Angel (Min Yoongi) ~Terminada~

Capítulo 36

EL SIGUIENTE CAPÍTULO ES EL FINAAAAAAAL!!! ♥ KHEMOZIÓN! ♥♥

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-¿Qué está pasando aquí? –Hoseok entró a ver por qué la discusión-

-Nada –contesté- Solo que al fin nos deshicimos de Jackson -puse una falsa sonrisa-

-¡Tenías que haber escuchado cómo le contestó ___ al papá de Jackson, parecía otra! –Woori manifestó emocionada-

-Sí, al igual que tú –pensé- ¡Saqué valor de donde no había! -me uní a la "emoción"- Por un momento el miedo había desaparecido completamente de mí.

-Te felicito entonces –Hobi me dedicó una sonrisa-

Una semana era la que había transcurrido desde que las noticias acerca de Jackson habían salido a la luz, una semana en la que Jackson al fin me había dejado en paz... Pero también una semana sin Yoongi.

Mi preocupación en este momento ya había rebasado su tope, no había día en el que no pensara en él,  ni siquiera podía dormir tranquila por la incertidubre de al menos su bienestar. Así es, no me podía concentrar en absolutamente nada más que en Yoongi. Por más que mi madre y amigos intetnaban animarme, siempre terminaba perdida en mis pensamientos, olvidando el momento.

-¿___?¿ ___? –sentí un aplauso frente a mi rostro que hizo que volviera en mí-

-Perdón, ¿hablábamos de algo? –pregunté confundida-

-Te estaba diciendo que sólo faltan unos días para tu cumpleaños y te preguntaba qué querías que te regalase.

-Que Yoongi regrese.

-Creo que tienes que superar a ese hombre, ___ -Hyeri suspiró pesada- No puedes estar así de volada por siempre.

-¡¿Cómo quieres que esté si no sé cómo está él o en dónde diablos está?! -elevé la voz-

-¿No te dijo Woori que está bien? -mi mejor amiga espetó bastante enojada-

-¿Y tú crees que con eso me basta?

-¡¿Puedes tranquilizarte?! -me zarandeó- Él está bien, te lo aseguro. Lo mejor es que tú estés tranquila y dejes de darle tantas vueltas al asunto.

Hyeri se levantó enojada de su sitio y a pasos sonoros salió del salón. Yo suspiré pesadamente y crucé mis brazos sobre la carpeta para después apoyar mi cabeza en esta.

Tenía que confiar en Woori, lo sé. Pero ellos al tener tantos secretos hacia mí... ¿Cómo podía asegurarme que toda la información que me daban era real?. Mi mayor temor era que me estén ocultando la verdad y simplemente me estén dando falsas esperanzas, cuando había una gran posibilidad que fuese todo lo contrario.

A la hora de salida Hoseok me estaba esperando en la puerta de la escuela. Cuando llegué con él, me propuso una salida para ir a tomar un helado, a lo que yo acepté bastante gustosa. Le dije también que esperemos a Hyeri, sin embargo esta ya había hablado con él, diciéndole que me animara porque como estaba en este momento, no la irritaba y que no dudaría en golpearme jugaba de esa manera con su paciencia... Ay, esta loca.

-Hoseok, ¿puedo preguntarte algo? -dije jugando con mis dedos-

-Vaya, ¿por qué el Hoseok? Eso se siente extraño –rió levemente, haciendo que yo también lo haga-

-Hobi, ¿puedo hacerte una pregunta? -reiteré-

-La que quieras –sonrió-

-¿De qué hablaron Suga y tú cuando estuvimos en la casa de tu abuela? –levanté mi vista para mirarlo a los ojos-

-De que él siempre te protegerá y si no está cerca, que me encargue yo –contestó-

-¿Eso es todo? -pregunté algo desconcertada-

-Sí, eso es todo –asintió con la cabeza-

-Entonces tú serías como mi ángel guardián pero humano –sonreí, cogiendo su mano-

-I'm your angel; I'm your hope –bromeó-

Esa tarde la pasé bastante genial con Hoseok. Fuimos por unos helados, también a pesar y por último me llevó a cenar antes de ir a casa. Podía asegurar que con él me sentía bastante tranquila y a su lado podía olvidarme de mis preocupaciones.

Sin embargo, el resto de la semana no había cambiado mucho. Seguía sin noticias de Yoongi, seguía sin saber qué le había pasado. ¿Por qué mierda no aparecía? Si es que no me quiere volver a ver que le diga a Woori que simplemente no volverá.

Y entre ideas locas se pasó otra semana más.

Como Hyeri había dicho, se acercaba mi cumpleaños. De hecho sólo faltaba un día y ni aun así había tenido señales de Yoongi.

Si tanto sabía de mí como decía, ¿sabría que mañana es mi cumpleaños? Entonces, ¿si regresará para esa fecha tan especial? Es mi mayor deseo, en verdad, es el único regalo que quiero.

Terminando el día, decidí que iría a dormir temprano. Estaba exhausta y sólo quería descansar hasta recuperar todas mis energías para el día de mañana. Todos decía que para mi cumpleaños tenía que estar con las energías super recargadas para poder celebrarlo como se debe. Según ellos, no todos los días se cumplía un año más de vida... Eso significa también un año más cerca de mi muerte. Okay, mala broma.

Me tiré sobre mi cama, tapándome con la manta hasta la cabeza, tan solo dejando un pequeño espacio para poder respirar. Cerré los ojos y después de muchísimo tiempo puede dormirme casi en el acto.

Comencé a soñar algo bastante raro, pero a la vez hermoso.

Me encontraba en un campo de pasto muy, muy verde, árboles altísimos, miles de flores coloridas y el cielo celeste, completamente despejado, dejando así que el sol iluminara el hermoso paisaje.

Después de andar unos cuantos pasos caí en cuenta que estaba en el mismo lugar en el que me había encontrado con Yoongi, aquel día que me salvó la vida, ese día en el que le pedí que por favor no dejase de ser mi ángel, que creía completamente en él.

Estaba con un vestido blanco y descalza, por lo que mis pies podían sentir esa sensación de libertad. Sonreía a más no poder porque me encantaba este lugar. Uno de los sitios más importantes para mí, puesto que fue aquí donde "recuperé" a Seoltang la primera vez.

¿Estará aquí nuevamente?

Caminaba por los alrededores, respirando el aire puro y buscando si es que había algo más que las hermosas flores que decoraban el paisaje. Pero nada mas que unas colinas a las cuales me fui acercando.

Cuando estuve lo suficientemente cerca de estas, alcé la vista y me quedé helada. Él estaba ahí, después de tantos días por fin pude volver a ver a Seoltang.

Estaba con una gran sonrisa, mientras agitaba su mano. La felicidad invadió mi cuerpo, tanto así que en cualquier momento me pondría a llorar.

-¡____! –gritó emocionado- ¡ven sube!

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Kiirychan