–Que día. –murmuro dando unos pasos dentro de mi departamento, o debería decir nuestro. Noah y yo lo compartimos desde hace un mes y... eso quiere decir que vivimos juntos como una pareja real.
–¡Alma y Christopher están juntos! –exclama Noah teniendo una radiante sonrisa en su rostro –No tienes idea de cuánto esperé por esto. –murmura arrojándose en la cama.
–¿Tú lo sabias desde siempre? –pregunto mientras me quito los zapatos.
–Claro. –asiente sonriendo. Eso me hace bajar la mirada, se siente terrible no saber nada de quienes llamabas tus mejores amigos. Ni siquiera sé de Noah.
–Hey. –llamo su atención dándole un golpecito en su pecho –¿Cómo son tus padres? –le pregunto curioso –Digo, somos pareja y yo no sé nada de ellos.
–Quisiera no hablar de mis padres. –su actitud cambia drásticamente y luego sube sobre mí –Ven aquí, escuchar a Alma me encendió. –comenta tomando mis muñecas con sus manos y comienza a besar mi cuello como si de eso dependiera su vida.
Yo golpeo su cabeza con la mía para detenerlo y me libero de su agarre –Vamos, quiero saber. No te conozco y eso me hace sentir mucha culpa, ni siquiera eramos mejores amigos como yo pensaba. –digo flexionando mis piernas contra mi pecho.
Noah suelta un suspiro pesado para después desordenar mi cabello –Si quieres podemos ir a visitarlos mañana. –propone.
Entonces le sonrío por eso –Bien...
–Hey, yo tampoco sé de tus padres. –niega moviendo la cabeza de un lado al otro. Entonces me acuesto sobre su regazo y sus manos palmean mi espalda diciendo que soy pesado.
–Yo también quisiera conocerlos, soy huérfano. –hablo frotando mi barbilla –Pero me adoptaron cuando tenía 5 años, una pareja que no podría tener cachorros. –agrego al ver su cara, de pronto comienzo a sentir la angustia de Noah.
–¿Cómo puedes... hablar de eso con tanta normalidad? –pregunta frunciendo el ceño, yo me arrodillo a su lado y pico su mejilla. ¿Por qué se habrá puesto así?
–Tengo una foto de mis padres adoptivos. –hablo bajando de la cama y busco ese libro en mis cajones, entre mi ropa lo encuentro. El mismo contiene historias para hacer dormir –Aquí, estos son ellos. –digo cuando regreso con Noah en la cama y le enseño la foto.
En la imagen están mis padres adoptivos, un hombre alto de cabello negro y de ojos claros, beta al igual que su esposa. Ella es muy hermosa, cabello castaño y ojos negros. Ambos se encuentran abrazando a mi hermano cuando era pequeño y luego estoy yo ocultándome detrás de papá porque el flash de la cámara me daba miedo. Sólo tenía 7 años entonces.
Noah hace una mueca y me mira ladeando la cabeza –¿Y ese niño? –indica a mi hermano.
–Un año después de adoptarme mamá quedó en estado. Fue un milagro. –digo sonriendo –Eric nació y se convirtió en mi hermano menor.
–¿Eric? Nunca habías mencionado nada de él antes. –murmura Noah teniendo su vista fija en la fotografía –Tú... eras muy adorable y lindo de niño. –comenta pallizcando una de mis mejillas.
–Basta. –me quejo golpeando su mano.
–Ahora estás horrible. –agrega riendo y yo golpeo su cabeza con el libro de cuentos.
12:00, al día siguiente y en el hogar de Noah:
–¡Mamá! –dice alzando la voz, en momento la misma mujer que me había atendido la última vez se acerca a la entrada y abraza a Noah.–Regresaste bebé. –contesta y veo el rostro de mi pareja muy rojo. Yo reprimo una risa y la omega camina hacia mí para darme un abrazo también –Bienvenido de nuevo Izan. –murmura para después deshace el abrazo.
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Un Lazo Diferente (Omegaverse)
WerewolfEl lazo arruina la amistad de dos mejores amigos.