CAPITULO 41
[Bea]
Estaba un poco nerviosa porque Harry me había llamado ayer por la noche, más bien, de madrugada, para decirme que me preparase una bolsa con ropa para tres días porque pasaría hoy a buscarme temprano. No me había dicho a donde me llevaría pero me había asegurado que me gustaría, y mucho.
-pero ¿no te ha dicho nada de nada? –Dijo Alba, quien se había quedado a dormir, entrando en mi cuarto con su cuenco de cereales matutino-
-no, solo que prepare ropa para tres días –dije metiendo una bufanda ya que no sabía a dónde podía llevarme-
-a saber… -dijo sonriendo mientras se sentaba en plan indio- por cierto…no soy la única que escucho a Liam y Cris anoche ¿verdad?
-no, hija no… -dije suspirando aunque terminé riendo- desde que la enana se ha estrenado está que tira cohetes –añadí haciéndola reír tanto que casi se le salen los cereales por la nariz- no me manches la cama, por favor
-perdona –dijo todavía riendo entre dientes-
Justo entonces me sonó el móvil con un mensaje de Harry diciéndome que salía de casa y que cuando estuviese abajo me daría un toque. Así que con rapidez metí las últimas cosas, como cargador, cepillo de dientes y esas cosas, en la bolsa de viaje. Fui al armario y cogí el abrigo, me lo puse y cogí la bolsa colgándomela al hombro.
-¿ya te vas? –Preguntó Cris a quien me encontré por el pasillo vistiendo la camiseta de Liam-
-sí, cuando Harry me de un toque –dije yendo al salón. Allí estaba Liam sentado en el sofá con una manta por encima- Liam…sabes que tenemos puesta la calefacción ¿verdad? –Enseguida escuché la risa floja de Cris a mis espaldas-
-ya pero es que tengo frío –dijo el ajustándose la manta alrededor-
-estás sudando
-¡pues estoy bien! –Dijo visiblemente nervioso-
-¡epa! –Dije riendo, sentándome a su lado- venga pequeño Liam… ¿qué te pasa?
-nada… -dijo con la boca pequeña moviéndose un poco en el sofá- ya te lo he dicho, tengo frío…
Sonreí con algo de malicia mientras Cris también reía, me acerqué un poco más haciendo que él se alejase pero llegó un momento en el que ya no había más sofá así que se levantó. Yo aproveché que la manta llegaba al suelo para pisarla sin que se diese cuenta, haciéndola caer al suelo y dejándome ver las marcas rojas en la espalda de Liam.
-vaya, vaya, vaya… -dije sonriendo abiertamente- así que Cris le gusta el sexo duro
-¡Bea! –Exclamó la aludida poniéndose completamente roja-
Estaba convencida de que me hubiesen matado si no hubiera sido porque el teléfono me sonó haciéndome saber que Harry estaba abajo.
-recordad que Bea os quiere –dije dándole un abrazo a cada uno- y cuidado con la cama, no tenemos dinero para comprar otra
Esquivé el cojín que Liam me tiró por los pelos pero alcancé a lanzarle un beso antes de salir corriendo del apartamento. Me puse el abrigo justo antes de salir del portal aunque fue una tontería porque Harry me esperaba en el coche, a menos de cinco metros.
-buenos días –dijo con una sonrisa brillante, pasándome un vaso con el logo de Starbucks y dándome un pequeño beso en la mejilla, muy cerca de los labios- perdona que no te avisase antes pero tuve la idea ayer por la noche
-no te preocupes –dije sin que la sonrisa se me borrase de los labios- tan solo he tenido que decirle a Cris que le diga a Danny que no iré los próximos tres días –dije poniéndome el cinturón con cuidado de no derramar el chocolate-