No Es Simple Acoso

Capítulo 24.

Todoscomenzaron a hacer expresiones burlonas mientras me miraban. Sentía como ardían mis mejillas de lo sonrojada que estaba,y no es a causa del beso de Villalpando sino de la gente que nos vió.
Caminé furiosa al salón de clases con la esperanza de no haber  llegado tarde. Entré y me senté lo más alejada de los demás.

"Nos vemos en la noche. Adiós".

No podía sacarme a Villalpando de la cabeza. No podía sacarme aquél beso. No podía.

Por otra parte, las clases fueron  bastante lentas, casi me quedo dormida durante la clase de español. Por fin dieron el timbre y puse salir de ahí. El problema era que no quería hacerlo.

"Nos vemos en la noche. Adiós ".

Ahora sí que él ha pisado la raya.
Salí de la escuela y me dirijí a mi casa. Abrí ese portón viejo que desde hace años he querido  derrumbar ,rechinaba desesperadamemte mientras lo movía. Pisé el suelo de la casa y pronto este se quebró haciéndome caer .

-¡Carajo!-me quejé.

Caminé con prisa  a mi habitación y me cambié de ropa. Volví fuera y miré a mi madre.

-¿Cómo te ha ido en la escuela, hija? -pronunció con una media sonrisa.

-Muy bien mamá. ¿Tú estás bien?

-Claro que sí. Date prisa, llegarás tarde a trabajar.

Atendí sus indicaciones y salí.
Llegando al restaurante me coloqué el uniforme y salí, y porsupuesto,ahí estaba Villalpando sentado en la misma  mesa de siempre con una taza de café ya frío en la mesa. Lo miré unos segundos y después me encaminé a una mesa que no fuera la suya, pude mirar como me veías con una expresión de confusión, pero no me importó.  Hoy, Villalpando no está.