Epílogo

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-moo... Daikicchi...- toque su mejilla con mi dedo mientras intentaba que me prestara atención- no te enojes...

El me miró levantando una ceja y luego volteo la mirada

-estoy molesto, muy molesto- dijo seriamente para luego tomarme entre sus brazos y subirme a su regazo- no vayas.

Mi amor puso su cabeza en mi torso mientras me apretaba a él. Se veía demasiado tierno.

-jejeje Daikicchi es como un niño pequeño- pase mi mano por su cabello- pero debo ir, es importante.

El me tomo con un poco más de fuerza y me puso debajo de él.

-yo soy más importante- Daiki comenzó a besarme mientras sus manos acariciaban mi cintura- tu eres mi sexy esposo y lo más importante para ti soy yo.

Solté una pequeña risa al verlo tan serio y encaprichado.

-es tarde, debo irme- dije intentando liberarme de mi prisión- ¡DAIKI!- mi amor me tiro nuevamente a la cama y se recostó sobre mí.

-sólo un poco más...- dijo mientras acariciaba mi vientre de cerca de seis meses- quiero hablar con mi pequeño.

Levantó mi camiseta y comenzó a hablarle a nuestro pequeño. Nos habíamos enterado que era un niño y todos eran felices al saberlo, aunque yo quería una niña, era muy feliz.

-escucha, campeón, debes cuidar a tu mami, ¿De acuerdo? Cuando regresen me encargaré de llenarla de caricias pero mientras tanto tú eres quien debe cuidarlo.

Solté una pequeña risa, Daiki podía ser muy tierno cuando quería.

A regaña dientes, el me dejó levantarme mientras aún pasaba por mi lado tocándome en cada momento que pudiese.

-me voy- dije acercándome a él mientras Daiki tenía a Aoi en sus brazos.

-regresa pronto- me dio un pequeño beso en los labios y yo le Di otro a nuestro hijo.

Me habían pedido que fuese a una sesión especial y no pude negarme, pero Daiki tenía el día libre y no quería.

Contra mi sentimiento me fui de mi hogar dejando a los dos hombres que más amaba en el mundo allí.

>////<

-Aaahh...- solté un suspiro mientras caminaba con Aoi hacia mi habitación- hoy es día de chicos, pequeño, así que, ¿Qué haremos mientras esperamos a Mami?

-aa... da... pa...- Aoi movía sus manos a todos lados mientras yo le hacía mimos.

Mire la hora y pensé en ir a ver a Tetsu, después de todo, mi hijo adoraba a Hikaru.

-bien, te pondré guapo para que vamos a ver a Hikaru- mi bebé soltó una pequeña risa mientras yo sonreí- así me gusta.

Me cambié ropa y cambié a mi pequeño, guarde algunas cosas en una pequeña mochila y salí con él en mis brazos.

-Aomine-san, buenos días- la chica que vivía a nuestro lado me saludo con una sonrisa.

-buenos días- dije seriamente y ella se sonrojo un poco mientras pasaba a mi lado.

Ryouta la odiaba, me decía una y otra vez que ella me coqueteaba, y yo le repetía la misma cantidad de veces que no importaba quien apareciera que él era el más sexy para mí.

Subí el piso de diferencia que tenía con Tetsu y golpee la puerta.

-Aomine-kun, buenos días- dijo Tetsu mientras me dejaba pasar

Del Odio Al AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora