Florece donde estés plantada

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5 Y la hija de Faraón descendió a lavarse al río, y paseándose sus doncellas por la ribera del río, vio ella la arquilla en el carrizal, y envió una criada suya a que la tomase. 6 Y cuando la abrió, vio al niño; y he aquí que el niño lloraba. Y teniendo compasión de él, dijo: De los niños de los hebreos es éste." (Éxodo 2:5-6)


Ora siempre :) No te imaginas la bendición que es orar por los demás y poner en las manos de Dios tus pensamientos, mirada, pasos y decisiones, en fin, la gran bendición que es tener a Dios como piloto. 

Durante este día tuve la bendición de leer varios ejemplos de mujeres en la Biblia, es un plan que estamos haciendo unas mujeres y yo por medio a Facebook. Observar la manera en como Dios le habla a otras mujeres es una experiencia maravillosa, si quieren formar parte del reto no duden en enviarme un mensaje :D. 

Hoy leí la historia del nacimiento de Moisés y lo que más podría decirse que llamó mi atención, a parte de la valentía de la hermana y la fe de la madre de Moisés, fue la actitud de la hija del Faraón frente a lo que le aconteció. 

Un niño hebreo estaba en frente suyo y ¡ella era egipcia! Lo que era de esperarse es que ella lo dejara saber a su padre, lo entregara a los verdugos y ustedes ya sabrán el fin... pero no pasó así. Ella floreció donde fue plantada. No se dejó llevar por los prejuicios de ser egipcia. Aunque los hebreos eran esclavos suyos, ella no sucumbió contra esta pobre manera de ver las cosas. 

Ella tuvo compasión del niño. Tuvo empatía porque el niño lloraba, su corazón fue tocado y en lugar de desecharlo lo adoptó y pasó a ser parte del gran plan de Dios. 

Es maravilloso apreciar como Dios puede obrar a través de nosotras si tan solo tomaramos la decisión de mostrar a Cristo a los demás sin importar aquello que se espera de nosotras. Quizás tengas una posición económica alta y se espera que deseches a los pobres, pero ¡se diferente! ¡muestra a Cristo! A lo mejor eres cristiana y tienes fobia a los incrédulos pero, ¡se diferente! y ¡muestra a Cristo! 

Haz todo en el Nombre del Señor y para Su Gloria, no para excusar tus deseos o anhelos sino, para traer gloria a Su Precioso Nombre, y claro, ¡ora! y alaba a Dios, dale gracias por como El a obrado y como El seguirá obrando; pídele formar parte de sus planes divinos en la vida de los demás. 

Dios te Bendiga querida manita, y nunca olvides, ¡ser diferente! y ¡mostrar a Cristo! 


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