El plazo de un año que tenía Ángel para volverse más poderoso y enfrentar nuevamente al enigmático Dark se había cumplido. Toda la ciudad temía, pues nuestro héroe no había regresado aún. Mientras esto sucedía, el enemigo se había decidido a comenzar de una vez.
—Ya le diste una... —comenzó a cantar una maquiavélica voz—.Ya le diste dos... Ya le diste tres y tu tiempo se acabó. Es eso lo que dicen en tu lugar de origen, Angel the Cat.
—¿Va a ir justo ahora, señor?
—Claro, un año le dí, y un año tendrá, ni más ni menos. ¿No quieres acompañarme?
—Sería un honor verlo en batalla.
—Entonces no se diga más. Andando.
Con el Báculo de la Cobra en mano, y acompañado por su misterioso sirviente, Dark emprendió el vuelo desde su guarida, en dirección a la ciudad.
Mientras tanto, en la base de operaciones.
—Maestra, ¿ya ha logrado contactar con el joven Shen y Ángel?
—Negativo, Windrake, no contestan. ¿Qué haremos ahora? Probablemente ese monstruo de Dark ya viene en camino.
—Sólo podemos esperar que Ángel llegue a tiempo, y que su entrenamiento haya dado resultado. Si no es así, que todos los dioses nos amparen.
—A propósito Windrake, ¿Por qué le tienes tanto miedo a Dark, si eres muy poderoso?
—Créame, he visto su poder y de lo que puede ser capaz. Lo único que se me ocurre para explicar ese tremendo poder es que se trate de un híbrido entre dios y humano...
—¿Híbrido?
—Así es, Maestra. Durante algún tiempo, los dioses y los humanos compartían el planeta, y en ciertas ocasiones llegaron a cruzarse, así surgieron los híbridos. La mayoría murieron durante la guerra contra el Mal Encarnado, pero tal vez uno sobrevivió.
—Debe ser muy triste saber que no hay nadie más como tú en el mundo.
—Las Bestias Guardianas sabemos lo que se siente...
—¿Qué?
—Olvídelo, Maestra. No tiene importancia.
De repente, la charla fue interrumpida por el sonido de las alarmas de la base de operaciones, acompañado de las intermitentes luces que anunciaban alerta roja. Inmediatamente, el padre de Ada se comunicó con ella.
—Hija, ¡necesitamos tu ayuda!
—¡Padre!, ¡¿qué sucede?!
—¡Reportes de la Ciudad nos indican que Dark acaba de arribar! ¡Windrake y tú deben ir inmediatamente!
—Pero... ¡Ángel aún no regresa!, ¡y Shen está con él!
—¡No se preocupen, yo personalmente iré por ellos dos! ¡Apresurense! ¡Si no van, la Ciudad será destruida!
—¡Está bien! ¡Lo entretendremos el tiempo que podamos!
—¡Cuento con ustedes! ¡Cambio y fuera!
Ada miró a Windrake como se mira a un valioso aliado.
—¿Listo, camarada?
—Hasta el final, Maestra.
Así, nuestros dos héroes se dirigieron a la Ciudad, gracias a la velocidad de Windrake, apenas tardaron unos cuantos minutos en llegar. Una vez ahí, ocultos detrás de un edificio, observaron que Dark se encontraba de pie, con los ojos cerrados y empuñando su Báculo. A lado suyo, se encontraba sentado un ser similar a la combinación de una pantera negra con un esmilodonte; además de tener el pelaje de sus patas de color azul neón; así como franjas en su cola de este mismo color; pero sin duda, sus rasgos más significativos eran sus garras metálicas, y el casco que llevaba sobre su cabeza.

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Angel the Cat: Dioses y Monstruos
FantasyDurante miles de años, la Tierra fue gobernada por los dioses, seres poderosos que dieron vida a todas las criaturas imaginables. Esto cambió cuando el ataque de un invencible monstruo obligó a los dioses a sacrificarse para poder sellarlo en el núc...