La luz en mi noche

Capítulo 8- Estúpida

El resto de la semana transcurrió para Elaine como un suspiro. Al fin se estaba integrando entre todos, tal y como ella había deseado siempre.

A pesar de su timidez cada día conocía a alguien nuevo. Etienne le fue presentando a todos sus amigos  y parecían buenos chicos. Todos la acogieron muy bien en el grupo. Marie, muy interesada con su encuentro con Etienne le había pedido que le contase todo detalladamente. Al parecer por fin tenían un tema de qué hablar y aunque los chicos de momento no le interesaban estaba feliz de ir acercándose cada vez mas a su compañera.

Aunque aún seguía teniendo pesadillas, ya no pensaba tanto en los suyos y eso le daba mas fuerzas para enfocarse en su nueva vida.

Por fin todo lo que ella quiso se estaba haciendo realidad. Era como estar en un sueño... sin embargo, siempre acabas despertándote.

Era viernes cuando el timbre que anunciaba el fin de las clases resonó en todo el instituto.

Elaine dio un brinco de su silla y recogió sus libros a toda velocidad. Le encantaba el fin de semana. Cuando estaba encerrada en su casa , los días le parecían todos iguales, pero desde que estaba en París apreciaba cada día como si fuese lo mas maravilloso del mundo. Entre semana podía disfrutar de las clases y sus compañeros, y los fines de semana los ocupaba en recorrer la hermosa ciudad.

Aun recordaba como el primer día fue a ver los hermosos jardines. Era algo espectacular y lleno de vida.

Aquel fin de semana sería su ansiada salida de chicas y estaba impaciente por ir.

Salió del edificio sumida en sus pensamientos, cuando comenzó a atravesar la zona de los aparcamientos para salir del recinto cuando ocurrió.

Todo sucedió tan rápido que no pudo reaccionar.

Escuchó como alguien le gritaba que se apartase. Miró a su flanco izquierdo para ver como una motocicleta iba a arrollarla por completo. Intentó apartarse, pero reaccionó muy tarde. 

El conductor del vehículo intentó desviarse pero ya no había tiempo.

Instintivamente, tal y como le habían enseñado a reaccionar desde temprana edad, acumuló una barrera de energía como escudo, salvando su vida. La moto se estrelló contra la barrera invisible y el conductor y vehículo salieron despedidos, aterrizando con violencia en el asfalto.

Por un momento pareció que el tiempo se había parado. Todos los allí presentes contuvieron el aliento durante un segundo y después cundió el caos. Empezaron a gritar, señalando al herido, mientras corrían a socorrerle.

Elaine, que parecía haber perdido el aire de los pulmones se miró de arriba a bajo, comprobando que estaba entera. Pronto algunos se acercaron a ella para comprobar que estuviese bien, incluida Marie. La gente no paraba de hablarle pero ella no escuchaba nada. Todo era una total confusión. Algunos cogían el móvil para llamar a una ambulancia mientas los profesores apartaban a los alumnos del herido para dejarle espacio al respirar.

Sin embargo, Elaine no prestaba atención a nada de aquello ¿Qué había hecho? Había tirado todo por la borda, había sido así de estúpida. Porque al usar su prana les había dado la localización la localización exacta de dónde se encontraba a su familia.

Algo llamó su atención entre la multitud, o mas bien alguien.

Una sensación de inquietud y pánico la recorrió todo su cuerpo. Miró a todos lados hasta que localizó quién o que era lo que la perturbaba.

En la calle, parado y mirándola con seriedad estaba Etienne. Sus miradas se cruzaron y una sensación de grave peligro le avisó de que algo iba muy mal.