Quintillizas

01- Dentro de una lata de sardinas.

Todo comenzó una noche de borrachera, Ellie swift y adam connor estaban casados oficialmente, aunque eso no les había impedido tener antes al pequeño Austin connor de tan sólo unos 2 años de edad.

Esa noche el niño se había quedado con su niñera ya que esa iba a ser la última noche de diversión de los recién casados ya que pensaban ponerse a trabajar más duro para mudarse finalmente a Miami, como era su sueño.. disfrutar de la playa junto a el pequeño Austin.

Lo que ellos no sabían era que esa misma noche Ellie quedaria embarazada.. y no solo de un bebe.. sino de cinco, cinco niñas.

Sin saber lo que ellie tenía dentro de su vientre se dirigieron a su casa de nuevo donde Austin estaba dormido sobre el sofá junto a su "nana" como el niño solía decirle a la señora de unos 55 años de edad.

A los pocos días ellie comenzó a vomitar, por lo que se vio obligada a ir al médico, quien le dio la gran noticia ¡estaba embarazada! De su "segundo/a" bebé.. claro que a los pocos meses en la ecografía no salió lo mismo que ella creía.

Lastimosamente todos los planes de la pequeña gran familia fueron arruinados por la llegada de las cinco niñas, ya no podrían mudarse a Miami, pues deberían pagar las necesidades de todos los hijos de la familia el cual era mucho.

Cuando nacieron las quintillizas, se acabó el sueño en ese hogar, ya nadie dormía, lloraban y lloraban sin parar.

Por otro lado estaba el pequeño Austin quien no podía creer que lo dejarán de lado por las cinco niñas que habían llegado, pero no se confundan, él estaba feliz con ellas, pero sólo necesitaba un poco más de la atención de sus padres.

Cuando las niñas cumplieron los 11 años y Austin 13 llegó alguien más, si, otra niña, la pequeña Emily, y otra vez, sin quererlo, el resto de hijos quedo de lado, ellie y adam notaban la tristeza de sus hijos al no tener atención de su parte por lo que les regalaron a todos y cada uno de sus hijos una mascota, para que los acompañe mientras ellos criaban a su séptima hija y última hija, ya que Ellis planeaba ligarse las trompas de Falopio para evitar tener más hijos a quienes probablemente ya no podrían mantener.

A Austin le regalaron una guitarra en vez de una mascota ya que a el no le gustaban los animales, pero a las cinco niñas si.

Cuando llegaron a la veterinaria para adoptar mascotas katie la más inocente de las niñas eligió un conejito blanco llamado "loui", Jade la niña más ruda de las cinco eligió a "peter" su serpiente negra como el carbón, la tercera de las niñas era hailey ella era la más inteligente, madura y respetuosa de las cinco ella eligió una perra a la cual le puso "mia",  Chloe la más enamoradiza y romántica eligió un gatito llamado "Toby", y por último la más payasa, chistosa y guazona de las cinco eligio un hamster marron con manchas blancas al cual llamó "comodín" según ella porque en el auto iba muy cómodo en sus piernas.

Estas hermanas a pesar de sus diferencias se apoyaban hasta en lo más mínimo obviamente también lo hacían con Austin y Emily, eran muy unidos pero a veces... A veces esa casa era un campo de guerra.

Llegó el cumpleaños número 15 de las quintillizas y celebraron con una fiesta bastante precaria porque estaban ahorrando para un año después poder viajar a cumplir sus sueños en Miami.

¡Por fin llegó el gran día! Mañana se iban todos de esa casucha que tenían en España para ir a su lugar soñado.

—PUEDEN APURARSE MALDITA SEA NIÑAS ¡VAMOS A PERDER EL VUELO!—gritaba ellie desde la puerta principal de la casa donde dormían las quintillizas en un sólo cuarto, hasta llegaron a creer que estaban dentro de una lata de sardinas, si, definitivamente ellas parecían sardinas enlatadas en esa habitación.

—¡YA VA MAMA DEJA DE GRITAR!  ¡PARECES UNA MALDITA DESQUICIADA!—esa fue Jade, siempre con su buena onda tan característica.

—¡JADE CONNOR! NO LE GRITES ASI A TU MADRE!—la regaño su padre, Adam.

—Lo siento— susurro esta rodando los ojos. Mientras tanto en el cuarto, Laia se reía por lo que acababa de suceder.

—¡Laia!—la llamó su hermana Hailey —¿Podrías ser un poco madura, no?—la regaño como si fuera su madre.

—¿¡Quien te crees tú para venirme a decirme como actuar!?— pregunto exasperada.

—Soy, técnicamente, tu hermana mayor, nací primera de todas— puso cara de superioridad y orgullo, todas rodaron los ojos, incluso Katie quien estaba abrazada a "loui" ya que no quería que viaje sólo en el avión, pero así debía ser.

—¡NIÑAS!— gritó su madre de nuevo a lo que todas salieron con sus maletas ya listas— Bien niños... ¡vamos a el lugar de nuestros sueños!—dijo su madre con cara de felicidad extrema, al fin lo habían logrado, miro a su esposo con ternura y beso rápidamente sus labios evitando la mueca de asco de sus seis hijas presentes en ese momento.

—Suban al auto— les ordenó su padre.

—¡AUSTIN!— volvió a gritar Ellie —baja ahora mismo— Justo en ese momento apareció Austin con su maleta verde oscuro con manchas militares.

—Mama—llamó la pequeña Emily—¿podemos irnos ya?— A pesar de tener 5 años se le entendía bastante bien cuando hablaba.

—Si mi niña ya nos vamos sólo espera que ¡KATIE! SUELTA ESE BENDITO ANIMAL SI NO QUIERES QUE LO REBANE EN MILLONES DE PEDAZOS!— gritó histérica a lo que katie la miro asustada y apretó tanto a "loui" que casi se le salen los ojos, volvió a mirar a Emily quien estaba con una cara digna de película de terror— Lo siento bebé, no quería asustarte— dijo en el intento de consolar a su hija menor.

—Si mami— dijo al instante mientras Katie se despedía llorando como si fuera la última vez que vería a su conejo, le dio el animal a su padre que lo puso en una jaula acto seguido se subió al auto y la familia por fin se dirigía a el aereopuerto internacional de su país.

Ya estaban a punto de abordar, Katie seguía llorando mares mientras Hailey intentaba consolarla, Jade estaba mirando a la nada, tenía la mirada perdida, esta chica si daba miedo, Chloe ya se había enamorado de un chico rubio que pasaba por ahí, Laia estaba hablando con Austin de no se que tema y Emily ya estaba dormida en brazos de su madre. La familia estaba en "orden".

Por fin abordaron el avión y éste despegó con esa familia en la que están todos locos pero amor sobra.