La reencarnación de Xena ¿Hija de los dioses?

No me amenazan de muerte

Llegamos al comedor y mi estómago decía ¡Yupi!, mis nervios no tanto, al llegar con Nico varias miradas se posaron en mí.

Genial, menudo cumpleaños estoy pasando - murmuré

¿Es tu cumpleaños? - dijo Nico alucinado - ¡no me lo dijiste! mmm... Feliz cumpleaños - saludó rascándose la nuca - no soy bueno en esto, luego si quieres te presento a mis amigos y celebramos

Lo miré incrédula - supongo que gracias, no es que tenga muchos ánimos de festejar es muy considerado de tu parte

Me ayudaste, además me caes bien - se encogió de hombros - ven vamos a hablar con Quirón y el Señor D

Recorrimos las mesas de los dioses no fue difícil identificar cuál pertenecía a cada Dios, pero me perturbaba como me miraba el dios Dionisio, supongo que pensaba: Genial otra mocosa a la que cuidar, tenía la mirada aburrida puesta en mí pero parecía reflejar algo de alivio y felicidad al verme como si supiera que llegaba, imaginaciones mías de seguro; caso contrario Quirón no supo ocultar su asombro a penas me vio seguido de melancolía y pasó a felicidad, rara mezcla, capaz el sabía a quién me parecía tendría que hablar luego con él, se inclinó al dios del vino parecía preguntarle algo recibiendo una afirmación de cabeza y volvió a  observarme.
Cuando estuvimos frente a ellos Nico habló por mí, supongo que pensaba que seguía sin procesar todo, pero mi cerebro estaba tranquilo

Encontré a esta semidiosa en plena misión Quirón - explicó - asesinó a un cíclope - Dionisio me miró con ¿orgullo? - su madre ya ha dado permiso de que venga al campamento

Muy bien Nico - sonrió dulcemente Quirón para ambos - me alegra que estén bien, ¿Cómo te llamas?

Graciela Nores señor Quirón - respondí

¿A caso no sabes saludar? - preguntó con irritación falsa el Señor D y noté como Nico se tensaba a mi lado

Claro que sí Dios Dionisio - si quería una excusa para amenazarme de muerte no lo iba a conseguir - pero con los dioses es mejor guardar cautela ¿no lo cree?

Hizo una mueca con su labio - cabaña 11 señorita Nores - y se puso a hablar con un sátiro

Luego de que coman la llevas a la casa grande Nico a que vea el.... - Nico lo interrumpió - no es necesario, leyó los libros

Entonces mejor - sonrió Quirón - llevala a recorrer el lugar y luego al campo de entrenamiento, pero por ahora a su mesa

Como digas Quirón - dijo Nico
Bienvenida al campamento mestizo Graciela - me sonrió

Muchas gracias Quirón - le devolví la sonrisa, no fue tan mal como pensé, al menos no me habían cambiado el nombre, Nico pareció darse cuenta pero supongo que dejó esa duda para más tarde luego de escuchar a mi estómago rugir. Me acompañó hasta la mesa de Hermes donde se pararon los Stoll a recibirme

Ella es la nueva campista su nombre es Graciela - habló Nico y agradecí que no haya dicho mi apellido - la acompañaré a que queme su ofrenda y la traeré de nuevo aquí

Gracias por eso, todos acá lo habían hecho ya - dijo al que reconocí como Travis

Deja tus cosas aquí si quieres, nosotros la cuidaremos - ofreció Connor amablemente

Ni lo sueñen - dije - solo una loca dejaría sus cosas a los hijos del dios de los ladrones

Nos has ofendido - fingió Travis indignación poniendo una mano en su pecho

A leído los libros, no la pueden engañar con sus tonos falsos - alegó Nico

Debíamos intentar - habló Connor - te guardamos asiento