El Dios del Engaño

9.1K 705 259
                                    

Parte 5 de ¿?

Spoilers: No

Época: muy anterior a Marvel.

Ligero contenido erótico.

~~~~~~~

Pasaron dos días desde lo ocurrido en la biblioteca, y desde entonces no habías visto a Loki.

Te llegaron conversaciones distantes, donde decían que los Príncipes habían marchado a una misión, y se desconocía cuando volverían.

Mejor.

La idea de volver a ver esos ojos verdes y tener cerca su rostro te estremecía...y tenías una sensación extraña después de todo lo ocurrido.

Necesitabas pensar.

Necesitabas aclarar todas esas dudas que giraban alrededor de tu condición...

Y tener a Loki cerca te distraía...

Pero lo cierto era,que incluso en otro mundo, su recuerdo y su esencia te hacían desvariar.

El primer sueño fue inofensivo. El Príncipe más joven combatía con fiereza y astucia al lado de su hermano en un mundo desconocido.

Ambos sonreían en el ardor de la batalla,y Loki parecía más fuerte y hermoso que nunca...

Al despertar, te avergonzaste de ti misma al estar excitada.

El segundo sueño fue directo y fuerte. Tan explícito que parecía real.

Loki estaba en tu cuarto, serio e imponente y se echaba encima tuya para arrancarte la ropa y comerte a besos.

El sexo onírico era tan real, sentías las embestidas con tanta fuerza, que al despertar te sorprendiste sudada y extasiada...

Ese sueño y el anterior se repitieron diferentes veces mientras ellos estuvieron fuera.

Pero una noche fue diferente...la noche que él volvió.

En Asgard el sol no te dañaba. Esa ligera diferencia para ti era un mundo, ya que podías volver a vivir de día. No había mañana en la que no pasaras varias horas afuera, disfrutando de los jardines, leyendo en las terrazas...incluso paseando a solas. Eso te devolvió una vida normal...y un horario normal.

Por eso por las noches dormías....por eso aquella noche estabas en la cama al regreso de los luchadores.

Loki no esperó al dia siguiente para verte...ni tan siquiera cedió ante las súplicas de su madre para ir a ver si necesitaba curas...él sólo pensaba en ti.

Por eso cuando notaste una brisa acariciar tu rostro mientras dormías, y abriste los ojos para ver la ventana abierta...supiste que la sombra que se proyectaba por los rayos de la luna eran reales...y un no un sueño más.

Te incorporaste, mirando en silencio su silueta. Sus ojos verdes parecían dos esmeraldas y su semblante serio te hizo estremecer.

-Incluso en un príncipe está mal entrar en la habitación de una dama. Lo he leído en ese libro de protocolos.

Él siguió en silencio. Sabías que obserava cada uno de tus movimientos. Pese a que la poca luz que entraba por la ventana era tenue, era suficiente para iluminar tu piel blanca y bañar de luz la cama.

-He soñado contigo cada noche...te veía pasear por los jardines de Palacio y leer...- La voz de Loki era ronca.- También he soñado otras cosas.

- Yo también te he visto...en ese mundo dónde has luchado.

-Describelo. Dime como era el mundo de tus sueños. 

Y así fue como piedra a piedra describiste el campo de batalla donde los guerreros asgardianos habían luchado por días. Loki se acercó a ti, dejando atrás las sombras, y se sentó a tu lado en la cama,mirándote fijamente.

-No has estado jamás allí, pero has visto el mundo donde he estado. Creo que existe una relación.

-Con lo ocurrido hace días...al intercambiar nuestra sangre. ¿Es eso lo que crees?

El hombre de piel pálida asintió e impulsivamente posó su mano en tu mejilla.

-____, sé que lo del otro día te asustó. Pero aquello desencadenó consecuencias que debemos tener en cuenta.

Bajaste la mirada pero Loki alzó tu barbilla.

-No, mírame...te he...deseado cada noche que hemos estado separados. Cuando te veía disfrutar del sol...y cuando estábamos...

-No lo digas...Loki...soy una criatura de impulsos. He luchado contra mi propio ser desde que me convertí en...en esto...pero...cerca de ti, desde que bebí tu sangre...ya no es lo mismo.

Él sonrió, aparentemente complacido, y acercó más su rostro al tuyo, sin soltar tu barbilla. 

-Dime que deseas, mi señora. Dímelo sin apuros. Aquí sólo te escucho yo.

Y tras susurrar aquellas palabras comenzó a besarte la mandibula, pasando por el lóbulo de tu oreja  y tu cuello.

Notaste como tu cuerpo se humedecía y se estremecía ante el contato de aquellos labios, y sin darte cuenta tenías tus manos agarradas a su espalda. La lengua de Loki comenzó a bajar hacia tus hombros, besando y mordiendo ciertas zonas.

-No voy a poder controlarme Loki. No deseo morderte...

-Pero deseas otra cosa.

Os mirasteis...y sin poder aguantarlo más decidiste besar aquellos labios que tanto habías soñado aquellas noches, anhelando cada mañana esos besos que tu mente imaginaba.

Loki correspondió tu beso, forzando tu cuerpo a tumbarse para quedar él encima de ti. Sin separar vuestras bocas, el joven tocaba cada parte de tu cuerpo, rasgando el suave camisón blanco de seda.

No te diste cuenta ni cuando él se quitó la ropa. 

Sólo sentiste que entraba dentro de ti, abriendo tus piernas con su cuerpo. 

Notabas las embestidas igual que en tus sueños, y del mismo modo que tu cerebro lo había imaginado, tu cuerpo sentía el placer. 

Loki sonreía con su rostro muy cerca del tuyo, sin dejar de mirarte, dejandóse arrastrar por un torrente de emociones.

-Tienes los colmillos fuera...¿deseas morderme? Puedes hacerlo si lo deseas.

Le miraste casi con súplica. Claro que deseabas morderle. Casi necesitabas beber de ese elixir que desde hace dos tías te llevaba por el camino de la locura. Loki respondió levantando tu cuerpo, quedando sentada encima de él, obligandóte ahora a ser tu quién mandaras.

Y así lo hiciste de nuevo. Mientras notabas como Loki te poseía mordiste su cuello una vez más, notando como tu garganta se llenaba de sangre.

Los gemidos de tu amante nublaron tu mente, al igual que su sabor, pero esta vez no vinieron imágenes a tu cabeza...esta vez estabas viviendo un éxtais.

Cuando todo terminó,Loki te tumbó con suavidad en la cama y se acostó a tu lado.

-Esta vez ha sido diferente. - Dijo el joven dios mientras limpiaba la sangre de tu rostro.

Tú asentiste, viendo como de nuevo la herida de su cuello sanaba sola.

-Todo esto es muy raro...Loki.

El aludido sonrió, mientras acariciaba tu cabello.- No tanto como para no poder averiguar el porqué. Mañana saldremos de algunas dudas.

Le miraste confusa pero él únicamente te acunó en sus brazos, besando tu frente y velando tus sueños.

Mientras su cabeza no dejaba de trabajar. 

- Duérmete ____, mañana nos iremos de viaje.

-Dime al menos donde iremos- Le suplicaste. A lo que él te respondió con una mirada enigmática:

-Volvemos a Migdar.

Momentos: Loki y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora