•El precio del servicio•© #EN EDICIÓN

~33~

POV Leia

– ¿Sabe Jason que estás aquí? –preguntó curioso por verme allí.

– Nadie sabe que estoy aquí, Nova. Conseguí tu dirección y decidí en venir a verte.

– Bien. Entra, no es bueno que estemos aquí afuera.

Nova me permitió el ingreso. Su casa era muy bonita. Fuimos hasta una habitación que al parecer era su oficina. Un gran cartel de "Angels and Demons" colgaba de la pared detrás de su escritorio.

– ¿Quieres algo de beber? –preguntó mientras se acercó a un mini refrigerador que había.

– Podría ser jugo si no te molesta.

Nova ya tenía en sus manos dos cervezas.

– Bien, tendría que suponer que no bebes a estas horas.

Dejó una de ellas en el refrigerador y agarró un pequeño jugo en cartón.

– Temo saber porque estás aquí –tomo asiento frente a mí, del otro lado del escritorio– ¿Quién fue? ¿Jason? –trató de adivinar.

– En realidad, Jason solo me ha dicho que estabas en problemas,  pero fui yo quién se las ingenió para sacarle información a Scott. Por favor, no te la agarres con él, pensó que yo ya lo sabía.

Nova tan solo apretó los puños y bufó.

– ¿Has venido a darme un sermón entonces?

– No tengo porque hacer eso, Nova –suspiré– quiero creer que sabes muy bien lo que haces y donde estás metido. No soy nadie para decirte lo que tienes que hacer.

– La correcta Leia diciendo eso. Realmente me sorprendes muchacha, pensé que por todo lo que te hice mínimamente vendrías aquí a decirme que, me entregarías a la policía.

– Sinceramente no quiero verte tras las rejas.

– ¿A que has venido entonces?

– Quiero ayudar.

Nova me observó unos instantes.

– ¿Y cómo crees tú que podrías ayudarme, Leia? 

– No lo sé, solo sé que quiero darte apoyo.

– Estás loca si piensas que  dejaré que te involucres en esto –golpeó fuertemente sobre el escritorio– esto no es un puto juego.

– Pero, le has dicho a los demás. Le has pedido ayuda. ¿Por qué no puedo ayudar también?

– Es que no lo entiendes, ¿verdad? no puedo permitirme de que te suceda algo. No a tí

Mi corazón comenzó a bombear rápidamente. 

– No quiero involucrarme directamente con el negocio de por sí, quiero ayudarte a que puedas salir de las sospechas. ¿Qué es lo que necesitas para que estés más seguro? Yo podría ayudarte mínimamente en eso.

Nova pensó unos cuantos segundos sin quitar su mirada de la mía.

– ¿Estás segura? Mira que es arriesgado que te vean conmigo.

– Segura. Aparte, ¿Qué información podrían obtener de mí? No sé nada de esto. 

– ¿Y tu novio? ¿Sabe que me quieres ayudar?

– Aún no lo sabe. No considero que deba enterarse. Se pondría loco.

– Si tú no se lo dices pues, yo tampoco lo haré. –suspiró– esto no es lo correcto pero si te voy a necesitar para algo Leia.