•El precio del servicio•© #EN EDICIÓN

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Lo mismo volvía a suceder. Después de las discusiones, Nova se iba de la casa y no volvía hasta el día siguiente. Lo mismo que ocurrió en Bahamas.

Apenas me desperté lo llamé a mi padre para que no se preocupará. Le dije que estaría unos días en la casa de Nova.

Alex me había enviado un mensaje. Preguntando que había pasado con el gilipollas de mi novio. Brevemente le comenté todo lo que había ocurrido, las discusiones y que luego se marchó a quién sabe donde ni con quién.

Alex a todo esto me dijo que me merecía alguien estable. Que pueda dormir sin preguntarme si mañana me seguirá queriendo o no. En conclusión. Tenía algo de razón.

Alguien llamó a la puerta. A duras penas me levanté de la cama y la abrí. Del otro lado se encontraba Duncan con una bandeja de lo que sería un desayuno.

– Hola Lei. Pensé que tendrías hambre y creí que sería mejor subirte el desayuno.

– Hola Duncan, muchas gracias –besé su mejilla– pasa por favor –abrí la puerta en su totalidad para que pueda ingresar

– Me quedaré unos minutos. Tengo asuntos que atender. ¿Como te sientes? –preguntó Duncan, podía notar la preocupación en su voz.

– Mentiría si te dijera que estoy bien y que lo que me dijo Nova no me afectó. Pero no, estoy hecha mierda –traté de sonreír

– Escuché la discusión Leia –soltó un suspiro– a veces Nova se comporta como un idiota. Dice cosas que en verdad no piensa...

– Claro que lo piensa Duncan –lo interrumpí– siempre dice que tengo actitudes caprichosas y demás cosas. Se que soy caprichosa muchas veces pero, él no me da el lugar que tengo por ser su novia. Es como si fuera solo una palabra. Y es más que eso.

– Sabes que él nunca tuvo una relación Leia. Entiende que él se manejará de una manera como decirlo, ¿poco convencional? Si, es verdad que muchas veces dice que tienes actitudes inmaduras. Pero bueno, la vida lo llevó a ser así. No debemos Juzgarlo.

– ¿Por qué tengo que entenderlo siempre Duncan?¿Por qué el no puede entenderme a mí?

– Creeme lo que te diré. Él trata de entenderte muchas veces Leia. Trata de entender que tu tienes una vida como cualquier otro adolescente. Qué tienes amigos y que te gusta salir y divertirte con ellos.

– Hablas como si ustedes no son adolescentes.

– Lo somos, pero con otra cabeza. Ya no somos unos niños inmaduros como la mayoría de nuestra edad lo son. Tenemos otras responsabilidades Leia.

– No lo justifiques Duncan. Que no por ser maduro tiene que tener esas formas de tratarme.

– Te equívocas. Con esto no quiero justificar la manera en la que te trató ayer. Solo quiero hacerte recordar. Tu sabías que sería complicado una relación con el Leia, ambos lo sabíamos. Él es así, posesivo en muchas oportunidades. Pero no es un mal chico.

– ¿Qué crees que debo hacer Duncan?

– Hablaré con él. Calmaré un poco su humor. Solo ten paciencia Leia. Lo único que puedo decirte es que si quieres continuar con la relación, si ambos lo quieren, tendrás que darle amor. Y bueno, mejorar actitudes que ya sabes. Pronto verás como tendrás a ese hombre por completo que no alcanzará los días en que te demuestre lo que significarás para él.

– Dime algo. ¿Él no siente lo mismo que siento yo por él, verdad?

– Si tu pregunta es si te ama. No. No te ama aún. Pero él no pone trabas a que se logré enamorar de ti. Hay grandes posibilidades a que se enamoré eso tenlo por seguro. Por eso, demuestrale lo que sientes por él. Demuestrale, que a pesar de todo seguirás a su lado.