Momentos: Loki y Tú

El Dios del engaño

Parte: 3 de ¿?

Época: Muy anterior a Marvel

Spoiler: No

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Loki estaba leyendo en su biblioteca personal cuando abriste la puerta.Alzó sus ojos verdes, cruzando una intensa mirada con la tuya y,como siempre,notaste como el cabello de tu nuca se erizaba,estremeciendo toda tu piel.

Le saludaste inclinando ligeramente la cabeza,acto que el dios respondió volviendo a la lectura.

Algo iba mal.

Desde que habías llegado a Asgard hacía varias semanas,Loki desempeñaba el papel de protector. Es más, estabas allí gracias a él, ya que Odin estaba más que dispuesto a encerrarte o arrojarte desde allí hasta tu mundo. Sin embargo, su hijo había insistido,te había defendido con seguridad y fuerza y finalmente el padre de todos accedió con la condición de que Loki se encargara de supervisarte...si la cagabas, Loki sería castigado...

Y él no había dudado ni un segundo en aceptar la propuesta.

Por eso mismo aquella cara tan seria contigo no era la que te esperabas...

Te acercaste hasta su mesa y ocuparte tu silla. Otra de las condiciones(esta impuesta por tu guardián) era aprender a escribir Asgardiano,historia y ver si podías aprender hechicería.Alargarte la mano para agarrar el libro,pero Loki te lo impedió con un manotazo en la mesa.

Por un momento todo fue silencio. Luego, le miraste de reojo, alerta como un gato por si había que salir corriendo...cada vez más extrañada por su actitud.

Pero Loki ni siquiera te miraba. Su vista estaba fija en frente y su rostro reflejaba enfado.

-Puedes leerme la mente.

Parpadeaste

-¿Qué?¿De que hablas?

-Si eres un vampiro...y lo eres, tu poder sensorial aumenta por diez...cada cierto tiempo. Tu eres longeva...no eres un vampiro de hace tres días. Por lo que puedes leerme la mente.

Jamás en toda tu vida de vampiro habías oído algo así. Le miraste extrañada e intentaste hablar para negar tal hecho, pero Loki se levantó y te miró intensamente. Te agarró de los hombros y te obligó a mirarle.

-¿Sabes que estoy pensando?

-No

-¡No mientas!

-¡No lo hago!

Te zarandeó ligeramente, aunque fue suficiente para que tu sacaras los colmillos y le amenazaras....fuera hombre o dios no ibas a permitir que te trataran de esa manera, y con brusquedad hiciste que te soltara.

El gesto pareció sorprenderle. Tus colmillos parecían fascinarle y notaste como su corazón empezó a latir con fuerza...moviendo la sangre a un ritmo vertiginoso.

¿Cuanto hacía que no te alimentabas de alguien?

-Que pasaría...si te alimentaras de mi sangre.-dijo él con voz ronca. Te dio la sanación de ser él quien leía la mente

-Quién sabe...igual nada, no eres humano. Si lo fueras me alimentaria de ti. Fin

-He leído que los humanos también pueden beber sangre de vampiro. ¿Es cierto?¿Qué les pasa si lo hacen?

Le miraste confusa. No conocías la posibilidad de que un humano se alimentara de sangre de vampiro...ni siquieras sabías como nacían exactamente.

-Loki,no sé donde has leído eso, pero ese libro ya sabe más que yo...nunca ningún humano a probado mi sangre, y no puedo oir los pensamientos de nadie, lo siento.

Loki se quedó pensativo,consiguiendo que tu te relajaras,aunque la intensidad de esos ojos verdes siempre te desestabilizan...

Se giró un momento para mirar por la ventana, con aspecto ausente, y luego volvió a ponerse frente a ti.

-Quiero probar tu sangre.

Tus labio inferior tembló ligeramente.

-No sé si es buena idea..tu padre...

-Me da igual. Quiero probar tu sangre.

Sacó su daga y alzó su mano, con esa expresión que tanto Thor como él ponían cuando daban órdenes. Era evidente que nadie les negaba nada,y no sabías como actuaría si eso ocurriese...

Alzaste la palma de tu mano hacia él. Tenías un sin fin de dudas e incluso algo de miedo...pero por alguna razón también te sentías excitada.

Loki tomó tu mano y abrió una herida en la palma. La sangre apareció enseguida, bastante negra y algo líquida y él no tardó nada en llevarla a sus labios,sin dejar de mirarte.

Lo primero que sentiste fue el cosquilleo en tu vientre bajando hacia tus piernas, después, un deseo casi animal de tirarte encima de él y morderle hizo que abrieras la boca para mostrar tus colmillos, dejando escapar un gemido de placer.

La sensación de estar perdiendo vida fue la siguiente sensación...y supiste en ese momento que podías morir desagrada si no le ponías freno.

-Loki...

Trataste de quitar la mano pero él la agarró con más fuerza. Su cara era de auténtico placer, como si fuera miel y no sangre lo que estaba tragando.

Agobiada estiraste con fuerza. La herida que tenías se cerró enseguida y Loki se incorporó ligeramente avergonzado, consciente de que había perdido los estribos. Se limpió la sangre que había quedado en su boca, dando la sensación de ser un animal salvaje.

-Te pido disculpas...he perdido algo la cabeza...

-Ya...bueno, esperemos que no te mate o tendré a tu padre persiguiendome hasta tener mi pellejo en un cuadro.

Loki sonrío mostrando sus dientes, aún ligeramente manchados.

-Hace falta mucho más que un poco de sangre para matarme

"Eso no lo sabemos, ni tu ni yo..."

Pero preferiste callarte, aún con la duda de que esto fuera buena idea.

Un punzada de dolor abordó tu cabeza y te llevaste dos dedos a la sien. Loki se pegó a tu cuerpo y puso su mano en tu mejilla.

-Lo siento...no he pensado en las consecuencias hacia ti.

-Estoy bien...

Rozó tus labios con su pulgar, con expresión seria. Jamás habíais estado tan cerca y estabas segura, de ser humana,tu corazón habría latido a mil por hora.

-Alimentate de mi.

-No. Yo...

Pero de sólo pensar en morder su cuello y sentir su sangre por tu garganta hizo que las palabras murieran en tu boca.

Loki puso la mano libre en tu cintura, ladeo el cuello e hizo que tu rostro reposara en él.

-Vamos...¿quién va a saberlo?

Y sin pensarlo más veces, notando la palpitaciones de su vena, mordiste la fina piel que la protegía...llenando tus labios de sangre.

La sangre de un dios.