Perdidos En El Pasado (Omega)

Instalandose

El olor del jabón era demasiado fuerte para su gusto pero no estaba para ponerse exigente, luego de bañarse por casi media hora para lograr deshacerse de su olor se puso la ropa que Elías le había prestado. Le quedaban un poco grandes pero no demasiado, el pantalón era de jeans azul y la playera tenía estampada un logo que no sabía reconocer.
Suspiró bajito al sentir el olor a comida y salió de la habitación dirigiéndose a la cocina, el moreno levantó la mirada y le sonrió amablemente.
-Mañana iremos al hospital ¿Si? Para que te revisen.- explicó mientras servía los fideos y las milanesas, Nico rodó los ojos pero asintió mientras se sentaba en la silla mirando bastante curioso hacia la comida. Olía bastante bien así que empezó a comer sin esperar a que el otro se lo indicara.
¡Al fin comida de verdad! No era como que si no le hubiera gustado las papas pero eran demasiado saladas y no ayudaban realmente con el hambre.
-Oye se que no me has contestado directamente las preguntas, pero ¿De que ciudad eres?-
Nicolás lo ignoró mientras seguía comiendo haciéndolo sonreír divertido, pero realmente el omega no sabía que contestar ¿Qué tal si el nombre de la ciudad cuatrocientos años antes era distinto? No tenía forma de saberlo así que prefería no responder nada.
Tal vez debió haber pensado en todas esas cosas mientras se bañaba, pero no creía que ese hubiera sido un lugar correcto para sus cavilaciones.
-¿Al menos de que país eres?- trató de presionar un poco el castaño al notar que el otro no le hacía caso. No creía que un chico sin nada pudiera pasar una frontera pero todo podía pasar, tal vez incluso podría haber venido con sus padres de vacaciones y luego haberse escapado.
-¿País?- murmuró extrañado para luego seguir metiendo comida a su boca.
Ah, era verdad, el mundo en el siglo XXI estaba dividido en algo llamado "países" en vez de ser todos una sola nación que se dividía en estados o provincias.
-¿Vas a quedarte a dormir aquí?- Elías pregunto algo preocupado y eso hizo que Nicolás se extrañara un poco más ¿Por qué era tan amable? ¿Cobraba por ser bueno o algo así? ¿Alguien hizo una apuesta con él de que no podría cuidar del chico tirado en el banco de la plaza?
Todas esas opciones tenían más sustento de la idea de que "lo estaba ayudando por si mismo y sin esperar nada a cambio".
-Si, no tengo otro lugar para quedarme.- suspiró mientras se limpiaba con una servilleta de tela luego de haber acabado todo lo del plato, sin saber muy bien que tono utilizar.
Estaba agradecido y muy extrañado al mismo tiempo.
-Deberías volver con tus padres.- volvió a hablar el más alto haciendo que frunciera el ceño.
Sus padres.
¿Estarían preocupados? ¿Se habrían dado cuenta que su hijo omega defectuoso había desaparecido? ¿O en cambio estarían tranquilos al notar que ya no era un problema?
No es como que si dudara del cariño que su madre y padre le daban pero entendía que a veces ese amor podía ser minado luego de haber sido marcado como omega defectuoso. Además de serlo sin ninguna razón aparente, eso incluso podía hacerlo peor.
No había lugar para omegas así en su mundo, no con la situación en la cual se encontraban.
-¿Dormiré en el sillón?- preguntó haciendo como que si ignorara la pregunta mientras se paraba llevando ambos platos hacia el lugar a donde había visto al beta lavarlos. Era bastante curioso ver que en el pasado lavaban los platos a mano, con una esponja y una cosa viscosa con olor fuerte.
-Dormirás en la cama de mi hermano, él no vendrá así que no hay problema.- Elías sonrió mientras lo seguía y agarraba los platos que el omega apenas había soltado para empezar a lavarlos, el omega lo miró algo extrañado pero lo dejó hacer.
-Entonces iré a dormir.- habló antes de escabullirse hasta la habitación, una vez adentro atranco la puerta con una silla y después caminó hacia la cama acostándose en ella. Aspiro profundo, no había rastro de olor de otra persona ¿Tal vez porque habían lavado recientemente todo?
