Corro por los pasillos en busca de Katherine, así le puedo decir sobre la fiesta que Castiel organiza-y que obviamente vamos a ir-. Veo que esta hablando con Aaron, mi novio, algo rara. Sus pupilas están levemente dilatadas, y noto la exasperación con la que juguetea con sus uñas.
A pasos lentos, me acerco para ver qué sucede pero una vez frente a ellos, hay un silencio entre ambos. La mirada exaltada y más oscurecida de Aaron me asusta.
Observándome por unos minutos, sonríe para luego acercarse a mí.-Hola, nena.
Planta un escaso beso en mis labios para después darse media vuelta y retirarse como si me hubiera esfumado de ahí.
-¿De qué hablaban tan...extraños?-Vacilo en mi pregunta, notando como los ojos de Kate se aclaran en un segundo.
Me abraza por los hombros, comenzando a caminar dirigiéndonos a la salida de la escuela.
-De hecho, es una sorpresa que te está preparando-, me sonríe burlona mientras continuamos nuestro camino,-es secreto. No le digas que te dije.