I'm a Girl and I'm in One Direction

Capítulo 10

A Little Change

-¿Estás bien?-me preguntó una varonil voz con ese acento típico de aquí. Alcé la vista y me encontré con unos ojos azules preocupados.
-Ah...sí, sí, estoy bien.-dije cuando reaccioné. Esa mirada me hipnotizó. El chico tendría mi edad; cabello negro, tez clara, facciones perfectas y brazos fuertes. Al tratar de sostenerme de algo para no caer, atrapé sus brazos, por eso se que es musculoso moderado. Me enderecé y arreglé mi cabello un poco.-Lo siento, venía mirando...
-¿Al tumulto de gente de ahí?-apuntó con su dedo. Asentí un poco avergonzada.-¿Te pasa seguido?-alcé la vista desconcertada. Él no había mencionado nada sobre conocerme a mí o a los chicos, pero lo ignoré.
-Solamente cada vez que salgo.-dije con naturalidad. El chico carcajeó dejandome ver la hermosa sonrisa que tenía, logrando que yo le devolviera la misma acción.
-...ahí esta.-escuché la voz de Harry por detrás.-Oye, ya nos tenías preocupados...
-Lo siento,-me giré para explicarles.-llegaron unos fans y comenzaron a pedirme fotos y autografos y yo...
-¿En serio? ¿Donde...?
-No, Harry, Simon nos dijo que interactuaramos lo menos posible con ellos.-advertí. Odiaba eso de estar en The x Factor, no poder estar con las personas por las cuales sigues en la competencia es tan...tonto.
-¿Quién es él?-pregutó Zayn de la nada refiriendose al chico con el que había chocado. Me coloqué a su lado.
-Él es...-lo pensé bien, y no le había preguntado.-Lo siento, no te pregunté, ¿cómo te llamas?-soltó una risita.
-Jason Blake.-nos quedamos mirando a los ojos durante unos segundos, pero fuimos interrumidos por los chicos y su sobreprotección.
-Okay...-Harry me rodeó los hombros con su brazo derecho.-Ya nos vamos.-murmuró sólo para nosotros.-Gusto en conocerte Jake...
-Jason.-corregimos mi nuevo amigo y yo al unísono.
-Como sea.-comenzó a caminar.-Adios.-canturreó el ruloso.

Los tres nos fuimos del cine por atrás, ya que por la entrada principal estaba lleno de Directioners. Yo iba con mis brazos cruzados y muy molesta.

-¿Qué tienes, pequeña saltamontes?-preguntó Harry como si nada hubiera sucedido y no supieran el porqué de mi enojo.
-¿Y preguntas?-ambos me miraron extrañados.-Odio que se comporten así, no sean tan posesivos conmigo, necesito mi libertad.-exigí. Ambos bajaron la mirada.-Estan peor que Cory, chicos, eso ya es mucho.-Zayn sonrió.
-Se lo prometimos.-recordó Harry. A veces, cuando hablaba por webcam con Cory, los chicos se acercaban y platicabamos todos. A mi hermano le agradó que los cinco juraran protegerme de cualquier tipejo que se me acercara...pero creo que se lo estan tomando muy al pie de la letra. Me gustaba que se llevaran bien, pero no cuando se ponen de acuerdo para mantenerme virgen hasta la muerte.
-Lo se, pero no exageren.-los tres nos reímos. De la nada se me ocurrió una idea. Una brillante idea.-Se me quedó el teléfono en la sala del cine, chicos.-actué llevandome la mano a la cabeza simulando estar preocupada.
-Si vas ahora tal vez siga ahí.-sugirió Zayn. Inocentes.

Salí corriendo buscando a Jason con la mirada, hasta que lo encontré charlando con una chica más o menos de su edad. Ella me daba la espalda, por lo que le hice señas a Jason para que me viera. Funcionó. Le dijo algo a su acompañante y caminó en mi dirección a paso veloz con un sonrisa en su rostro. Esa hermosa sorisa la recordaré por siempre.