Miró hacia las paredes azules y luego hacia el armario de madera oscura que estaba contra una de las paredes, también había un escritorio con un gran espejo y una silla con rueditas. Miró hacia las mantas que estaban bajo él y sonrió levemente al notar que eran celestes.
Había algo extraño en la habitación pero no podía decir que era a ciencia cierta, por alguna razón tenía el presentimiento de que ese lugar no había sido usado en años. Pero ¿Por qué Elías mentiría en algo como eso?
Al menos estaba limpio y tibio, podía dormir tranquilo sabiendo que despertaría si el chico trataba de abrir la puerta. Cerró los ojos aspirando el aroma de las mantas que tenían un ligero perfume que le hizo recordar al suave aroma que su madre usaba cuando se asustaba.
Si se concentraba lo suficiente tal vez podía pensar que estaba en su casa, en su cama y que su madre estaba sentada en la silla esperando a que se durmiera.
Poco a poco se quedó dormido.
-¿Ya estabas comprometido?- Jeremy preguntó con cuidado como temiendo tocar un tema sensible pero los gestos del menor siguieron impasibles.
-No, pero creo que todos esperaban, incluyéndome, que terminara por enlazarme con mi mejor amigo quien era un alfa.- habló luego de algunos segundos de silencio.
-Oh ¿Él se enteró del incidente?-
-Si.- no quería hablar de eso ¿Pero que otra cosa le quedaba?
-¿Cómo se lo tomo?- el omega mayor se inclinó ligeramente hacia él, con ojos que mostraban preocupación, Nicolás apartó la mirada.
-No dijo nada pero ya se consiguió una novia, no hemos hablado desde entonces. Nunca había tenido una novia o un novio, ambos quedamos con esperar hasta el final de la secundaria para hacernos pareja... pero no teníamos nada en el presente así que creo que él estaba en su derecho.- habló con tono indiferente como que si no le importara.
-Entonces se lo tomo mal ¿Cómo te sientes respecto a eso?- odiaba ese tono dulce, lo hacía sentirse molesto pero tranquilo al mismo tiempo.
-Decepcionado, era mi mejor amigo y se aparto.- miró hacia otro lado haciendo sus manos puños ¿Cómo alguien que no tenía ningún problema querría enlazarse con un omega defectuoso?
-¿Él era tu destinado?- la pregunta lo sorprendió y volvió a mirar al doctor sintiendo que su mascara de indiferencia se rompía, se removió incomodo antes de entrelazar sus manos entre ellas.
-No, no lo era-
Abrió los ojos a la mitad de la noche y miró al techo mientras escuchaba los autos que pasaban por la calle, se sentía intranquilo.
La ciudad del pasado era demasiado ruidosa y no lograba dormir lo suficientemente bien, se levantó de la cama pese al frío y se acercó con cuidado a la ventana entrecerrando los ojos por la luz que se filtraba por las cortinas. Al abrirlas no entró demasiada luz a la habitación pero si algo de frío a pesar de que las ventanas estaban cerradas, gruñó bajo y luego miró hacia la calle.
Estar en una ciudad desconocida, sin nadie conocido y sabiendo que ni siquiera estabas en tu propio tiempo era triste.
Suspiró mirando algunas personas caminaban tranquilamente por ellas mientras los autos seguían pasando por las calles. Se preguntó que estarían haciendo sus padres en ese momento o sus dos amigos que aún le quedaban en su tiempo.
Tratando de distraerse cambió el rumbo de sus pensamientos para poder, tal vez, sacar de su mente a su familia.
Se concentró en mirar a la gente que pasaba, en el pasado no se marcaban ¿Cómo hacían para decir que ya tenían una pareja para toda la vida? Se apoyó en el vidrio a pesar de que la piel se le puso de gallina por el frío.
Esperaba poder volver al futuro pronto, antes de que llegara su próximo celo al final del mes.
¿Había llegado aquí por accidente o... alguien lo había hecho a propósito?
Pero ¿Con que propósito? No se le ocurría realmente nada, tal vez estaba aquí como sujeto de prueba o solamente fue algo accidental.
Además... ¿Qué estúpido mandaba a un joven inexperto con alguna misión al pasado? Y para colmo, solo.
¡Era tonto incluso pensarlo!
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Después de unos capítulos mas voy a empezar a tratar de hacerlos mas largos.
Gracias por leer!
Y gracias por sus votos a
RitsuKuroko
Marian-P24
grishiwatari