-¿Qué estás diciendo? –me miró sin entender--Lo que escuchaste, Yoongi. La que necesita ayuda ahora es mi madre. Si ella está bien todos lo estaremos -puse mi mejor sonrisa y cogí una de sus manos entre las mías-
-___, no puedo aceptar eso -negó con la cabeza-
-¿Por qué no?
-Porque no quiero –respondió sin mirarme-
-Yoongi, por favor –supliqué-tengo miedo de que cometa una locura. ¿No escuchaste? Amenazó con matarse.
-No –volvió a negarse- No lo voy a aceptar.
-¿Por qué no? ¿No lo ves acaso? ¡Yo no te necesito!
Giré su rostro para que me mire a los ojos y así intentar de convencerlo. Traté de usar un tono bastante seguro, sin embargo sabía que era todo lo contrario, que necesitaba a Suga conmigo para siempre.
Por primera vez vi que Yoongi puso una cara de asombro. Sus ojos se abrieron completamente al igual que sus labios. Al parecer no podía creer lo que yo le había dicho.
-¿En serio piensas eso? –volvió a fruncir el ceño y retiró su mano-
-Sí –asentí- la que te necesita es ella, no yo.
-Bien, si así lo quieres –se dio media vuelta- pero ya no me volverás a ver.
-Lo siento, Suga. Si es por el bien de la persona que más amo, pues hay que sacrificar algunas cosas.
Yoongi negó con la cabeza antes de seguir su camino a mi hacia mi casa. Una vez que abrió la puerta se volteó para verme por última vez y entró, cerrándola detrás de él.
Sabía que esta podría ser la última vez que lo vería y tal vez nunca más sepa de él. Di un largo suspiro de resignación, evitando que las lágrimas empezaran a salir como cascadas. Muy dentro de mí tenía la sensación de que lo que había hecho era lo correcto, lo mejor para todos.
Aunque por otro lado me sentía terrible por dejarlo ir de esa manera después de la confesión que me había hecho hace solo unos minutos atrás. Ahora que él no era mí ángel me sentía vacía y sin rumbo. Aprendí a querer a ese pálido gruñón, tanto que lo quería proteger de todo aquel que le podría hacer daño, así como él lo hacía conmigo. Ahora sólo me queda esperar que mi madre sepa cuidarlo y quererlo como yo lo hago porque si no es así, yo misma la mato.
Me quedé unos minutos afuera para darles espacio y que mamá puda calmarse. Cuando decidí entrar, toda la casa estaba en completo silencio, desordenada, pero en silencio. Después de mucho tiempo sentía esta paz recorres mi hogar, se sentía como una sensación casi nueva a la que no tardaría en acostumbrarme.
Acomodé algunas cosas que estaban en el piso y subí a mi habitación, no sin antes darle una ojeada a la habitación de mi madre. Ahí la vi durmiendo plácida y calmadamente, como no lo hacía desde hace muchísimo tiempo.
Me acerqué lentamente y me senté al borde de la cama. Solté unas cuantas lágrimas mientras acariciaba su cabello. Por fin podía verla en paz, a pesar de lo que acababa de pasar hace un rato. Gracias Yoongi, sin ti esto no sería posible.
Le di un beso en la frente antes de retirarme. Cerré la puerta con cuidado, procurando no hacer ruido y me dirigí a mi habitación.
Cuando entré me estiré gruñendo levemente y acomodé mis cosas sobre el escritorio para empezar a hacer mis tareas. Saqué el libro de historia, disponiéndome a leerlo pero no podía concentrarme en nada. Tuve que repetir una misma oración cinco veces sin éxito. Esto se debía a que no podía pensar en otra cosa mas que Yoongi.0

ESTÁS LEYENDO
Angel (Min Yoongi) ~Terminada~
Fanfiction"NO TE PUEDES ENAMORAR DE MÍ... O yo también caeré por ti." Los ángeles guardianes tienen prohibido enamorarse, porque existe un castigo eterno por esto... El suf...