Mipha

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Los días pasaron, logré ayudar a varias personas que descansaban en postas. Un día, me dirigía al este de Hyrule, oí una voz llamándome. Me fijé en el lago a mi derecha y me encontré a un Zora, me miraba simpático. Me explicó con calma que un tal príncipe llamado Sidon estaba buscando hylianos para una misión de gran importancia. Recorrí el camino hacia uno de los primeros puentes. Durante todo el duro camino donde no podía avanzar por la lluvia, el príncipe Sidon estuvo guiándome. Llegué al palacio Zora, allí me contaron la tragedia que sufrían desde hace mucho. Una de las bestias divinas, denominada "Vah Ruta" no paraba de provocar la densa lluvia. El rey me estuvo estimulando a recordar, sin resultado. Uno de los Zora mas ancianos me estuvo despreciando solo por ser hyliano, aún así, el rey no me hizo desprecio y me dio una armadura que me ayudaba a nadar y subir por cascadas, me quedaba como un guante. Aunque se notaba preocupado porque no recordaba a su hija me hizo bajar a hablar con el inaguantable anciano. Fue entonces que recordé a una joven y bella Zora, me estaba curando un rasguño y por lo que salía en el recuerdo nos encontrábamos en la trompa de la bestia divina. Me hablaba con dulzura, a la vez que trataba de hacerme entender que era mi protectora en la sombra. ¿Qué te pasó Mipha? ¿cómo pudiste caer? La verdad estaba cerca y de lo mas oscuro de mi mente, los recuerdos volvían a resurgir, a la vez de ese amor que una vez sentí hacia la princesa de Hyrule.

𝐍𝐨 𝐦𝐞 𝐬𝐮𝐞𝐥𝐭𝐞𝐬 • (𝑻𝒍𝒐𝒛)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora