El Legado del Cuarto Hokage {Itachi y tú}

Un corazón lleno de amigos

Cuando mi llanto por fin se detuvo mire a mi esposo con temor, él miraba hacia donde Obito se encontraba, su ceño fruncido <<¿Y si le pasa algo pro protegerme? No, no debí dejar que Itachi viniera... Tengo que esforzarme para no ser una carga y que nada malo le pase>>.

-Es el fin de los ninjas-miré a Obito-No los mataré si no se resisten. Si no quieren tener remordimientos no hagan nada

-Entonces, si no hacemos nada... ¿nos salvaremos?-murmuró algún cobarde

-Eso mismo. No habrá muerte, no tendran que soportar nada en silencio-respondió-Vivieremos en un sueño

Mire a nuestros compañeros, todos parecían meditar severamente sus palabras, el miedo entre ellos podía olerse y me temía que alguno de ellos realmente pensará en abandonar.

-¡No se den por vencidos!-interino el Primer Hokage-¡Si caen en su genjutsu será igual que morir!

-Ese árbol colosal está muy unido a Obito... Son como sus miembros intentando reunir chakra... será difícil poder acercarse-murmuró el Tercer Hokage

-Cuánta debilidad...-abrí los ojos <<Esa voz>>-No suena propio de ti, Sarutobi-sensei

-Orochimaru... ¡llegas tarde!-le reprochó-¿Qué pasó con los Kages?

-Ayudé a que se recuperaran-informó-Si no son unos débiles, también estarán acá muy pronto

-Tan cínico como siempre, ¿no?

-¿Te encuentras mejor?-miré a mi esposo y asenti-No me hagas arrepentirme de dejarte venir

-Cierra la boca, Itachi-bromee

De repente un extraño sentimiento me golpeó, reconocía ese jutsu del Clan Yamanaka, me quedé sorprendida al oír la voz de la Quinta Hokage.

-¡Abuelo!-exclamó sorprendida

-¡Oh! ¡Tsuna!

-Esa voz... ¡estoy seguro que es Hashirama-dono!

-¡Así que los cinco Kages están al alcance de mi Jutsu!-exclamó Ino

-¡Ya hablaremos después del pasado!-intervino el Primero-¡Pero hay algo que tengo que contarles a ustedes y a toda la Alianza! Escúchenme con mucha atención...

Me quedé helada al escuchar aquel relato que Madara le año a comentado al verdadero Hashirama. Toda la Alianza era prácticamente abono para esa planta, sentí algo de fastidio por lo mismo de mi odio a la jardinería.
Muchos comenzaron a sentirse aterrados y lloriquearon siendo regañados por el Primer Hokage, quien nos pidió que tuviéramos más valor, entonces comenzaron a quejarse porque ellos eran revividos y no podían morir. Cuando la cosa parecía perder el control, Sasuke cortó una de las ramas que planeaba matarnos, con la espada de Susano, le miré.

-Naruto, ¿ya se acabó?-pregunto el azabache-Yo me marcho. Vamos Juugo.

Mi hermano se rodeó de nuevo del chakra de Kurama, fue ahí cuando sentí su mente dentro de la mía, sus recuerdos y su voz. Me quedé helada.

-El corazón de Naruto...-murmure

《En ese momento debí haberlo llamado... Después pensé una y otra vez...》

Una imagen donde Naruto veía a un pequeño Sasuke marcharse. Era su infancia, sus memorias.

《Por eso... Por eso...》

Su graduación del colegio, su soledad, cuando Sasuke huyó de Konoha, el funeral del Abuelo Hokage, de Asuma-nii. Ero-sannin riendo y su tumba. Mi corazón se estrujo.