- 5 - Empieza el Festival Cultural (1/2) -

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Debido a mis heridas me fue imposible regresar a clase aquel mismo día, es más, tuve que esperar otros seis para que me dieran el alta

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Debido a mis heridas me fue imposible regresar a clase aquel mismo día, es más, tuve que esperar otros seis para que me dieran el alta. Claro esta, con la condición de regresar si notaba que la herida me volvía a doler. Al parecer esta herida había sido causado por algún objeto que impactó en mi vientre durante la explosión. Lo único bueno es que no me quedaría cicatriz así que no debía preocuparme.

Actualmente me encontraba en mi nueva habitación. Era sorprendente el cambio que había entre estrellas. ¡Mi habitación era inmensa! Además, pasé de un plato que te daba suficiente para llenar tu barriga a una cantidad que no logro terminar. Y ni hablemos del dinero... Pasé de 3.000 yens a 10.000 yens. Definitivamente había descubierto un nuevo mundo. Pero a la vez, tener ese grado de estrellas solo significaba lo inevitable, mi uso de las feromonas femeninas. El uso del Alice que durante años había prohibido su salida al exterior. Lo había usado para proteger a Hyuga, no para obtener todos aquellos privilegios. Además, el haberlo empleado en aquella ocasión no significaba que lo usaría para la primera chorrada que propusieran.

Aquel día no necesité dirigirme a clase, ya que era el inicio del festival cultural, por lo que estas se habían cancelado, motivo por el que opté ir a otro lugar. Como ya me era costumbre me dirigí hacía el bosque del norte. Sabía que podía encontrarme con Bear, pero, aun así, era mejor que enfrentarme a Sumire. Conociéndola, si me encontraba, me obligaría a ir al edificio de bachillerato para ayudar con el salón del té. ¡Ni loca me iba a poner aquella ropa! 

Me tumbé apoyada en un árbol mientras dejaba que la suave brisa balanceara mis largos cabellos. Había tanta tranquilidad...

─¡Aquí estas! ─ gritó Sumire con rostro severo. Su aliento era entrecortado y su alice estaba activado. ─ ¡Venga! Tenemos que ir al salón, no hay tiempo. ─ y sin esperar mi respuesta empezó a tirar de mí. 

Aquello ocasionó que soltará una débil gemido. Sumire me miró entre preocupada y sorprendida por lo que decidí responder por ella.

─ ¿Recuerdas? La herida. ─ dije apuntando mi vientre. Esta abrió los ojos antes de disculparse, para luego colocarse detrás de mí y empezar a empujarme. No tenía escapatoria...

Una vez llegué al salón todos me miraron sorprendidos, no era normal verme por allí. 

─Ahora vete a cambiar. ─ me ordenó mi secuestradora. Le dirigí una mirada asesina antes de ir a los probadores, pero, al parecer, mi suerte se había puesto de mi lado, o eso pensé.

Pov Narración:

Permy miraba impaciente el probador, sería la primera vez que la vería con un vestido y no podía ocultar sus ansias, aunque no era la única así. Muchos de la rama de física miraban con curiosidad y ansia a que la niña de las feromonas saliera del vestidor. 

Cuando el probador se abrió todos abrieron los ojos. ¿Quién era él? 

Dentro del vestidor, un apuesto niño estaba acabando de colocarse bien el sombrero. Todas las chicas, sin poder evitarlo, empezaron a babear, ¿quién era aquel hermoso príncipe?

La chica de las feromonasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora