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Terminamos hasta la noche. Y nadie hubiera pensado que Bruno fuera virgen. Le encanto tener relaciones conmigo. Tanto asi que lo hicimos por un buen tiempo, quedamos exhaustos y llenos de sudor. Nos bañamos juntos y lo hicimos en el baño. Salimos y no tomamos la necesidad de vestirnos.

Estamos desnudos en el sofá, abrazados viendo una película.

Miro a Bruno y él sonríe.

-Beb, me gustas mucho... No quería hacer el amor con una chica que no me gustase y que ella no me devolviera el cariño.

-¿Qué quieres decir?

-Quiero decir -Suspira y me mira a los ojos-, que estoy enamorado de ti.

Cierro los ojos y trato de pensar que las palabras de Bruno no son ciertas.

Bruno no se puede enamorar de mi, no soy una chica para él. No puedo abandonar mi vida por un hombre y ser su chica y tener todo sin siquiera mover un dedo.

Siempre he tratado de no involucrar sentimientos a las personas. Bruno era algo diferente, él era mi amigo. Cuando nos acostamos pensé que lo quería solo por curiosidad... No por sentimientos.

-Bruno, no puedes enamorarte de mí. Soy una prostituta, miles de hombres han pasado por mi y tu has sido uno de esos. No puedo enamorarme de ti, eres muy perfecto conmigo y yo no soy nadie. Debes buscar una chica de tu clase social, una que quiera y se pueda enamorar. Yo no soy esa chica.

- No me interesa que seas prostituta, sé que no soy nadie para decirte que me enamore de ti, pero lo hice. No por tu físico, sino por tu valor, por tus ganas de sacar a tu familia adelante. Eres hermosa y dentro eres el doble de hermosa... Me enamore de ti y me encargaré de ganar tu corazón poco a poco. Fuí virgen por toda mi vida, y acabo de hacer el amor contigo, porque eres la chica de la que me enamoré... Lo siento.

Me levanto del sofá y camino a mi habitación. Escucho como Bruno viene detras de mi y me abraza por la cintura y coloca su barbilla de mi hombro. Me doy vuelta para mirarlo y tiene sus ojos llorosos. Le acaricio las mejillas y comienzo a besarlo. Me acerca más a su pecho. Siento las lágrimas que caen por su mejilla e invaden nuestro beso.

Profundizamos el beso hasta llegar a mi cama. Baja su boca a mi cuello y me besa y muerde el cuello. Me abre las piernas y lentamente introduce su pene en mí. Comienz a gemir pero él me besa tiernamente. Comienza a hacer suaves movimientos dentro de mi y luego lo hace con más intensidad.

Bruno gruñe y me penetra con más fuerza. Él muerde mi labio y deja de penetrarme. Sale de mi y me pone boca abajo. Alza mi trasero e introduce su miembro de nuevo. No comienza lentamente, lo hace rápido y hasta dentro, tengo que controlarme porque me duele su intensidad. Bruno no para y me da una nalgada.

- Oh nena

Suspira y sus embestidas se reducen. Cada vez son más bajas hasta que llega a detenerse.

Sale de mi y se coloca sobre mi,.pero sin hacerme daño. Besa mi cuello y luego mi hombro derecho. Estoy bastante cansada pero él me toma y me acurruca en sus brazos. Me quedo dormida casi al instante.

Cuando despierto siento unos brazos rodeándome debajo de las cobijas. Huele a Menta. Bruno.

Miro hacia arriba y está profundamente dormido. Me recuerdo sus palabras:

Quiero decir que estoy enamorado de ti.

Todas las personas deberian corresponder un enamoramiento. Porque no sabes que corazón sincero hay dentro. Pero para ellos es más sencillo. Yo no puedo involucrar sentimientos con Bruno. Él es plata y yo soy plástico. Él es un crusero y yo un barco de papel. Él es un coliseo romano y yo una plaza de barrio.

Comienzo a pensar en mi nuevo empleo. Tendré libre tres dias. Eso no sería justo para él ni para mí. ¿Porqué simplemente no puedo tener una relacion normal con mi chico sin nada de por medio? Bruno es todo, es humilde, inteligente, luchadora, apuesto y me ama. Sin yo corresponderle se la misma manera.

Me quedo mirándolo por unos minutos y he llegado a una conclusión. Estoy en un completo estado de negación

Porque yo tambien me llegué a enamorar de Bruno Ricci...

Realidad de una prostituta. -Basada en hechos reales-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora