capitulo15

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Max

Cuando llegue a mi casa eran sobre 07:30 encontré a mi madre desayunado sola seguro que mi padre ya se había ido.
— Buenas días mama— le digo acercándo me a ella.

—Ah...hola hijo— Le di un beso en la frente

—Vas a desayunar?

—No mama, tengo prepararme  para ir al trabajo

—Pero hijo, aunque sea un café

Se que a ella le encantaría que le acompañase pero no puedo.
— Lo siento, pero no, gracias,  voy a ducharme.
Caminé hacia mi cuarto pero antes de entrar pensé en lo de Daniel que parece que dormido seguramente acaba de llegar como siempre.
Me metí en la ducha y abrí el grifo. Deje resbalar el agua por mi cuerpo. Recordè la noche anterior y no puede para de reír; no terminaba de creerlo. Habia probado los labios que tanto había  deseado.
Salí de la ducha, busque algo de ropa y busque mis llaves. Luego baje  hacia el salon.
Me dirigí al trabajo, y aun en el trayecto no pude dejar de pensar en Ana. Se me ocurrió la brillante idea de pasar por la floristería y enviarle unas flores.

Ana

Cuando llegue encontré a la familia desayunando

— ¿Donde pasaste la noche?— preguntó mi tía preocupada. 

—En la playa.

—¿y lo dices así?

—¿Como lo quieres que te diga?
Dijo isa.

—Mira, Hermanita no me hagas hablar que la verdad no tengo tiempo con permiso que me voy a bañar.  

Subí a mi habitación, sentía vergüenza de mi misma. Bese a un chico sin ser mi novio. Nunca lo he hecho.
Me levante de la cama estaba llena de arena lo sacudí, me bañe y me prepare para irme. 

 
Después de diez minutos en taxi  pensando en mi vida todo lo que paso en ella, llegué. vi a Andrià sentado en su mesa enfrente  de su ordenador me la cerque a saludarla

—Buenas días Andri

—Hola Ana que bueno que llegas

—¿Que paso?

—Me acaba de llamar una de tus amigas te manda decir que pasar por ti la hora de comer

—¿Quien es?

—Me había dicho él nombre pero se me olvido

—No te preocupes que cuando llegue sabremos quien es

—Debe ser Raquel seguro ya se arrepintió. Lo digo voy estar en la oficina

—Ah, Ana espero

—Que pasa ,Andri

—Mira lo que te Llego— dijo señalando a la mesa.

— Una Rosa. ¿Quien me lo mando?

—No se,pero aquí tenés la tarjeta

Entre y me senté en mi mea decidiéndo si leer o no la nota. Al final la leí.

En un beso sabrás todo lo que he callado.

No estaba firmada pero no hacia falta pensar mucho para saber de quien era. No me apetecía para nada aceptarlo.
Alguien toco la puerta sacando me de mis pensamiento me  guarde la tarjeta y me senté bien antes de decir nada.

—Adelante

—¿Ana,estas lista?

—Hola Ivan , ah... Si esperame un segundo — casi me olvido,  Ivan y yo teníamos que ir para hablar con él juez

—Vamos Ana

—Ya voy.

—¿Y esta rosa te lo mando algún admirador?

— Dejate de bromas y vámonos ya

En quince minutos llegamos. Al entrar nos registraron. Llegamos al oficina de él juez del caso. Nos mostró caso ahí estaba una secretaria y que bueno que no había nadie así que ni tuvimos que esperar nos acercamos y la saludamos

—Bueno días.

—Buenas días , ¿que desean?

—Venimos a ver él señor juez

—¿Teneis cita?

— Vera  no tenemos cita  pero necesitamos hablar con el, es urgente dice Ivan.

—Lo siento pero no se puedo sin cita previa.

—Porfavor informe le de que estamos aquí y preguntele si nos puede dedicar algo de tiempo. Solo serán 2 minutos.

Al parecer que por fin la convencí.

—Ana tranquila  sino nos deja entra hoy venimos otro día

— Es que deseo acabar con esto cuanto antes. Estoy harta de injusticias y de de calumnias. 
   

Ana Te quieroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora