19. Te Extraño

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Skyler.

Llegamos a la mansión de Elian, el camino estuvo bien, no pasó nada malo, llegamos a la mansión y ya estaban varió hombres de Elian ahí esperando por el.

- ¿Que ha dicho?- fue lo primero que Elian les preguntó.

- Se niega a hablar, señor- respondió Jason.

- ¿Lo golpearon?- todos negaron con la cabeza- perfecto me toca a mí hacerlo, haré hablar a esa perra.

- Quiero ver eso- Elian me miró y luego a sus hombres- ¿que?

- No amor, tu te quedarás aquí, no quiero que veas lo que le haré a ese animal, con suerte volveré pronto.

Besó mi cabeza y se fue con sus hombres dejándome sola. Si cree que me quedaré aquí está muy equivocado, lo seguía sin que se dieran cuenta, aunque los perdí cuando llegue al ático, estaba muy oscuro, las luces apenas alumbraban en largo pasillo. Esto parece de película de terror, caminaba lentamente para no tropezarme y entonces se escuchó un ruido muy fuerte que casi ocasiona que me de un infarto.

- ¡Mierda!- camine más rápido hacia dónde se escuchó ese ruido, llegue a un lugar con más iluminación al menos en ciertas partes, estaban varios hombres de Elian incluyendo a Jason y Jack, luego noté a tres hombres colgados por los brazos, dos parecían no estar conscientes.

- ¡Habla maldita perra!- Elian lo golpeó en el rostro- ¡¿que hacías en mi territorio?!

- No te diré nada- apenas se le entendía.

- Despierten a los otros dos- Jack y Jason les dispararon con una pistola eléctrica lo cual pareció despertarlos en completa agonía por sus gritos.

- Alguno de ustedes tres hablara les guste o no y no me importa que deba hacer para que lo hagan, solo uno saldrá para darle un mensaje a Devil, los otros no lo harán.

- ¡Querían saber quién es su mujer!- gritó uno.

- ¿Para que quieren saberlo?- inquirió.

- No lo sé- Elian le lanzó una navaja la cual se le encajo en ojo, Dios que asco.

- Fallé- sonrió y tomó otra para darle en la garganta- sigan hablando si quieren mantenerse con vida, no soy paciente.

- En serio no lo sabemos, solo nos ordenaron que fuéramos a ver- Elian se acercó a una mesa y se puso unos guantes, luego algo para cubrir su boca tomó una ¿jeringa? Y se acercó al hombre para inyectársela en el brazo- ¿que es eso?

- Este líquido que acabo de inyectarte hará que lentamente empieces a disolverte, te arderán las venas, sentirás mucho calor, la sangre buscará la manera de salir, como tu boca, tus ojos tus oídos, sufrirás cada segundo hasta que tu corazón no resista y luego morirás, no te preocupes son solo unas horas de agonía- se quitó su cubre bocas- llévenselo no quiero que empiece a apestar a muerto cuando comience a orinar sangre, también llévense al otro.

- Muy bien señor- parecía que comenzó el efecto porque comenzó a gritar con fuerza, lo soltaron sin ningún cuidado y le cubrieron la boca, estaban muy bien tapados los hombres que se lo llevaron.

- Es momento que empieces hablar eso no es nada con lo que puedo hacer contigo, tu no morías como ellos, tú sufrirás hasta que yo tenga suficiente, te haré gritar como la perra qué eres.

- No puedes hacer que ni una mujer grite de placer- se burló.

- Eso me dolió. Me gustan los métodos de tortura modernos pero soy un fanático de los antiguos, muchos son ilegales pero todos sabemos que eso no importa, tengo tantas ideas, el empalamiento es una gran idea, ya sabes cómo Vlad Tepes.

 Víctima del Pasado #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora