XXXVI

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Guadalupe es la mejor mujer que conozco es la perfección en persona me enseño todo lo necesario para salir a adelante y convertirme en la mujer que soy hoy en día.

Jacob y Sergio son dos grandes amigos y agradezco haberlos conocido, mis hermosos perros fueron los guardianes mas valientes que pude conocer, me cuidaron cuando nadie más podía.

Mi madre y su pareja se sacrificaron para salvar a Iker y a mi y estoy muy agradecida por su valor y estoy feliz de tenerlos de vuelta en mi vida.

La loca de mi suegra la quiero y estoy en deuda con ella, me dio a la mejor pareja que pude pedir, al hombre de mis sueños.

Me separo de mi papá y descubro que llore, me suelto de su abrazo y corro donde Damian, él sabrá que siento y espero que me tranquilice, cuando ya me estoy calmando siento una mano en mi espalda volteo y beso a Iker en los labios.

-Te amo.

-Yo también te amo y no me cansare de recordartelo- me dice cuando estamos bailando un vals- Cuando se acabe la recepción vamos a viajar a nuestra luna de miel, no crees que ya espere demasiado- me dice al ver mi cara de sorpresa.

-Esta bien déjame disfrutar de esta noche y luego me iré contigo para siempre, los dos solos.

-Eso me haría muy feliz.

Cuando ya está llegando la media noche, nos despedimos de todos, mis papás también se van a ir ya, nos deseamos mucha suerte de ahora en adelante y nos perdemos de vista en la carretera; Iker me dijo que era más cómodo que fuera en la parte de atrás para que yo pudiera dormir, pero yo quería ir a su lado y me quede de copiloto durante todo el viaje al aeropuerto, cuando bajamos me sentía mal debía ser por como dormí, hicimos todo el procedimiento y nos dirigimos a Cuba, él solo me lleva a países donde haya mar.

En el avión vuelvo a dormir, y me siento inmensamente feliz, todos nuestros "demonios" por fin nos dejaron en paz.

Cuando despegamos y ya podemos quitarnos el cinturón me levanto y voy al baño, hago mis necesidades y me organizo un poquito el maquillaje, la verdad quiero parecerle la mujer más hermosa del mundo.

Al salir camino por el pasillo hasta mi asiento y al llegar veo una chica en mi silla bebiendo champaña con mi esposo.

Al llegar hasta ellos paso y me siento en un asiento vacío del fondo, que buen esposo el mío. Intento dormir pero los celos no me dejan, al voltear a ver a mi derecha veo a un joven muchacho tendría 15 años.

-Hola- me dice.

-Hola- le digo sonriendo.

-Mi hermana me dejó por hablar con tu hermano.

-Tu hermana está hablando con mi esposo.

-Oh, lo siento debería hablar con ella- se levanta y yo lo detengo.

-Si mi esposo no la detuvo de coquetear con él, no lo deberías de hacer tú.

Seguimos hablando hasta que me gana el sueño.

PECADO. (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora