XXIV

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-Si, ¿entonces nos podemos ir ya?

-Claro que no, tienes que aprender la magia de ser un ángel, y a mi solo me hicieron venir por ti.

UNOS DÍAS DESPUÉS.

Cuando bajamos al purgatorio fue lo peor de mi vida, habían niños, personas asesinadas y personas malas, todos para un juicio, lastima que tengo mi familia abajo si no me quedaría aquí.

Pisamos tierra y estoy angustiada no se como me recibirán, y si mi protegido me recibirá, él me dijo que podía ser cualquiera menos ángeles y esa persona valdrá la pena.

-¿Porqué hay decoración navideña si falta casi un mes?

-Oh nunca te lo dije, estuvistes un mes en el cielo, ya es mitad de diciembre.

-¿¡QUÉ!?

Miro todas las casas y todas están decoradas, entro corriendo a la casa y por dentro también, de verdad esta vida es muy rara para mi.

-¿Dónde están todos ?

-Deben de estar por llegar, cuando tengas a tu protegido en frente solo tendrás que pensar en entregarle tu alma a él o élla y con eso bastara, ¿está bién?

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Me quedo dormida en la sala, nunca llegaron casi a las nueve llegan mis papás, Derek, Iker y otra mujer.

-Te dije que no vinieras a mi casa si ibas a molestar, querías conocer, ya lárgate.

-Como eres capaz de tratarme asi, te odio- y antes de llegar donde estoy, está lo jala y le besa los labios- Es mentira, te quiero, hasta luego- y corre hacia los cuartos de arriba.

-Irene- mis padres se dan cuenta de mi existencia y vienen corriendo hacia mi- Creímos que nunca regresarías, ¿ya sabes tu lugar?- pregunta papá.

-Si, decidí quedarme en el purgatorio, solo vine a informarles y fui yo la sorprendida.

Volteo a ver a Iker que no se lo esperaba y me voy directo a la casa de Jacob.

Llevo una semana quedándome donde Jacob a veces llaman mis papás, unos dias vienen Damian y Derek seguido, estoy trabajando en un restaurante como cajera y mesera, asi que ya no tengo tanto tiempo libre. Iker no se ha dignado a mostrar su cara, me levanto a las 9 para organizarme comienzo a trabajar a las 11 y no me siento bien al ser ángel guardián todo cambio para mi parezco desorientada, tengo poderes de ángel, mis heridas se curan incluso más rápido que antes, puedo ir y venir a cualquiera de los pisos.

Cuando llego al restaurante me pongo mi uniforme y me siento en la caja registradora estoy en uno de los puntos de mayor clientela, el día pasa con mucha tranquilidad, es un restaurante de comida rápida picante, todo es picante, excepto las bebidas, aunque venden cerveza picante.

Cuando entro de mi descanso de las cuatro, como ahora me toca ser mesera voy y vengo saludando y ateniendo unos clientes, Sergio trabaja aquí medio tiempo para comprarle algo a su novia, asi que paso al lado de él que esta a punto de irse, escucho como saluda a alguien y sigo con mi trabajo, cuando me llaman voy y sin levantar la vista.

PECADO. (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora