Al día siguiente Eri se levantó como cada mañana, sólo que no se sentía igual que las anteriores. Los recuerdos del día anterior la distraían de sus quehaceres de manera que se equivocó varias veces al hacerse el desayuno e incluso al prepararse para ir al instituto. Todavía recordaba el ataque tanto a ella como a sus compañeros, el descubrimiento de Hioni-sensei era el legendario “Darkblade” así como el estado en el que quedó antes de desaparecer junto con Asari-sensei. Además de todo ellos estaba el hecho de que todavía no se sabía nada de quien era el que estaba detrás de lo ocurrido ayer.
-¡Eriiii! –Luka apareció de repente abrazando a la chica por la espalda mientras ésta caminaba por la calle.
-¡Ah! ¡Luka! –se sorprendió Eri.
-¿Sabes? He tenido un sueño rarísimo.
La joven demonio escuchó atentamente.
-Estaba por la calle y de repente salió un ser muy grande que me atacaba y de repente aparecías tú junto a Hioni-sensei y comenzabais a golpearlo hasta que terminaba hecho polvo. Por algún motivo después de esto tú y yo nos íbamos de viaje a Europa.
-Ah...y-ya veo –por lo que escuchaba, no habría problema en que pudiese recordar lo que vio-. Suena un poco raro.
-Bueno, prefiero soñar eso a uno en el que tenga algún examen –la chica tembló sólo de mentarlo.
-Jajaja...
El poder de Derain había hecho su efecto. Eri suspiró relajada.
Cuando llegaron a clase observaron que el profesor todavía no había llegado. En ese momento tocaba la materia que impartía Reima por lo que se preguntaba cómo se las apañarían para sustituirlo.
Se sentó en su sitio y sacó los apuntes correspondientes a la asignatura.
-¿Estás bien, Eri? –preguntó Luka.
-¿Eh? Sí. Es sólo que tengo un poco de sueño.
-Ah, te comprendo, a mí eso me pasa mucho.
“Constantemente, diría yo”, pensó la chica. De repente sintió una mano sobre su hombro. Al girarse hacia el lateral se topó con Shiina.
-Buenos días.
-Buenos días.
-¡Eh! ¡Shiina! ¡Tengo que contarte lo de mi sueño!
-La verdad es que no me apetece mucho oírlo...
-¡Oh, vamos! ¡Préstame atención un momento! ¡No seas aburrida!
-¡¿A quien crees que le estás llamando aburrida, maldita maleducada?!
-Pues a ti, ¿no es obvio? –contestó Luka haciendo un gesto con el que se burlaba descaradamente de su amiga.
-¡Ahora verás!
Abalanzándose sobre ella la cogió del cuello y comenzó a asfixiarla con uno de los brazos mientras taladraba su sien con los nudillos de la otra extremidad.
-¡Para! ¡Para! ¡Me haces daño! ¡Ay, ay, ayyyy!
Nada había cambiado. La clase actuaba como si nada hubiese pasado. De alguna forma se sentía un poco distante de los demás, como si hubiese estado fuera durante mucho tiempo. Fue en ese momento cuando se fijó en Akira. Su compañero se encontraba hablando alegremente con Kaoru. Al fijarse en que la joven lo observaba hizo un pequeño gesto a modo de saludo, siendo devuelta por ésta.
Poco después el profesor de la asignatura hizo su aparición en clase. Eri se sorprendió al observar a Reima ocupar la mesa que le correspondía, sentándose como si nada y causando que la clase se quedara en silencio, sentándose en su sitio los rezagados que todavía no había ocupado sus sitios.
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Defenderé a los demonios
ParanormaleUna noche, Kasaiga Eri es salvada de ser asesinada debido a que desciende de la raza de los demonios. El nombre de su salvador es Hioni Reima, alguien encargado de defender a los de su especie.