Capítulo 26- La fiesta (parte 2)

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En un viaje normal se tardaban unas dos horas en llegar hasta Praga, pero por suerte o por desgracia era Dante el que conducía, por lo que llegaron en una hora y media a su destino. Todos parecían estar bastante animados. Elaine pensó por un momento si alguien se tomaba esto como una misión oficial, ya que todos parecían excitados por salir de fiesta. Dudaba que tanto entusiasmo fuera por investigar el paradero de aquel demonio.

El centro de Praga era precioso, los edificios clásicos se erguían luciendo la gloria de días pasados que afortunadamente y gracias al mantenimiento de las fachadas se mantenían bonitos. Las calles empedradas brillaban por la iluminación de las farolas y los negocios que quedaban abiertos a aquellas horas, sin embargo al ser fin de semana, había bastantes jóvenes que animados entraban a las discotecas y pubs a pasar un buen rato.

Aparcar cerca fue un golpe de suerte, ya que todas las calles estaban llenas de coches. Pero justo había un hueco a solo cinco minutos del club. Una vez allí comprobaron que la cola era inmensa, pero Dante los guio hasta la entrada secundado por Diego, que parecía como un pez en el agua. El gorila de la entrada al principio se cruzó de brazos dispuesto a echarles, pero el cazador se acercó y le dijo algo al oído. A Elaine no se le pasó por alto como le daba discretamente un buen fajo de billetes como propina. El de seguridad de mucho mejor humor desenganchó la correa y les hizo una señal para que pasaran.

Al entrar Elaine se preguntó seriamente cómo a alguien le podía gustar estar allí. Pensó que todos los que hacían cola estaban mal de la cabeza. La música estaba muy alta, demasiado alta para su gusto haciendo que toda la cabeza le retumbase. Se tapó los oídos con molestia. Era cierto que tener un oído sensible para escuchar mejor podía ser una ventaja, pero definitivamente no aquel sitio.

- ¿Estás bien?- le preguntó gritando Etienne.

- ¿Qué?- gritó igualmente Elaine destapándose uno de los oídos.

El chico volvió a formular la pregunta de nuevo, a lo que ella le respondió que estaba perfectamente. No quería quejarse, ya que era la primera vez que se sentía útil en algo.

Avanzaron un poco mas y una chica muy amable se quedó los abrigos en una consigna y les selló en el dorso de la mano para que después pudiesen recogerlos a la salida. Avanzaron hasta el interior. Una vez dentro los oídos de Elaine parecieron acostumbrarse un poco mas a la música, por lo que pudo apreciar todo mejor. Ante ellos se abría una enorme pista de baile donde cientos de jóvenes bailaban al ritmo de la música entusiasmados. 

Elaine observó todo maravillada. La estancia estaba iluminada por miles de luces de colores que se movían de un lado a otro, lanzando pequeños destellos que se reflejaban en la piel sudorosa de los jóvenes. Al fondo había una barra en la que varios barman servían con destreza bebidas a todo el que pidiera. De vez en cuando tiraban confeti desde el segundo piso en el que se abría una balconada. La que la gente mas adinerada tenía su zona VIP desde la que veía todo y podía bailar mas cómodamente. Había un DJ en una de las esquinas, que no paraba de animar a la multitud al ritmo de la canción. Elaine también observó como había parejas morreándose en las mesas reservadas y por las esquinas. Prácticamente era lo único que se podía hacer, aparte de bailar o beber ya que con la música tan alta a penas se podía hablar, y si lo hacías durante mucho tiempo se quedarían afónicos.

Alguien la rodeó por la cintura. Dio un respingo asustada, pero se relajó en cuanto vio que se trataba de Etienne. Aunque para ser mas exactos se relajó a medias, ya que notaba demasiado calor allí donde la tocaba. Se acercó a su oído.

- Vamos a dividirnos para abarcar mas terreno.- anunció demasiado cerca.

Había estado tan ensimismada observando todo que no había notado que el resto ya no estaba. Asintió para indicar que lo había entendido. Tras desearle suerte él también desapareció entre la multitud en dirección a la zona VIP.

La luz en mi nocheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora