Capítulo Doce:

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~Viernes en la noche~

Miré detenidamente a mi hermana menor, Ellie corría de un lado al otro con prendas en ambas manos (Blusas, jeans, shorts de mesilla, etc).

Nos encontrábamos en la tienda preferida de Ellie. Según ella, le hacía falta "algo" de ropa, cosa que yo, en mi opinión, no creía necesario, ya que su enorme closet estaba repleto de ropa.

-¿Ya me puedo ir? -pregunté mirándola.
-¡No, Alli! -exclamó y se adentró al probador.

El chico que nos atendía me miró con una sonrisa.

-Así son las hermanas. -dijo riendo suavemente.
-Insoportables. -dije y ambos reímos.
-Lo sé, tengo cuatro hermanas. -me contó.
-Eso es... lo siento. -reí y él asintió.
-Son las hermanas Black ¿cierto? -preguntó y yo asentí.
-¿Te conocemos? -pregunté.
-No en realidad. -hizo una mueca. -Sólo que las veo en la televisión casi siempre. Dos de mis hermanas son fans de tu madre.

Sonreí.

-¿Fans? -reí.
-Si. Thea y Mel tienen todos los perfumes que sacó tu madre, y, ni hablar de la ropa. -me miró. -Un dia me hicieron esperar un día entero en el centro comercial por un bolso. -rio.
-Entiendo... -dije riendo.

Ellie salió del probador, usando un vestido rosa increíblemente ajustado. Sus pies iban adornados por unos bellísimos zapatos de tacones color negro.

-Guau... -susurró en muchacho que tenía al lado.

Miré al chico y luego miré a mi hermana.

-¿Porque necesitas un vestido tan... mmm... tan ¿ajustado?
-Chad me invitó a salir. -dijo mientras se miraba en el enorme espejo de la tienda. Abrí mis ojos y ella me miró con una sonrisa. -¿Te gusta como me veo?
-Si, te queda increíble. -le sonreí.
-¿Crees que a Chad le guste?
-A mi me gusta. -se metió el chico.

Ellie y yo lo mirábamos.

-¿Qué te gusta, amigo? -Sean colocó fuertemente su mano en el hombro del chico.

Los ojos mieles del muchacho se abrieron como platos y miró a mi hermano con algo de... ¿temor?

-Na... nada. -habló tartamudeando.
-Sean... -le advirtió mi hermana. -Ya déjalo en paz, pobrecito.
-Sólo intentaba entablar una conversación, Ellison.
-Pues así no se hace, imbécil. -murmuró.

Llevé mi mano a mi cara. Ella no había entendido lo que mi hermano le quiso decir.

-Es demasiado ingenua... ¿no crees? -dijo, cuando Ellie volvió al probador.
-Cállate, Sean. Por favor -susurré, harta. Él suspiró. -¿Puedes soltarlo?
-Ya. -dijo de mala gana y quitó su mano del hombro del chico.
-Gracias. -susurró el chico, mirándome y se fue hacia el mostrador.

Miré mal a mi hermano.

-Lo asustaste, idiota.
-No le hice nada. -se desplomó a mi lado en un sillon pequeño de cuero blanco.
-Casi le fracturas el hombro.

El puso sus ojos azules en blanco.

-¡Ya sal, Ellison! -exclamó algo fuerte. La poca gente que se encontraba en el lugar nos miró. -¡No estaré esperándote todo el jodido día! -esta vez... gritó.

Me hice un ovillo en el sillón... avergonzada y tratando de esconderme de la mirada de todos

-Cállate, estúpido. -dije entre dientes y mirándolo muy mal. -¿Nos ves que todo el mundo nos está mirando?
-¿¡Porque tarda tanto, Jesús! -volvió a hacer lo anterior. Me estiré y le regalé un golpe el la cabeza.
-¡Que te calles! -lo miré. -¡Si no te gusta pues ve el auto y espera ahí!

Viejo Amor (Austin Bass y Alison Black) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora