Quintillizas

07- Lindo nombre.

KATIE:
Ya era jueves ¡POR DIOS! ¡ya era jueves! Mi cita con el chico cuyo nombre no recuerdo... ¡ah! Lo que pasa es que nunca me lo dijo, ridículo.

Estaba sentada en mi cama cuando de repente suena mi teléfono.

*número desconocido*: Linda a las 7:30 en la puerta de tu casa.

Me quedé mirando el celular confundida.. ¡por los santos conejos! ¡UN MALDITO VIOLADOR!

*Katita*: ¿quien eres?

*desconocido*: Cameron.. Perdóname por no presentarme como correspondía pero es que llegaba tarde a clases.

*katita*: ¿te llamas Cameron? Lindo nombre.

Lo agendé.

Cameron : nos vemos linda.

Me pregunto como ha conseguido mi numero pero creí que quizá se lo podría haber pedido a alguna de mis hermanas, aunque sería raro.

Mire el mensaje y tire el celular en mi cama, eran las 6:30 debía apurarme.

Me puse una falda Rosada con tiradores rosados y medias altas ¡adivinen! ¡También rosadas! No es cierto mis medias son blancas combinando con mi crop top también blanco.

Cuando se hicieron las 8:30 rezaba para que mi hermano no me vea salir, estaba por abrir la puerta cuando.

—¿Katita? ¿Donde vas?— Austin, maldita sea, por todos los conejos de este mundo.

—¿s..si?— respondí temerosa.

—¿donde se supone que vas?— antes que nada yo no se mentir, de pequeñas cuando íbamos a hacer una sorpresa o algo a mi nunca me incluían porque no se mentir ni disimular ni nada por el estilo.

—Mm.. ¿a comprar?— dije pareció más una pregunta por lo que me aclare la garganta y puse voz más gruesa—Si...a comprar pan— Asegure, mi hermano me miro confundido.

—No sabes mentir Katherine, son las 8:30 de la noche, no vas a comprar pan— Me dijo y cuando dice mi nombre completo si esta enojado.

—Esta bien, voy a salir— admití —con, con un chico— cerré los ojos esperando no ver el momento en el cual explote de ira y así fue cuando los volví a abrir tenía la cara roja y sus nudillos blancos.

—¿Quien es el imbécil?—me pregunto yo mire mis pies— KATHERINE ¿QUIEN ES EL MALDITO IMBECIL!?—pregunto aún más fuerte.

—Cameron..—susurre.

—¿Que?

—Cameron— volví a decir un poco más fuerte.

—Ese idiota— murmuró.

—Tu no lo conoces— dije susurrando pero él me escucho.

—Conozco a los hombres Katherine, y son todos iguales, no hay ninguno que al final no te haga llorar. No quiero eso para ti.

Salió a la puerta de mi casa y escuche un griterío por lo que salí y vi lo que más temía mi hermano y Cameron gritándose, discutiendo.

—¡YA BASTA!—grité sorprendiéndome a mi misma.

Los dos me miraron asombrados ya que precia una chica que jamás rompía un plato, y realmente lo era.

—Kat... tu no eres así— murmuro Austin.

—Austin ¡no tienes porque meterme en mi vida! Yo se que el no me haría daño, ¿no Cameron?— le pregunte el dudo un tiempo y luego asintió lentamente.

Mi hermano me miro bufo y volvió a entrar a la casa, yo le sonreí a Cam, que iba muy lindo vestido, por cierto.

—Te ves preciosa—me dijo —mas que normalmente— me guiño un ojo, ¿TODA ESTA BELLEZA ES NORMAL EN UN SER HUMANO? es tan perfecto, me siento protegida por él, quizá el sea mi media naranja, como dice Chloe, todos tenemos una.

La cita paso tranquila y Cameron me llevo de nuevo a casa.

—Bueno linda, la pase genial hay que volver a salir— me dijo.

—Si, yo también la pase genial— le dije y el comenzó a acercarse mirando mis labios y yo no me retuve de mirar los suyos, eran tan carnosos y apetecibles. Jamás he dado un beso, me emocione al pensar que sería el primero.

Cuando estaba a 2 centímetros su boca de la mía salió mi hermano por la puerta, miro a Cameron de arriba a abajo con superioridad y me agarró del brazo, me empujó dentro de la casa y yo saludé a Cam con mi mano, el me lanzó un beso, yo me sonroje como la niña inmadura que soy, no pude retenerme de dar saltitos por toda la casa.