Capitulo 39

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~~~~~~Te Soñé~~~~~~

Miré como Ian respiraba suavemente. Se veía tranquilo dormido. Él, al contrario de mi, si pudo dormir toda la noche sin despertar, en cambio yo no pude pegar un ojo. Cada vez que lograba relajarme y cerrar los ojos, la imagen de Josh obligándome a hacer algo que obviamente yo no quería, venía a mi cabeza. Sabía que una sola persona habría podido tranquilizarme del todo, que con un solo abrazo de él todos mis miedos desaparecerían, pero lamentablemente, a esa persona la había rechazado como si fuera él el culpable de lo que me había sucedido.

Fui una idiota, lo sé. Una imbécil por reaccionar así. Yo nunca quise alejarlo de mi, al contrario, lo que más deseaba era un abrazo suyo, pero cuando sentí que otra persona me tocaba me alejé de manera involuntaria, estaba tan asustada —y aun lo estoy— que no identifiqué su tacto, no lo reconocí y me siento idiota por eso.
Ver su expresión dolida hizo que mi corazón se estrujara en mi pecho, su dolor era mi dolor, pero estaba tan cegada por el miedo, que no pensé en él, solo pensé en que quería salir de ahí, y me arrepiento como no tienen idea. Ahora lo que más deseaba era un abrazo suyo, acurrucarme contra él y pedirle mil veces disculpas por haberlo repelido. Necesitaba escuchar de sus labios que todo estaba bien, lo necesitaba a él.

Miré mi mano que descansaba sobre la almohada y sonreí, el anillo que Criss me dio se ve hermoso. Lo toqué con mi dedo pulgar, haciéndolo girar. Aun no me creía que estuviéramos comprometidos, que estuviéramos planeando un futuro juntos.

—No sé que haría sin ti... —susurré, con mis ojos aun puestos en el anillo, pero pensando en Criss y en que tenía que ir a pedirle perdón.

Ian se removió a mi lado y restregó sus ojos. Estoy tan agradecida con él, si no hubiera sido porque él siguió mi consejo de buscar a Josh por las habitaciones y así encontrarnos, quizás Josh habría logrado su propósito. Aun después de que llegaramos a mi casa, aun después de que mamá me diera un calmante, Ian no dejaba de maldecir a Josh y de repetir que no lo hubieran detenido, a él o a Criss, que cualquiera de los dos lo hubiera matado para él estaba bien. No hubo forma de calmarlo, y no hubo caso de convencerlo de que se fuera a su casa, él se negó a que lo alejaran de mí; es por eso que terminó durmiendo conmigo, como en los viejos tiempos. Ian es mi mejor amigo de toda la vida y con esto comprobó que no hay en quien pueda confiar más que en él.

Mamá reaccionó como cualquier madre lo habría hecho. Sus intenciones de demandar al que hasta hace unas horas fue mejor amigo de Ariel, por intento de violación no hubo quien se la quitara de la cabeza.Tampoco me negué, no tenía ganas de discutir, en ese momento solo deseaba dos cosas: dormir y a Criss conmigo diciéndome que todo había pasado y que me amaba, pero no lo tenía, no estaba conmigo porque yo lo había alejado.

Lo único que hacía era temblar como perrito mojado y abrazarme a mi misma. Fue entonces cuando mamá decidió darme un relajante, el cual solo duró unas horas. Alex y Ariel eran otros que no dejaban de repetir que Josh estaba muerto, que la única razón por la que no lo habían matado a golpes era porque ya había recibido suficientes de Ian y Criss. Además de recordar que él estaba ebrio. Aun siento su asqueroso sabor en mi boca, sus aquerosas manos acariciar mi cuerpo.

Me estremecí ante el recuerdo y me levanté, me metí al baño dispuesta a ducharme y quitarme la sensación de sus manos acariciando mis senos. Una vez estuve lista, salí del baño envuelta en una toalla blanca, encontrandome con Ian sentado al borde la cama con su móvil en mano. En cuanto sintió mi presencia, levantó la vista del aparato y me sonrió.

—Hola, puntito, ¿como te sientes? —preguntó, levantándose y caminando hacia mí.

Me envolvió en un fuerte abrazo, importándole poco mojarse con mi cabello.

Te SoñéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora