-¿Pero es que aún estás así? Te voy a tener que poner hora como cuando tenías 15 años-.
Pasa mi madre gritando a mi cuarto mientras abre la persiana.
-Joder, que delicadeza ya de buena mañana- Digo mientras bostezo.
-¿ACASO TE PARECE BIEN VENIR A LAS 7 DE LA MAÑANA? Así pasa, que has perdido el autobús y nos toca llevarte a nosotros. Y encima siempre contestando, no sé que vamos a hacer contigo, hija mía- Pego un salto de la cama cuando me doy cuenta de la hora. Tendría que haberme despertado hace una hora y coger el bus.
-Ni me he enterado de la alarma, pero vamos, que esto no pasaría si me quedara aquí. No me quiero ir a ese put...-.
-TÚ TE VAS DONDE TE DIGAN, SEÑORITA. Y MIENTRAS VIVAS EN MI CASA ASÍ SERÁ- Dice mi madre interrumpiéndome.
-Creo que con 20 años soy capaz de quedarme aquí solita, y no necesito la atención ni el cuidado de nadie, y menos de gente que llevo sin ver desde que tenía dos años. Además, no me marees más, mama, que menudo dolor de cabeza y encima me tengo que chupar 8 horas de viaje. Menudo coñazo-.
-¿Ni para las bodas de plata nos vas a dejar tranquilos? ¿No entiendes que tus padres estamos muy estresados con el trabajo? Llevamos muchos años sin irnos de vacaciones-.
-Si, y por eso mis vacaciones me las tenéis que joder, ¿no?-.
-Adriana, la gente en el pueblo es encantadora, verás como cambias de opinión en cuanto llegues- Intenta convencerme mi madre.
-Si, deben de ser geniales las 4 vacas y las 5 cabras de Mari y Pedro. Venga mamá, no me fastidies. En fin, voy a terminar de arreglarme, ahora bajo a desayunar-.
Creo que lo mejor es pintarme un poquito, aunque no sé si habrá maquillaje en el mundo que tape este careto de resaca. Termino y bajo a desayunar.
-Se dice buenos días eh hija. Y no sé si eres consciente de las ocho horas que se tiene que meter tu padre conduciendo para ir al pueblo por tu santa culpa. Ya sabes que no me gusta nada conducir-.
-Pues yo conduciré, hijo mío, o mejor aún, me quedo aquí y todos felices y contentos-.
-Esta vez no te sale bien la jugada, cariño- Dice mi éste riéndose de mi.
-En 10 minutos salimos, así que va- Dice mi madre metiendo prisa.
Cuando bajo, para mi sorpresa está todo cargado menos mis 3 mochilas y mis 3 maletas, claro. Y encima... En mi focus C-Max. Como si ellos no tuvieran coche... Puf, que indignación!!!
-¿A qué guerra te vas, hija mía?- Comenta mi padre cuando ve todo el equipaje que llevo.
-Se pensará que se va Ibiza... Vas al pueblo, hija mía, allí la gente no es tan tonta como aquí. Se conforman con poco-.
-Lo que me faltaba ya. ¿En serio vais a ir así las 8 horas de viaje? Creo que habría sido mejor no salir anoche y madrugar para coger el bus- Decir aquello me hizo pensar en la noche anterior. Menuda vergüenza pasé con el camarero, pensará que soy estúpida, y borracha, el mismo me lo dijo. La verdad es que llevaba tiempo sin beber así, de hecho nunca he llegado tan borracha a mi casa.
Por cierto... ¡¡Creo que me he dejado el papel con su número en Madrid!!
-Mamá, ¿tú has metido en mi maleta los pantalones cortos que me puse anoche?-.
-¿Esos con los que se te ve medio culo? Pues no hija, los he metido a lavar. Además no sé donde vas al pueblo así, la gente no lleva esas pintas- Ni le voy a contentar. Me niego.
Me temo que eso quiere decir que voy a estar todo el verano sin hablar con... ¿Martín se llamaba?
Me duermo y al despertarme todavía quedan tres horas de viaje, ¡menudo dolor de cabeza! No bebo más en mi vida.
Lo mejor será que coja un rato el móvil. 280 whatsapp de mis amigas. En conclusión, me piden explicaciones sobre qué pasó anoche y Noelia gruñe enfadada porque no les avisé cuando llegué.
(10:25, 29/05/2017) WHATSAPP: LAS MÁS DIVAS
Yo: Llevaba un pedal cojonudo, chicas, lo siento, de verdad, debería de haberos avisado. Y tranquilas que nos liamos y poco más, tenéis a la amiga más tonta del mundo y desaproveche un polvazo con un pivón. Terminé vomitando y el chico me llevó a casa. Me pasó su número pero me lo he dejado en Madrid. Matadme. Ya vamos de camino, estamos llegando a Castilla-La mancha. :(((
Noelia: Estás perdonada, pero que no se repita, chatunga.
Mónica: Si en aquel pueblucho tienes wifi en condiciones, nos cuentas mejor por Skype.
Carmen: ¡¡¡¡Yo quiero todo tipo de detalles!!!!
Yo: Ok chicas, os aviso cuando llegue. ¡¡Os quiero!!
ESTÁS LEYENDO
Desenfreno en el pueblo. ©
Novela JuvenilBienvenido a mi historia; Soy Adriana, una chica de ciudad, donde os cuento un increíble y salvaje verano en el pueblo. Un pueblo lleno de secretos y pasión, donde cada personaje descubrirá su lado más perturbado. Estoy segura de que t...