No puedo negar que, en cierto modo, Alexa es mucho más linda, tiene unos ojos azules hermosos, un cuerpo increíble y una sonrisa preciosa, con una piel de porcelana. Siendo honesta, cualquier chico y chica babea por ella y más si consiguen besarla de la manera que besó a Calum.
Una vez se termina el beso, una pequeña sonrisa brilla en los labios de la chica, y se pone al lado mío para terminar de una vez. Sus manos ahuecan mis mejillas y comienza a besarme lentamente pero dura poco. Se separa y se sienta en su lugar mientras los aplausos y silbidos inundan la sala, incluso Sophia le hace reverencias divertidas. Yo solamente aplaudo, porque mi cara se transforma cuando noto el deseo que Alexa tenía hacía Calum.
Necesito un poco de privacidad, al menos dos minutos o me voy a volver loca si sigo pensando en ello.
-Voy al baño, mientras decidan quién va.-Digo mientras me levanto y les muestro una pequeña sonrisa algo forzada. Siento la mirada oscura de Calum que se clava en mí.
No puedo creer que Alexa gusta de Calum.
