Fugitiva | Camren

¿Puedo ser perdonada?

Camila's POV

Eran las 8:30 AM y debía ir a la facultad. No había visto a Lauren desde que salió hecha un mar de lágrimas en la madrugada. Estaba preocupada. ¿Y si había hecho alguna estupidez? Honestamente, no tenía la menor idea de lo que había podido hacer ella y eso me preocupaba.

Tenía fe que cuando regresara al mediodía de la universidad, Lauren ya hubiera llegado. O por lo menos que tuviera noticias de ella.

Me sentía como una mierda. Había herido a Lauren y eso era algo nuevo en mí. Jamás había sentido tantos celos en mi vida. Celos que me llevaron al punto de ignorar como se sentiría esa otra persona.

— Buenos días Mila ¿Has visto a Lauren? – Era Dinah que bajaba por las escaleras.

Ahora tenía que contarle todo el drama de anoche a mi amiga.

— Hola DJ. – Forcé una sonrisa. – Veras, es complicado... Y-Yo...

Dinah me miraba expectante. Un tanto intrigada por mi tartamudeo.

— ¿Mila que pasa?

Tenía que decirle todo lo que pasó mientras ella dormía.

— ¿Recuerdas a Dave el chico de la facultad?

— ¿El tipo que parece recién salido del reclusorio? – Así lo conocía Dinah.

— Ese mismo. – Tomé aire. – Bueno, anoche salí con él para darle celos a Lauren, pero al parecer ella no lo tomo muy bien que digamos porque salió llorando a las dos de la madrugada.

Ahora que lo decía en voz alta, sonaba mucho más malo de lo que pensaba. Dinah abrió su boca y formó una enorme O, mi amiga estaba en shock.

— Camila ¿Hiciste qué? – Dinah levantó un poco su voz.

— Ya te dije. – Baje mi mirada avergonzada por mi comportamiento.

— ¿Estas de joda verdad? – Dinah no podía creer lo que había hecho.

— No.

— Camila te amo, pero eres una completa estúpida. – No distinguía si Dinah estaba decepcionada o enojada. Creo que una mezcla de ambas.

"Eres una completa estúpida." ¡Ouch! Aquello lo sabía muy bien, pero que mi mejor amiga lo dijera en voz alta, hacía que mi corazón se sintiera peor.

— ¿Por qué lo hiciste? – Volvió a hablar mi amiga.

— Estaba dolida. – Dije sin más.

— ¿Por qué? – Dinah me miró confundida.

— Es que vi un mensaje de una chica en el teléfono de Lauren y pensé lo peor, pero al final resultó ser solo una amiga.

— Camila eres una idiota. – Replicó mi amiga.

— Lo sé. – Bajé mi mirada avergonzada. – Tú sabes lo insegura que soy.

Y era verdad, la inseguridad era una de las peores características que poseía. Simplemente, creía que yo no era suficientemente buena para alguien. Y, en este caso, no creía poder dar la talla en una posible relación con Lauren.

— ¿Sabes? – Dijo mi mejor amiga. – Si Lauren está contigo es porque realmente siente algo fuerte por ti. No pongas en duda su querer.

"No pongas en duda su querer." "No pongas en duda su querer." "No pongas en duda su querer." Aquellas palabras las escuchaba como un eco en mi mente.

— Tenemos un problema. – Volvió a hablar mi amiga. – Lauren no es de perdonar con un simple "perdón, no lo volveré a hacer."

Lo que mi mejor amiga había acabado de decir, de verdad me asustó. Honestamente, no se me había pasado por la cabeza la idea de que Lauren no me perdonara.