Cuando cambio mi vida

Capitulo 33

LUKE

Este jueguito que nos traíamos entre manos maider y yo me encantaba, esas miradas de complicidad que nos echábamos, esos roces cuando pasamos uno al lado del otro me volvía loco, solo me solía sonreír. Nos quedaba un examen a cada uno, bastante fácil para ambos dos, así que cada uno estaba a sus cosas, ella en su campeonato, al que me había obligado matt a acompañarle si o si, y  yo pensando que hacer con las navidades, me voy a nueva york o no me voy a nueva york, de verdad, ¿me quería quedar solo todas las fiestas? no lo se.

Por otro lado estaba pensar que matt y maider se iban tres semanas casi, me iba a aburrir seguro, pero eso de celebrar las navidades no era lo mío, se me había olvidado ya lo que era eso de una familia en navidad.  Y por primera vez en tantos años , estaba dudando si celebrarla o no, definitivamente esta chica me esta cambiando la vida por completo, y no me disgustaba el nuevo luke.

Con ella era mejor persona pero a la vez era malo, a veces muy malo, me salia una sonrisa tonta solo de pensar en la chica rubia que me quitaba el hipo cada vez que me rozaba por los pasillos, o donde fuera.

Desde que nos llevábamos tan bien no había estado con ninguna otra, y tampoco es que me apeteciera la verdad. Con lo que tenia me bastaba de sobra, bueno de sobra tampoco, si fuera por mi estaría todo el día haciendo esos jueguitos que tanto nos gustan. 

 Estaba tirado en el sofa, como de costumbre, cuando carrie y maider entraron por la puerta cargadas de cajas, me levante a ayudarles.

-Pero ¿qué es todo esto?.- pregunte sorprendido de lo que pesaba.

-Es el vestuario del campeonato acaba de llegar, pesa una barbaridad.- me dijo maider, llevando una caja a cuestas que era más grande que ella.

-Pero ¿cuantas veces con cambiáis de ropa?, esto es una barbaridad.- pregunte llevando una caja a su cuarto.

-Es sorpresa guapo, ya lo veras, ya me ha dicho mi hermano que te a obligado a venir a vernos, muy mal luke, tenias que estar deseando vernos bailar.- se hacia la indignada, ya habíamos llevado todo a su cuarto, y yo como tenia curiosidad metí la mano en un caja, me quede petrificado cuando vi el corsé a lo moulin rouge morado que cogi al rebuscar. Maider seguía a lo suyo ordenando todo.

-Definitivamente si lleváis esto puesto voy encantado, primera fila si hace falta.- dije mirando el corsé, maider y carrie corrieron a cojerme la prenda de la mano pero yo la levante para que no al cogieran, eran muy chiquitas comparadas conmigo, también es verdad que yo era muy alto.- dios mío pero a donde vais a ir con esto, autenticas cabareteras me muero por veros asi vestidas.- me seguí mofando hasta que maider me tiro encima de la cama cayendo encima mía y quitándome la prenda de la mano.

-Te he dicho que es sorpresa ojazos.- me lo dijo susurrando encima mia, se levanto antes de que la cosa se pusiera mas calentita de lo que habia empezado y nos olvidáramos que carrie miraba con sonrisa picara hacia nosotros.- Ale vete de aquí que tenemos que ordenar todo y llevarlo a la academia.

Le hice caso y me fui al salón, ¿que tenían preparado para el campeonato? sabia que lo tenían muy en secreto, iban a ganar y todo el mundo tenia una curiosidad enorme por ver que tenían preparado este año. Eran muy buenos, este año solo sabia que la actuación era de bailar y cantar, si ganaban les daban dinero y el pase a la segunda fase de un musical en nueva york, un premiazo. Nunca había oído cantar a maider, de repente al ver esa mini prenda me entraron unas ganas horribles de que llegara el viernes y ver que hacia mi brujita favorita en ese escenario.

Me senté en el salón y me puse a estudiar el último examen que lo tenía mañana jueves, maider y carrie salieron a la media hora del cuarto cargadas otra vez.