Una de las cosas que más le emocionaba de poder ir a clases era que, al salir de ella se encontraría con Gastón.
Con Gastón, su novio.
Novio.
Amaba como sonaba esa palabra ahora para ella.
Keyla salió de su clase junto a Alexa, ella estaba escuchando cómo la chica le contaba algo sobre la clase y sobre cómo opinaba distinto a lo que el profesor había dicho, sin embargo Alexa era como Keyla, prefería quedarse callada porque no quería que todos la miraran cuando fuese a decir algo en la clase.
—Tenías que haberle dicho al profesor, tu opinión tiene mucho más sentido—mencionó Keyla, era realmente una interpretación en relación a una canción de Julia Daniels, una cantante cuyo primer álbum había sido un fenómeno.
—No quería iniciar una discusión, además, él no está equivocado, sólo que está viendo un solo lado de la canción.
—Vale, me sorprende que yo te diga eso porque estoy más que segura que yo habría hecho lo mismo—respondió Keyla—, Gastón seguro le habría dicho algo.
—Gastón siempre lo he visto como muy antiparabólico en esas cosas.
—Sí, menos en clases—comentó—, Stuart ha dicho antes que cuando estaban en el Instituto, Gastón solía participar mucho en clases.
—No tiene pinta—se rio Alexa, Keyla estaba de acuerdo porque él no solía ser muy conversador—. Uh, hablando del Rey de Roma—señaló hacia dos chicos que estaban sentados cerca de los bebederos.
La sonrisa de la chica se notó fácilmente y caminó hacia ellos seguida de Alexa que intentaba ir a su mismo ritmo.
—¿Saliste con Clara ayer?—escuchó hablar a Gastón con mucha curiosidad, Stuart asintió.
—Sí, fuimos al cine—Stuart saludó a Keyla y ella le sonrió, se sentó al lado de su novio quién le dio un beso en la mejilla.
—¿Y qué tal?—preguntó Gastón, Keyla miró atenta.
Stuart se encogió de hombros. Era la primera vez que él salía con alguien, así que no tenía mucha experiencia en cómo reaccionar para esas cosas.
—Creo que soy malo socializando—respondió, Gastón se rio.
—¿Por qué lo dices? Yo creo que eres muy bueno socializando, mejor que yo al menos.
—Es cierto—dijo Alexa, Stuart le sonrió amable—. Caes bien fácilmente.
Stuart se rio, claro que era mejor que Gastón socializando, su amigo odiaba el contacto con otros. No sabía si eso lo hacía una persona reservada o un idiota, quizás ambas.
—Dije muchas tonterías, hablé sobre programación y videojuegos, no creo que quiera salir conmigo nuevamente.
—Entonces no era la chica para ti—respondió Alexa, Stuart la miró, la chica se puso nerviosa por un momento—. Di-digo, quién te quiera sabrá que las cosas que dices no son cosas aburridas, le gustará escucharte hablar de eso.
—Pienso igual que ella—habló Gastón—, no todos tendrán la suerte de hablar contigo—Stuart lo miró con una mueca.
—¿Quién eres y qué has hecho con Gastón?
Gastón se rio por eso. Sí se había notado a sí mismo teniendo un aura diferente ese día, pero no creyó que alguien se diera cuenta de ello. Quizás estaba muy feliz y todos podían verlo.
—Gracias Keyla, por hacerlo más humano—habló Stuart.
Keyla sonrió y le dio un abrazo al pelinegro que tenía al lado, Gastón cerró los ojos al sentir cómo ella lo rodeaba con sus brazos.
—Vale, sólo pasamos a saludarlos rapidito, debo regresar a clases, ¿te veo al salir?—le preguntó Keyla, él asintió.
—Sí, te veo en un ratito—respondió él y se acercó para darle un beso rápido en los labios.
—Chao, cuídense—saludó Alexa y Keyla la tomó del brazo para irse con ella a clases.
Stuart miró a las chicas y luego se volteó a ver a su mejor amigo con una sonrisa burlona en el rostro. Gastón lo detuvo antes de que hablara.
—Ni se te ocurra.
—No iba a decir nada.
—Esa sonrisa que tiene dice lo contrario—el chico se rio.
—Es que mira cómo te pones de cursi, un poco más y le das un anillo—dijo—, me sorprende lo mucho que Keyla te ha hecho menos ogro.
Sacó de su mochila dos emparedados y le entregó uno al pelinegro. Gastón lo tomó, era de mantequilla de maní, le gustaban mucho.
—Estoy pensando que podríamos ir al parque o algo, ¿qué crees?
—¿Tú y yo?
—Tu y yo—repitió en un balbuceo—, Keyla obvio—Stuart se rio, le divertía molestar a su amigo.
—¿Me estás preguntando a mí? Soy malo para estas cosas. Pregúntale a Sierra.
—Ya me ha ayudado mucho.
—Haz lo que se te haga más sencillo y real—le dijo—, no necesitas crear megas planes, sólo pasar el tiempo con ella.
—Es que a Keyla le gustan estas cosas, no quiero que se aburra de...—se detuvo—, es muy loco para pensarlo ahora, ¿no crees? Sí, es muy loco.
—¿Qué cosa?
—Sólo no quiero perderla por ser un aburrido.
—Te aseguro que ella no cree que eres un aburrido.
Stuart podía decirle eso, pero en él tenía la idea de que realmente podía suceder. Keyla era chispa, era color y brillo, era las serpentinas que aparecen cuando se festeja, era la purpurina lila que resaltaba ante los otros colores, en cambio él era negro, gris y blanco, era algo neutro y no quería que ella lo notase y se alejase. ¿Estaba siendo inseguro?
Tantas veces había luchado contra la idea de él mismo, se alejó de muchos hace un tiempo por lo mismo y no entendía cómo todos lo veían como algo importante. ¿Qué era importante? Porque él aún no lo era
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Disculpen la tardía, las últimas semanas había presentado muchos mareos (soy anémica) y realmente no podía estar mucho tiempo viendo una pantalla, al menos más de lo que ya lo hacía.
Los invito a pasarse por mi historia "Detrás de Escena"!! Tiene un par de capítulos y está protagonizada por unos de los chicos de Kloss, banda que ya he mencionado por aquí antes!
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Lo Que Quieren Los Chicos
Ficção Adolescente¿Qué quieren los chicos? El objetivo de Keyla desde que llegó a su nueva ciudad fue conquistar al lindo chico que atiende cada día en su cafetería favorita, pero no sabe cómo acercarse por lo que prefiere recaudar información sobre ellos para usarl...