CAPITULO 28
[Niall Horan]
No iba a llamarla para pedirle perdón, me negaba en rotundo. Puede que me estuviera pasando con los celos pero motivos tenía y de sobra así que que se comiese un poco el orgullo y me llamase o no volveríamos a hablar hasta que yo volviese a Londres.
Yo le había ofrecido ayudarla a pagar el ático que tanto le había gustado pero me dijo que no y, de repente, llegaba un guaperas, le ofrecía ayuda y ella decía que sí, ¿y qué pasaba conmigo? No, no iba a llamarla ni a pedirle perdón porque, básicamente, no había hecho nada.
[Bea]
Abrí los ojos lentamente y miré alrededor. Desde luego que no estaba en mi cuarto y mucho menos en mi casa. Estaba en un sofá. Noté a alguien detrás de mi y sonreí cuando el brazo de Damon pasó por mi cintura. Supuse que la noche anterior nos habíamos quedado completamente dormidos. Me giré con cuidado de ni despertarle ni caerme del sofá para mirarle. El pelo negro le caía sobre los ojos descuidadamente y tenía la boca ligeramente abierta. Le aparté algunos pelos de los ojos con cuidado y le acaricié la cara.
-buenos días... -dijo con voz ronca-
-hola -me abrazó escondiendo la cara en mi cuello- creo que nos quedamos dormidos
-que lista... -reí un poco acariciándole el brazo- me extraña que ninguno se haya caído del sofá
-casi me caigo al darme la vuelta pero, como puedes ver, he sobrevivido -esta vez fue él quien rió- sobre lo de ayer... -se separó y abrió los ojos-
-¿te molestó? -Negué- ¿te arrepientes? -Volví a negar- ¿entonces?
-me encantó -sonrió abiertamente abrazándome con fuerza-
-llevaba un tiempo queriendo hacerlo pero no estaba seguro -le sonreí y le di un pequeño beso, él no tardó en abrazarme por la cintura- ¿crees que podríamos intentarlo? Digo...si estás preparada para tener algo...
Tener algo con Damon quien llevaba cuidando de mi los últimos 20 días sin parar, quien había estado llamando todos los días solo para saber cómo estaba y si estaba mal plantarse en mi portal a los 15 minutos solo para que sacarme una sonrisa. Si en los últimos días había sonreído había sido sólo gracias a él.
-creo que podría funcionar -dije con una pequeña sonrisa-
-¿de verdad? No quiero que te sientas pre -antes de que dijera alguna otra tontería le besé- vale...lo pillo -sonrió y me besó una vez más-
-tengo que ir a casa...es Nochebuena -asintió- ¿tú qué vas a hacer? -Pregunté al recordar que su familia estaba en Estados Unidos- ¿por qué no has ido a New Jersey?
-porque los vuelos son caros -asentí- no te preocupes, ha venido un primo mío con su novia así que estaré con ellos
-vale...cualquier cosa me llamas -asintió-
Le besé una vez más y me levanté del sofá estirándome. Iba a tener dolor de espalda. Lo sabía, unas contracturas de campeonato tendría. Le noté sentarse y quejarse, supuse que de lo mismo que yo.
-la próxima vez propongo que durmamos en la cama -dije riendo mientras iba al baño-
-¿próxima vez? -Me di la vuelta y le sonreí-
-espero venir más veces...la verdad es que me ha gustado tu piso -le vi sonreír antes de entrar en el baño-
No sabía si esto sería una buena idea pero sí que sabía que me ayudaría a seguir adelante. Me di una ducha y tuve que volver a ponerme la ropa del día anterior. Cuando salí del baño Damon había preparado desayuno para los dos. No tenía ganas de irme porque me sentía bastante bien estando con él pero mi madre no tardó mucho en llamarme para decirme que fuese a casa.