-¿Qué pasó con...tus amigos?-preguntó sorprendido de verme allí.
-Los despisté, les dije que se me había quedado el teléfono celular en la sala.-reí. Él volvió a sonreír.
-Pero, ¿por qué volviste?-metió las manos a los bolsillos de sus jeans oscuros con un movimiento tímido.
-Pues...-saqué mi teléfono "extraviado" y se lo entregué.-...quisiera tener tu número, me gustaría mantener contacto contigo.-sonreí ruborizada. Jason tomó el aparato y tecleó su número telefónico.
-Aquí tienes...Sherrie, ¿Verdad?
-Síp.-recibí de vuelta mi teléfono y lo guardé.-Bueno, ya me voy, los chicos se darán cuenta que estoy tardando demasiado.
-Claro, suerte en la presentación de mañana.-se despidió con la mano y volvió a juntarse con la chica que estaba anteriormente. Esta, antes de que Jason pudiera decirle cualquier cosa, abrazó su cuello y lo besó como si no hubiera un mañana. Aparté la mirada y me encaminé a donde estaban los chicos.

Ver aquello me hizo enojar, no con él, fue ella la que se lanzó a Jason. Que exibisionista. ¿Qué le pasa a esa chica? ¿Y por qué yo estoy así? Si es su novia esta en su derecho de besarlo, aunque hay que admitir que fue algo desagradable.

-¿Lo encontraste?-preguntó Harry cuando llegué a su lado.
-¿Qué...? Ah, sí.-saqué el teléfono de mi bolsillo, se los enseñé y lo volví a guardar. Estaba un poco distraída por lo que pasó hace unos minutos.
-Pues entonces vamonos...
-Vayanse ustedes, yo haré otra parada.-besé la mejilla de ambos y comencé mi camino hacia la peluquería.

Recordé lo que Jason dijo: "Suerte en la presetación de mañana".Tenía el terrible presentimiento de que la presentación sería la última de One Direction debido a la competencia que teníamos, por lo que necesitaba algo para que la gente me recordara, algo destacado, algo que había querido hacer desde pequeña. Iba a teñir mi cabello de un color claro. Pasar de un tono negro casi perfecto a un castaño casi rubio sería difícil de olvidar para los Jueces y el público. Entré a la peluquería y esperé a que me atendieran, lo que sucedió muy rápido. Le dí una descripción específica de lo que quería hacer en mi cabello. Al terminar, apenas podía reconocerme. Quedó precisamente como yo quería, era muy lindo. Pagué el tratamiento, lo agradecí y me fui del local, no sin antes tomarme algunas fotos con las trabajadoras de ese lugar.

Antes de entrar a la casa me coloqué el gorro de mi polerón para que no vieran mi pequeño cambio y, al entrar, pasé rápido a nuestra habitación.

-¿Sherrie?-preguntó la voz que no había escuchado en todo el día.
-Hola, Liam.-me volteé. Él me miraba extrañado.
-¿Por qué el gorro?-señaló la parte de mi polerón que me cubría la cabeza.
-Porque me hice algo en el cabello y no quería que vieran.
-¿Tan mal esta?-bromeó sacandome una sonrisa.
-No es eso, quiero que sea una sorpresa para la presentación de mañana.-expliqué dejando mi teléfono sobre la mesita de noche que estaba junto a mi cama. Al volverme hacia Liam, lo ví cerrando la puerta silenciosamente.
-¿Qué haces...?-rápidamente me acorraló contra la pared y dejó su rostro muy cerca del mío. Amo que haga eso...aunque también lo odio, me siento vulnerable. Nuestras respiraciones se mezclaron. Liam cerró sus ojos y dió un suspiro.
-No se qué hiciste conmigo, Sherrie Monteith, sea lo que sea me hace débil cuando me miras.-susurró. Lo observé enternecida por las palabras que pronunció, ¿será posible que...sienta lo mismo que yo?
-Liam, ya hablamos de esto...
-Claro que no.-abrió los ojos.
-Claro que sí.-me miró con el ceño medio fruncido.-Te dije que como estabamos en una banda juntos todo se iba a mezclar y...que iba a ser difícil.
-Nunca lo sabremos si nunca lo intentamos.-murmuró. Se acercó peligrosamente a mí. Esta vez algo me dijo que sería diferente. Estaba cansada de negarle al chico que me gusta un beso, era incoherente y bastante difícil, a decir verdad.
-¿Hay alguien ahí?-oímos a alguien tocar la puerta. Maldecí en mi fuero interno, y después en voz alta.

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