Cuando cambio mi vida

capitulo 37

MAIDER

Había pasado de un estado de tengo ganas de verlo a un no quiero ni verle la cara en dos segundos, ese chico me ponía de los nervios, me enfadaba muchísimo, nada mas le miraba veía como estaba con irene o con anna me da igual y me ponía mala, celosa perdida. Mi tranquilidad había durado una mísera semana ¿por qué me pasan estas cosas a mi?, solo una semana, esto es increíble de verdad.

Estos monólogos que me genero yo sola en la cabeza, me dan migrañas. Y para colmo tenía que vivir con él, senti unas ganas irrefrenables de irme corriendo a casa de mi tía de vuelta, pero era lo que había acordado así que no me quedaba otra. Me monte en el coche con mi padre mi hermano y el innombrable que casualmente se puso detrás conmigo. Pero no se puso en el asiento de mas lejos, no no, se puso en el del medio bien pegado a mi.

- Luke, existe una cosa que se llama espacio vital, y tu estas invadiendo el mio demasiado, apártate.- le empuje mientras lo decía, que pesadilla de hombre, era una estufa humana siempre pegado.

-No va el cinturón preciosa, y ¿no querrás que muera no?.- me miro teatralmente.

-No tendré esa suerte no.- mi padre y mi hermano se reían mientras luke y yo seguíamos a lo nuestro como siempre, matt subió la música, esta ayudando a su amigo, luego se las va a ver conmigo, hombre que si.

-¿quieres que desaparezca del todo maider? cada vez se te da peor mentir eh.- me lo dijo muy bajito y demasiado cerca mientras me ponía la mano en el muslo, se la aparte de inmediato.

-Luke, no empecemos, mantén tus manos lejos de mi o te las corto.- le amenace muy seria, el solo sonrió, como siempre.

-Sabes que no quieres cortarme las manos, seria una pena no poder volver a hacerte lo que te he echo ya.- empezó a contar con los dedos.- muchas veces Maider, y creo que te gusto, bastante.- es un arrogante, tenia razón, pero me daba igual, estaba de mala leche.

-Eres un creído luke, no me haces nada que no me hayan hecho otros, no te creas mejor que todos y cada uno de ellos por haber sido el último en tocarme hasta el final.-toma eso majo, primero puso cara de mala leche, celos, pero de repente cambio su semblante al de siempre, sonrisa torcida, ceja levantada. Analice mi frase, entonces caí.

-¿El ultimo? pensaba que el ultimo había sido alex, vaya vaya que sorpresas te da la vida.- y seguía sonriendo el muy capullo, vaya cazada, soy una bocazas asi normal que me gane la mayoría de las veces, bocazas.

-¿He dicho eso? que falló el mío, vaya cabeza la mía.- sonreí inocentemente, no me creía, vaya cagada, contraataque.- de todos modos ¿a ti que te importa lo que hice con alex? tu estabas en el cine con tu ex, y ambos sabemos a que va irene al cine.- se paralizo un segundo.- vaya vaya noto que paso algo que no se en ese cine, que intrigante luke.- cambio la cara, estaba disimulando, no se que seria pero me moria de ganas de saberlo.

- como te gusta atacarme con mis ligues, ¿no tienes nada mejor?.- estaba desviando el tema.

-Pues si.- me encare a él

-Adelante , ilústrame.-se me acerco mas.

-Chicos ya hemos llegado.- dijo mi padre sin mirar para taras, gracias a dios, y gracias por llegar porque no se me ocurría nada mejor en ese momento.

Me esperaban unas semanas muy tensas con este sujeto al lado mía todo el rato. Y es que el tío me seguía mirando y se reía, que guapo es, si no fuera tan guapo no me pasaría esto, pero es que es guapísimo, no guapo, guapísimo.

-Aquí esta mi ático, el de papa esta en la siguiente manzana, este ático lo gane al poker.- decía mi hermano orgulloso, que tío.

-Luego os veo chicos, prepararemos algo de la fiesta, y cenaremos en casa ¿vale?.- dijo mi padre contentísimo.