-Oh no, dejé mi teléfono en tu casa.

-Te lo llevo mañana a la escuela, ¿sí?

-Creí que tenías un concierto.

-Pero en la noche...uh... ¿quieres ir?

- ¿En serio? -acerté con la cabeza- sí, por supuesto. ¿Podría invitar a mi mejor amiga?

- ¿Ella sabe que nos conocemos?

-Fue al meter and creer también y al concierto, pero nos perdimos. Pienso decirle lo que pasó mañana.

-Claro, que vaya. No tengo problema -sonrió.

Tenía una sonrisa muy bonita. Y eso me distrajo hasta llegar al lugar donde quería traerla. Pero en cuanto bajé para abrirle la puerta, el lugar se llenó de paparazzi. Bajé un poco la ventanilla de su lado para hablarle.

-Cúbrete.

-Lo sé, Justin. No soy idiota -reí- ni siquiera parezco yo. Demonios, ahora te entiendo.

-Bienvenida a mi mundo, linda.

Y en cuanto abrí la puerta el lugar se llenó de flashes. Mad tenía razón, no parecía ella. Se había atado el cabello, colocado mis lentes de sol y se pintó los labios. Rojos.

Entramos al restorán como pudimos y el jefe del lugar nos llevó a la zona vip. Nos sentamos en una mesa, apartados de todos.

-Eso fue... -dijo ella. Quitándose los anteojos- interesante- se desató el cabello- ¿cómo lo soportas? -sacó un pequeño espejo y un pañuelo de su bolso.

-No lo hago. Solo...intento ignorarlo -quitó su pintalabios rojo.

Mi rojo.

Bonita.

- ¿Cómo ignoras algo así? -guardó todo devuelta a su bolso- te idolatro el triple de lo que hacía antes por soportarlo -reí.

-Pues...si somos amigos, deberías acostumbrarte también.

-No me molestaría -sonrió.

No, la verdad, nada de lo que tenga que ver con él me molestaba. En lo absoluto. Pidió el menú para ambos. Demonios, cuanta cantidad de platos para comer. Al final me decidí por comida italiana, y él pidió lo mismo.

-Perdón, debo preguntarlo. ¿Tienes novio?

¿Acaba de preguntarme si tengo novio? Oh mi Dios. Oh mi Dios. Oh mi Dios. ¡No tengo! Jamás estuve tan feliz en mi vida por algo. Agradecí que mi ex novio haya sido un hijo de puta conmigo.

-Yo...no, no tengo novio.

- ¿Porque no quieres, o eres de esas chicas "Anti-hombres"?

-No. Es sólo que...no he encontrado...a alguien.

-Oh.

- ¿Y tú qué tal? No hablas mucho de tu vida privada.

-No me gusta hablar de eso. Ya sabes...no voy de decir cada novia que tengo o algo así. Pero no estoy con nadie...por ahora.

- ¿No tienes citas? Digo...

-No, no. No me gusta tener citas con chicas que no me gustan o que no me llaman la atención.

- ¿Sabes...? Todos pensaban que cuando vas a los clubs nocturnos ligabas con la primera chica que veías.

-No hago eso. ¿Sabes lo que hago en los clubes? Estoy en mi teléfono. Bebo agua, y lo que menos hago es ligar. Algunas veces me aburro y me divierto con Tay James, pero nada más.

-Jodidos rumores.

-Muy cierto, bonita.