Realidad de una prostituta. -Basada en hechos reales-

Caminas por la calles con la esperanza de que algún día seas entendida. Te miran y te reconocen sin importar lo que haz pasado. Por las mañanas te sientes alegre cuando no hay nadie a tu lado. Pero en las noches la compañía abunda por montones.

La prostitución no es un juego de niños. No hay nada más doloroso que ver a tu familia sufriendo por tener un poco de dinero. Cuando esa responsabilidad cae en tus brazos, buscas el camino más fácil, pero no siempre el correcto.

Mi nombre real es Beberly Smith, pero mi nombre en el mundo de la prostitución es Scarlette. Llevo 5 años en el mundo de la prostitución. Para muchas personas es el empleo más enfermizo y méndigo que pueda tener. Pero a mí me ayuda a salir adelante y poder llevar comida, abrigo y pagar las cuentas.

Se dice que las prostitutas llevamos una vida de ensueño, que el dinero nos cae mas fácil que en "¿Quién será millonario?"; Pero así no funcionan las cosas. Hay muchos factores que hacen que nuestro trabajo sea desgastante, quitando la profesión y lo que tenemos que soportar (penetración). Como cuando un cliente no queda satisfecho, o dice que lo descontemos de su cuenta y no tiene ningún fondo, o pagan con cheque y no hay dinero.

Otros factores pueden ser cuando te topas con conocidos, por ejemplo el "novio perfecto de tu prima", el cual te da más dinero de lo usual para quedarte callada y más en las reuniones familiares.

Si te gustaría saber lo que sucede en la realidad de la vida dura... Sigue estos capítulos... Nada mejor que una historia contada en carne propia.

Mi razón de escribir esto, es que tengo anécdotas que quiero compartir, y que por fin se quite el estereotipo de que las mujeres prostitutas somos lo peor que hay.